Entrevista > Herick Campos / Director general de Turismo de la Comunitat Valenciana (La Vila Joiosa, 12-marzo-1976)
En la mayor parte de los destinos turísticos de la Comunitat Valenciana el verano supuso un alivio, muy precario, en lo que a la principal actividad económica de la región se refiere. En los meses más duros del confinamiento la campaña se dio por perdida, pero la apertura de los mercados en toda Europa permitió presagiar, incluso, un verano razonablemente bueno.
Pese a ello, diversas decisiones políticas pusieron varios palos en la rueda del turismo valenciano que, con todo, supo salvar los muebles. Ahora, ya en otoño, las calles se han vuelto a vaciar y toca hacer balance y pensar en el futuro a corto plazo. En ello está el Director general de Turismo de la Comunitat Valenciana, Herick Campos, y su equipo.
«Antes de que estallara la crisis estábamos teniendo un mes de enero espectacular»
¿Cómo se planteaba la temporada turística en la Comunitat Valenciana antes de que estallara la crisis del coronavirus?
Enero había sido un mes espectacular. El mercado británico, que el año anterior había bajado un 1,6%, en 2020 estaba aumentando un 16%. Esa es la gran diferencia con otros destinos de España: teníamos una gran desestacionalización en dos zonas muy marcadas como son Valencia y la Marina Baixa. A ellas, hay que sumar la Vega Baja y la Marina Alta por la cuestión de las segundas residencias.
Además, se estaba incrementando el Turismo MICE [acrónimo en inglés de reuniones, convenciones, incentivos y exhibiciones] y el de cruceros. El estallido de la crisis nos pilló completamente desestacionalizados y en una muy buena temporada.
Uno de los principales motores turísticos del país, Benidorm, se adelantó casi una semana al cierre total de sus establecimientos. ¿Supuso un problema o fue una decisión acertada?
Hay que tener en cuenta que veníamos del anuncio de la no realización de las fallas o que un mercado tan importante como el italiano se estaba cerrando. Con todo ello, creo que esa decisión no tuvo un efecto negativo sobre el resto, sino que permitió que una zona donde se encontraba el grueso de los turistas internacionales se pudiera vaciar de una forma ordenada.
Cuando se produjo el decreto del cierre de los establecimientos y el Estado de Alarma, Benidorm ya estaba culminando su ‘operación salida’. Fue una decisión acertada.
«La decisión de cierre del Gobierno británico supuso un golpe durísimo para el turismo en la Comunitat Valenciana»
Tras la reapertura y antes de la decisión del Gobierno británico de poner en cuarentena a los turistas que viajaran a España, las previsiones parecían remontar de forma más animada a cómo se había previsto durante el confinamiento.
Teníamos la perspectiva de un verano ni mucho menos excelente, pero sí que se iba a poder salvar, pero si bajamos incluso más al detalle que al nivel de destino y nos fijamos en los propios establecimientos, vemos que hay hoteles que tienen basado su negocio en un mercado muy concreto. Por lo tanto, supuso un golpe durísimo respecto a lo que hubiera sido un verano razonable.
Pero el turismo nacional sí se comportó relativamente bien…
Efectivamente, ha sido un verano razonable en aquellos destinos que dependían más del turismo nacional.
«Las ganas de viajar de los mercados emisores siguen estando ahí. El cariño a esta zona lo tienen y, por lo tanto, van a seguir viniendo»
Hay una palabra que marca el modelo de éxito del turismo en la Costa Blanca y que usted ha repetido en varias ocasiones: desestacionalización. Ese logro se consiguió a base de años de esfuerzo, ¿se podrá recuperar con facilidad una vez superemos la crisis?
No me atrevo a decir fácilmente, porque podría pecar de osadía, pero creo que se recuperará. Lo más importante es el grado de repetición que hay sobre un destino. Además, las ganas de viajar de los mercados emisores siguen estando ahí. El cariño a esta zona lo tienen y, por lo tanto, van a seguir estando.
¿Qué pueden hacer desde la administración para parar el golpe en la temporada baja que se acerca?
Hemos redirigido el Plan Operativo de Márketing con acciones puntuales en aquellos pocos mercados internacionales que quedaban abiertos. Además, hemos desarrollado una campaña de ámbito nacional y autonómico de más de un millón de euros recordando que somos un destino cuyo principal atractivo es ese ‘Mediterráneo en vivo’, pero que, además, ofrece seguridad porque se han tomado las medidas oportunas.
En esto quiero reconocer el trabajo hecho por ayuntamientos y empresas porque, siendo de las comunidades que mejor ha funcionado en España, no hemos tenido ningún brote en establecimientos turísticos.
Se está trabajando en la creación de un corredor seguro con Reino Unido. ¿En qué situación se encuentra esa importante negociación?
En eso ha habido una implicación directa del President, Ximo Puig, desde el primer momento. Él mismo habló con el embajador del Reino Unido para que, por lo menos, tuvieran información de primera mano de la situación real y de las medidas que estamos tomando. También reunió a todos los cónsules acreditados en la Comunitat Valenciana con ese mismo objetivo.
Lo que queremos es que, cuando se pueda abrir ese corredor, estemos en primera línea como destino seguro y con recursos para actuar. La idea ahora es que, a la mínima que la situación sanitaria lo permita, podamos organizar esos grupos burbuja provenientes de Reino Unido.
Insisto, ¿en qué situación está ahora mismo esa posible realidad?
Creo que son los propios representantes de Reino Unido los que quieren que sus ciudadanos puedan venir aquí. Tenemos unos 300.000 británicos que tienen aquí su segunda residencia y otro tanto que vienen a visitar a los primeros. Ellos están deseosos de poder poner en marcha estas medidas.