Petrer va a dar respuesta a una de las principales demandas de los jóvenes con la construcción de un centro juvenil y de ocio que estará ubicado en el actual Mercado Central, que abandonará sus instalaciones para dar paso al nuevo complejo multifuncional.
Así se ha anunciado desde el equipo de gobierno municipal, en lo que va a ser uno de los proyectos estrella de los próximos meses, que busca ofrecer una oferta atractiva de ocio y tiempo libre, tan escasa en el municipio, a este segmento de edad.
La intención es crear un espacio que sirva de foco de atracción para la juventud, abierto y polivalente, con salas de estudio amplias, para aprovechar los 2.700 metros cuadrados de superficie que ocupa el Mercado Central y que genere también alternativas de formación y de emprendimiento.
Necesidad de transformación
El Casal de la Juventud se ha quedado pequeña, por eso desde la concejalía se lleva tiempo buscando un espacio alternativo amplio, funcional, polivalente y moderno, y en este sentido el Mercado Central “es el que mejor cumple todos esos requisitos”, según explica el concejal de Infancia y Juventud, Alejandro Ruiz, que ve una buena oportunidad para darle un impulso a un espacio que en los últimos tiempos venía languideciendo por el abandono continuo de comerciantes.
“Desde la concejalía llevábamos tiempo dándole vueltas a la idea de ofrecer un lugar de encuentro joven donde poder centralizar toda la oferta de ocio, talleres, información juvenil y estudios, porque somos conscientes de que en Petrer no hay atractivo para los jóvenes. El Casal de la Juventud no es capaz de dar respuesta a todas las necesidades que planteamos desde la concejalía por falta de espacio, y muchas veces no teníamos más remedio que descentralizar las actividades desviándolas hacia otros lugares del municipio”.
El Mercado Central se inauguró en 1972 con más de una treintena de puestos
Instalaciones antiguas y desaprovechadas
El Mercado Central, abierto en 1972, está infrautilizado porque los tres puestos fijos con los que cuenta actualmente distan mucho de la treintena larga con los que se inauguró en su día. Fue el primer y único mercado de abastos existente en Petrer hasta la apertura, en 1989, del mercado de la Frontera, que atrae a una clientela mucho más amplia.
El edificio que ahora va a ser objeto de transformación tiene muchas carencias porque “nunca ha tenido un buen diseño, es antiguo, tan solo ha sido accesible cuando se le ha dotado de ascensor, está en un sótano, y se encuentra en una zona que ha envejecido y ha perdido población en las últimas décadas”, argumenta el concejal de Urbanismo, Fernando Portillo, que reconoce que la inmensa mayoría de los comerciantes han preferido salir corriendo de allí ante la falta de expectativas, aunque, admite, cuenta con una gran baza a su favor como es su ubicación en pleno centro urbano.
A día de hoy sobreviven tan solo tres comerciantes fijos y otro que abre de manera ocasional, y uno de ellos ha informado de su pronta jubilación, así que para el ayuntamiento era prioritario dar salida a un espacio nada rentable que se encuentra semi vacío. Con respecto a los propietarios de los locales, los concejales aseguran que se está trabajando con ellos para ofrecerles una alternativa en otros lugares.
El centro juvenil incluirá espacios abiertos y polivalentes y una gran sala de estudios con horarios amplios y flexibles
Sala de estudios moderna
El proyecto se va a encargar a un arquitecto local y se encuentra aún en una fase muy embrionaria, aunque lo que sí se tiene claro es que va a ser una obra de envergadura porque va a ser necesario tirarlo todo abajo y volverlo a construir.
El nuevo espacio albergará un club de ocio abierto a toda la juventud, especialmente dirigido a una población con edades comprendidas entre los 12 y los 16 años, que son un segmento que por su edad están en tierra de nadie, “demasiado jóvenes para ir a discotecas o bares con sus amigos, pero demasiado mayores para ir a un parque infantil”, explica Alejandro Ruiz.
También se van a incluir amplios espacios polivalentes movibles, de los que el Casal de la Juventud carece por falta de espacio, y una sala de estudios que funcione abierta de día y de noche con horarios mucho más amplios de los que ofrecen las bibliotecas públicas.
El proyecto se licitará a lo largo de este año y las obras comenzarán en 2022
Revitalizar el centro histórico
La intención es darle a esta zona “más dinamismo”, continuando en la línea de revitalizar el centro de Petrer, fundamentalmente por las tardes, fuera del horario de oficinas y durante los fines de semana.
El plan, detalla Fernando Portillo, es licitarlo a lo largo del presente año y comenzar a acometer las obras en 2022.