Isabel Ordaz / Actriz
Quizás muchos la recuerden por sus míticos papeles en series como ‘Aquí no hay quien viva’ o ‘La que se avecina’, pero lo cierto es que Isabel Ordaz (Madrid, 11-marzo-1957) ha sido siempre y es una actriz de teatro.
El viernes 14 de mayo llega a Alicante para interpretar ‘El beso’ en el Teatro Principal, una obra escrita por el dramaturgo holandés Ger Thijs y dirigida por María Ruiz. Trata sobre una mujer y un hombre (Santiago Molero) desconocidos que se encuentran por casualidad, surgiendo una inesperada y profunda relación entre ambos.
Empecemos por tus inicios. ¿Cómo te metiste en esto de la actuación?
Me haces retrotraerme al Pleistoceno (risas). Pues la vida te va poniendo en distintas coyunturas y una va buscándose a sí misma. Yo tenía un sueño, y para conseguirlo me fui a estudiar a Londres y luego a la escuela de Arte Dramático. Empecé haciendo algunos pinitos en teatro independiente, un mundo que comenzaba a florecer durante la Transición.
Más adelante vinieron algunas películas y gané varios premios importantes que me abrieron puertas. Así pude entrar en la televisión, con varias series que me dieron mucha popularidad. Aún con todo, mi medio natural es el teatro. Es aquello que siempre me ha acompañado y donde yo me encuentro más artística y creativa. Desde luego, es un viaje largo ya.
También estuviste en ‘Los mundos de yupi’, programa que marcó a una generación de niños en los 80.
Fue mi primer trabajo recién salida de la escuela de Arte Dramático. Era un programa muy divertido, que me dio a conocer entre el público. La verdad es que tengo la suerte de que todo lo que hecho en televisión ha tenido bastante éxito.
A pesar de que habías ganado ya un Premio Goya con ‘Chevrolet’, supongo que ‘Aquí no hay quien viva’ fue el boom con el que todo el mundo te conocía por la calle.
Antes hice algunas series importantes como ‘Pepa y Pepe’ o ‘Todos los hombres son iguales’, así como un par de buenas películas con Manuel Gómez Pereira, pero es verdad que fue con ‘Aquí no hay quien viva’ cuando sentía que no podía coger un tren o incluso salir a la calle sin que la gente me señalara. Así es la televisión, tiene ese poder mediático. Además en este caso creo que mi personaje fue muy querido y entrañable.
«’La Hierbas’ fue un personaje muy novedoso para la época, alejado de la típica ama de casa»
Totalmente, ¿qué tenía aquella mítica ‘Hierbas’ que gustó tanto?
Yo creo que fue muy novedoso para la época. No era la típica ama de casa, sino más bien una mujer que buscaba su libertad y para eso hipotecaba todo lo que hiciera falta. Además tenía esas adicciones a las infusiones… e incluso algún porrillo, que tanta gracia hacía. Yo siempre entendí ese personaje como una composición de payaso, que a la vez inspiraba ternura.
Aclaremos ya este asunto… ¿Fue un accidente o ‘la Hierbas’ quiso matar a Paloma (Loles León) cuando la tiró por el patio?
(Risas). Eso es parte de tu oscuro universo que ha hecho fantasía con el asesinato. Fue totalmente fortuito. Ella era como los payasos, todo lo que le sucedía era accidental. Lo único que quería era ser feliz, y enamorarse. Por eso hacía una pareja tan entrañable con José Luis Gil.
Con José Luis Gil siempre has tenido una química especial, aún interpretando personajes muy diferentes.
Es un estupendo compañero y actor. Cuando hemos hecho comedia a José Luis siempre le ha tocado el papel de portor o serio, mientras que yo era la extravagante. Si estuviéramos en el circo, él sería el Augusto y yo la Zapatones.
La verdad es que teníamos una relación fantástica, porque él toleraba muy bien mis excesos interpretativos. Eso me daba mucha confianza. Nos compenetrábamos estupendamente.
Y cuando el producto ya parecía bastante agotado… empezáis con ‘La que se avecina’ y alcanzáis incluso más éxito.
Fue una suerte de continuidad. Yo estuve algunas temporadas, hasta que ya sentí que era demasiado. La televisión puede mermar tus capacidades interpretativas pues desgasta mucho, y la gente te asocia a un solo personaje. Siento defraudar, pero la verdad es que ya no sigo la serie.
De hecho en algunas temporadas estuviste ausente para hacer teatro… y eso que supongo que la televisión paga bastante mejor.
Es que el teatro siempre ha sido mi auténtica vocación. Es como si a un profesional de piano le dices que toque el bombo. Pues está bien durante algunos años, pero al final necesita hacer lo que realmente ama. Por supuesto tienes razón, el dinero está en la televisión y el cine. Pero bueno, no solo de pan vive el hombre y hay otras cosas aparte del dinero.
Hablemos pues de teatro. ¿De qué trata ‘El beso’?
Es una tragicomedia. Una pareja de desconocidos se encuentran en ese otoño de la vida que son los cincuenta años. Ambos arrastran algunas heridas emocionales y de repente se conocen caminando por el campo. Ella ha recibido unos resultados médicos un poco dramáticos y él está reflexionando sobre su fracaso como actor. Poco a poco va surgiendo entre ellos una relación muy bonita. Van enamorándose… o eso parece. Les pasa un poco de todo.
La obra tiene unos diálogos excepcionales con situaciones tanto divertidas como dramáticas. Es el encuentro de dos seres humanos en un momento crítico y sensible de sus vidas. A veces nos ocurre que somos más capaces de abrir nuestra intimidad a desconocidos que a personas de nuestra propia rutina.
Es cierto… ¿por qué nos pasa esto?
Con los desconocidos no partimos de esos lugares comunes que ya tenemos con nuestros familiares, amigos, amantes, etcétera. Por ello surge esta magia entre los dos protagonistas. Además el autor les pone sagazmente en un lugar solitario en plena naturaleza, lo cual también contribuye a facilitar las confidencias.
‘El beso’ viene a concentrar en apenas 90 minutos lo que pasa en un matrimonio a lo largo de 40 años juntos (risas). Entre ellos se perturban, se enfadan, se recriminan cosas… pero al mismo tiempo encuentran en la otra persona esa atención curiosa o esa mirada que ya no perciben en su marido o esposa. Es una obra de alta temperatura emocional, basada en la relación que se forja entre ellos dos.
«Me encanta vuestro clima, hay que ver lo bien que vivís aquí»
¿Qué relación tienes con Alicante?
He veraneado algunos años en la Costa Blanca porque tengo varias primas por la provincia. Me encanta vuestro clima, hay que ver lo bien que vivís aquí. Además he actuado varias veces y siempre con una respuesta muy buena. El público alicantino es bastante ilustrado, buen aficionado al teatro.
Aparte de actuar, también has publicado varios poemarios. ¿Tienes algo ahora entre manos?
Lo cierto es que sí. Acabamos de empezar con esta gira de ‘El beso’, pero en un futuro cercano quiero convertir algunas de mis poesías en un espectáculo teatral. Cada vez me interesa más la palabra como significado, significante y búsqueda interior de mi propia voz.