La Comparsa Labradores de Petrer está de enhorabuena porque este año cumple 75 años. Tres cuartos de siglo en los que lleva recogiendo el cariño de todos los festeros, al ser una de las agrupaciones con más tradición de cuantas desfilan por las calles y plazas de la localidad cada mes de mayo, en las fiestas de Moros y Cristianos en honor a San Bonifacio Mártir.
Un aniversario que llega en plena pandemia por coronavirus, pero que no ha logrado empañar el espíritu de un colectivo que goza de inmejorable salud, a pesar de que las restricciones sanitarias han obligado a la suspensión de todo acto multitudinario. Es, por lo tanto, un buen momento para echar la vista atrás y recordar sus comienzos.
El 31 de enero de 1946 se constituyó formalmente la comparsa, presidida por Jesús Navarro ‘El Vicari’
Nacimiento a dos bandas
El origen de la Comparsa Labradores se puede enmarcar en los difíciles años de la posguerra española, cuando, en plena época de privaciones y hambre, a un grupo de amigos de Petrer se les ocurre la idea de crear una nueva comparsa en la localidad. No andaban faltos de ilusión ni de ganas aquellos esforzados jóvenes, pero sí de dinero para poner en pie un proyecto de esta envergadura por el que llevaban suspirando bastante tiempo.
Poco tardó la suerte en llamar a su puerta, gracias a la inestimable colaboración del Sindicato Agrícola de Petrer, pieza fundamental en toda esta historia y que acudió en su auxilio para hacer viable económicamente la empresa. Y así, un 31 de enero de 1946, se constituyó formalmente la asamblea constituyente de la Comparsa Labradores bajo la presidencia de Jesús Navarro Segura ‘El Vicari’, alcanzando unos meses después de su nacimiento un hito histórico al convertirse en la primera y única de Petrer que ha tomado parte en la fiesta el mismo año de su fundación.
Otro nombre propio que no hay que olvidar es el de José Poveda Payá, ‘Pepe el del sindicato’, a la sazón presidente del Sindicato Agrícola, cuyo apoyo fue fundamental para el despegue de la comparsa, llegando a presidirla tras Jesús Navarro.
Es la única comparsa de Petrer que tiene patrón propio y que ha desfilado el mismo año de su fundación
Con patrón propio
Es importante destacar que es la única comparsa de Petrer que se encomienda a la advocación de dos santos: San Bonifacio y San Isidro, patrón de los labradores, cuya imagen se procesionaba en romería cada 15 de mayo, día de su festividad.
Dicha romería dejó de realizarse en 1966, dando paso a partir del año siguiente al Día de la Hermandad, una jornada para la confraternización y convivencia entre todos los comparsistas, que desde sus inicios se ha venido celebrando en enclaves como Ferrussa, Santa Bárbara y Caprala, hasta su actual ubicación definitiva en el centro urbano. En 1992, con motivo del 25 aniversario de esta fecha festiva, se recuperó la Romería, esta vez integrada en el seno del Día de la Hermandad.
Pronto se vio la necesidad de contar con casa propia y, para ello, en 1973 se adquirió en pleno corazón del casco histórico una nueva sede, en el número 13 de la Plaça de Dalt, inaugurada al año siguiente y que sigue sirviendo de epicentro para todo tipo de eventos.
Actualmente está compuesta por 350 comparsistas repartidos en veinte cuadrellas de adultos y dos de niños
Espiga de Oro
Por otro lado, es habitual que los Labradores realicen reconocimientos a festeros, instituciones y colaboradores relacionados con la comparsa y, en este sentido, la máxima distinción que se otorga es la llamada Espiga de Oro, concedida tan solo en dos ocasiones: a Elías Bernabé Payá en 1978 y a Luis Bernabé Reig en 1992.
Desde entonces, la comparsa no ha dejado de avanzar a buen ritmo hasta entrar en el nuevo siglo, creciendo hasta llegar a los aproximadamente 350 comparsistas que hoy la forman, repartidos en veinte cuadrellas de adultos y dos de niños.
‘Sueños festeros’, himno oficial
Reflejo de los nuevos tiempos, y una de sus principales señas de identidad, es el pasodoble ‘Sueños festeros’, compuesto por José Ángel Carmona Parra para la capitanía de 1992, que desde entonces acompaña musicalmente las entradas de la comparsa. Tan profundamente ha calado esta pieza en el corazón de todos los Labradores, que en 2017 fue adoptado como su himno oficial.
La entidad ha sido también pionera en algunas de las costumbres de las fiestas de Moros y Cristianos de Petrer, entre ellas ser la primera en crear la figura del jefe de comparsa, posteriormente adoptada por el resto de agrupaciones festeras.
Hoy, la Comparsa Labradores, bajo la presidencia de José Milán, ha tenido que adaptarse a las restricciones de la pandemia suspendiendo y aplazando la mayoría de los actos conmemorativos de su aniversario. De entre las pocas actividades que la crisis sanitaria le ha permitido realizar, destacan el estreno de un documental, que realiza un recorrido visual por su historia, y la próxima publicación de un libro conmemorativo de los 75 años.