Jorge Espí Llopis. Abogado y Graduado Social
María Teresa Durán. Abogada, criminóloga y mediadora
La pandemia no sólo nos metió en casa, trajo el que los ciudadanos estén en casa aburridos. Unos viendo series de forma compulsiva, otros se quedaban viendo documentales por la noche, y entre medias, no paraban de salir anuncios sin parar, invitando a jugar en las casas online de apuestas.
Las asociaciones de ludopatía no paraban de quejarse del gran aumento de este tipo de apuestas, donde regalan bonos de 300 euros para jugar desde el móvil; más adelante nos adentraremos en los problemas que causan en las familias, que ven como los ingresos se van por esta enfermedad, causando robos, ruinas y suicidios.
Los salones de juego se concentran donde hay colegios
Cerca de los colegios
Pero lo más preocupante es que los salones de juego se concentran donde hay colegios. Comenta una ciudadana: «Yo he visto a chavales salir del colegio con uno o dos euros que le ha dado la familia para que se compren un bocadillo, y se van a la casa de apuestas». El Gobierno ha prometido abordar el problema «para evitar que los locales de apuestas puedan abrir en determinados horarios y que limiten su proximidad a los centros escolares, como hoy en día ocurre en muchas ciudades del país desgraciadamente», declaró Pedro Sánchez.
También afecta a las empresas. Esta semana era detenido en Santa Pola un ludópata, por robar a sus compañeros de trabajo, aprovechando que compartían vestuario. Anotaba los datos personales extraídos de los documentos de identidad y de las tarjetas de crédito y realizaba apuestas deportivas por Internet.
Equipos de fútbol y grandes ídolos de los jóvenes han promocionado las casas de apuestas
Eliminar la publicidad
Alberto Garzón ha hecho oficial que este mes de octubre se aprobará el Real Decreto Ley que eliminará la publicidad de las casas de apuestas de las camisetas del fútbol español. El ministro de Consumo ha confirmado ese borrador que se filtró en el mes de julio y que venía a asegurar que desde esta próxima temporada desaparecería este tipo de forma de financiación.
«Vamos a prohibir en el Decreto que se aprueba en octubre que los clubes de fútbol lleven casas de apuestas en las camisetas. Es una temeridad los clubes que están firmando por 2 o 3 años y tendrán que corregirlo, se están equivocando», explicó Garzón.
Y esta muy bien que se prohíba, porque nuestros hijos miran la TV y ven la camiseta del Real Madrid (la lucida con Bwin) o de otros clubs, o que en los anuncios se dice que es la casa oficial de apuestas de su club de referencia, y es una clara incitación a que jueguen desde pequeños: o que vean a sus ídolos como Rafa Nadal u otros grandes deportistas anunciando las mismas.
La publicidad en televisión sobre este tema es constante
Prohibidos hasta 1977
Los juegos de azar privados estuvieron prohibidos en España hasta marzo del 1977, año en el que se permitió la habilitación de bingos, casinos y la instalación de máquinas tragaperras en establecimientos de ocio y bares. Hasta esa fecha el control de los juegos de azar era exclusivamente del Gobierno y la oferta se limitaba a la Quiniela, la ONCE, el Sorteo de Navidad o el Sorteo del Niño.
Décadas después de la legalización del juego privado, el mercado ha renovado la oferta, ha incidido en otros sectores de la población y se han impuesto nuevas preferencias de juegos, a la vez que las empresas centraban su inversión en la incorporación de los juegos online y en la compra de espacios publicitarios en los principales medios de comunicación.
Casinos, bingos, salones de juego y casas de apuestas aumentan la presencia en las ciudades y, junto con las empresas del juego online, se acercan en beneficios a los números de la ONCE, loterías y apuestas como Quinielas, Bono-Loto, Primitiva y Euromillón. Un mercado donde millones de personas ponen en circulación más de nueve mil millones de euros.
Juego virtual
Con la llegada del juego virtual de apuestas, a los que se puede acceder a través de aplicaciones que se descargan en el móvil, tablet y ordenador; casinos, póquer y bingo por internet revolucionó el mercado del juego en España. Después de una época marcada por la crisis económica, en apenas siete años la cantidad de capital jugado se multiplicó.
En 2018 había 832.000 cuentas activas de clientes que invirtieron 700 millones de euros para jugar en este segmento del mercado, según los datos oficiales proporcionados por la dirección general de Ordenación del Juego (DGOJ). Las empresas de este sector económico han pasado de la clandestinidad virtual a comprar tiempo de exposición prime time en medios de comunicación públicos y privados, poder jugar directamente con una llamada, patrocinan eventos de todo tipo y equipos deportivos de primera división.
Los efectos de la ludopatía
La ludopatía o el juego compulsivo es una alteración en el núcleo familiar. Como cualquier otra adicción lo sufren directamente las familias. La incertidumbre, dudas e inestabilidad, provoca ansiedad y frustración en la familia. Llevan al suicidio de los afectados que, como indicábamos al principio de este artículo, este año ha superado al de muertos en accidentes de tráfico.
No tenemos que olvidar que es una enfermedad patológica y que no sólo afecta a la familia y sus integrantes, también afecta a la vida laboral, relaciones interpersonales, personal, tiempo libre y de ocio…
Consecuencias en las familias
Por la pérdida de control y habilidades para dejar el juego, no existe comunicación y por ende no hay diálogo entre los integrantes del grupo familiar; en consecuencia, las relaciones se ven afectadas y se vuelven más tensas, las mentiras son frecuentes convirtiéndose en un engaño la vida por parte del ludópata y de la familia.
Asimismo, el jugador destruye toda la credibilidad que tenía su familia en esta persona, ya que suelen negarlo fehacientemente. El problema que padecen destroza la economía de los integrantes de la familia, se endeudan y endeudan a estos integrantes.
Los matrimonios o parejas sufren de forma física y psicológica, padecen estados de ansiedad o depresión, úlceras por el estrés… y todo esto generado por el ambiente que le hace vivir el o la jugadora; inclusive llevan una vida desordenada donde solo existe conflicto y discusión y que al final termina disolviendo la unidad familiar: divorcios, separaciones y alejamiento por parte de hijos y padres; además también se pierde los lazos de afinidad y amigos. Los hijos de ludópatas tienen problemas de aprovechamiento y conducta en el colegio, huidas de casa, suelen tener arrestos policiales o abuso de alcohol y drogas.