Una vez evaluado por los Servicios Técnicos Municipales el Presupuesto Participativo, presentado por el Consejo Vecinal, se han dado a conocer las actuaciones que van a llevarse a cabo en Benidorm este año, después del análisis de todas las propuestas planteadas por las asociaciones de vecinos y ciudadanos a título personal.
El alcalde de Benidorm, Toni Pérez, y los concejales de Participación Ciudadana y Espacio Público, Ana Pellicer y José Ramón González de Zárate, han mantenido una reunión de trabajo con los vicepresidentes del Consejo Vecinal, Teresa Garrido y Manuel Sánchez Notario. Con posterioridad, Toni Pérez ha trasladado los informes de viabilidad que permiten su ejecución a los distintos grupos políticos que componen la corporación incorporándolos en el orden del día de las próximas comisiones informativas.
Toni Pérez ha agradecido la implicación de los vecinos “para mejorar con sus propuestas mucho más la ciudad” y ha recordado que el Presupuesto Participativo parte con “al menos el 5% del Presupuesto Municipal, lo que viene a suponer alrededor de 600.000 euros”.
En el informe de viabilidad, los técnicos municipales han estudiado cada una de las 67 propuestas presentadas al Presupuesto Participativo de este año, unas actuaciones que, en su conjunto, superan con creces la partida destinada a él.
De entre las iniciativas, una que ha sido destacada muy positivamente en el informe de viabilidad técnica, se refiere a la rotonda en la que convergen Ricardo Bayona con la avenida de Venezuela. “La confluencia –ha matizado el alcalde- de la zona residencial, el CEIP Ausiàs March, el centro de salud de Foietes, el centro de especialidades y el colegio Miguel Hernández en su parte superior con las entradas del tráfico a Benidorm proveniente de Poniente”.
Se trata de un enclave urbano en el que tráfico genera “bastante tensión” en algunos momentos del día, “sobretodo coincidiendo con las entradas y salidas de los centros escolares”. La propuesta vecinal apuesta “por ganar en calma y mejorar la fluidez del tráfico”.
A partir de esta iniciativa, los técnicos municipales han realizado el proyecto y la valoración de lo que sería la actuación completa, desde la rotonda elíptica de Ricardo Bayona que da entrada a Jaime I, hasta la avenida de Nicaragua que da acceso al Miguel Hernández. “La intervención global –ha precisado Toni Pérez- rondaría los 900.000 euros, con lo que sobrepasaríamos con creces lo que es el Presupuesto Participativo, pero vamos a ver cómo podemos encajar el proyecto para llevarlo a ejecución”.
El plan propone el remozado total de la zona “con la creación de nuevos pasos peatonales semaforizados y la autorregulación del tráfico según la intensidad”. Asimismo, apuesta por la renovación y ampliación de las aceras y zonas peatonales, la creación de un carril bici con dirección a Vía Parque y con la conversión del sentido de bajada hacia Jaime I en ciclo vía.
Muchas de las proposiciones de los vecinos, a pesar de que no podrán ser incorporadas al Presupuesto Participativo, acabarán siendo realizadas por el Ayuntamiento, las que solicitan la plantación de arbolado, o inciden en proyectos de accesibilidad “porque el Ayuntamiento va a ejecutarlas sí o sí”. “Este equipo de gobierno –ha subrayado el alcalde- tiene muy claro que la ciudad tiene que ser accesible y en todo hueco en el que se pueda plantar un árbol se plantará”.
Toni Pérez ha puesto de ejemplo el Presupuesto Participativo de 2020, cuyo fondo “fue donado por el Consejo Vecinal para atender a las familias afectadas por la Covid-19. Y debemos agradecérselo”. Sin embargo, muchas de sus propuestas han sido ejecutadas directamente por el Ayuntamiento “como las actuaciones en Juan Antonio Baldoví, calle Calpe o Plaza de las Tiendas”. Pérez ha anticipado que “seguramente” los 600.000 euros que se gestionarán a través del Consejo Vecinal acabarán “doblándose o triplicándose” al incorporarse buena parte de esas ideas al Presupuesto Municipal.