Después de un verano marcado, además de por las restricciones, por las dudas y las distintas adaptaciones que las playas, como otros muchos lugares de uso público, tuvieron que ir aplicando para cumplir con las medidas sanitarias surgidas inmediatamente después del confinamiento primaveral de 2020, la nueva temporada estival llega a las costas españolas sin que, de entrada, se atisben grandes cambios respecto a lo vivido hace doce meses.
Similar al año pasado
Es cierto, y hay que congratularse por ello, que el ritmo de vacunación parece haber alcanzado, al fin, su velocidad de crucero y eso podría provocar que a lo largo de los próximos meses asistamos a una paulatina relajación de algunas de las medidas que siguen en pie después de que el pasado 9 de mayo dijéramos adiós al Estado de Alarma; pero, al menos por ahora, los ayuntamientos encaran la temporada alta en sus playas de forma muy similar a como despidieron la de hace un año.
La playa del Racó de l’Albir no será ninguna excepción. Sus particulares características permitieron que incluso hace doce meses, cuando otros municipios tuvieron mayores problemas para controlar el aforo en sus arenales, a la playa alfasina le bastaran con unos pocos retoques para garantizar la seguridad de sus usuarios durante un verano que fue más tranquilo de lo esperado inicialmente.
«Estamos preparados para abrir la playa como el año pasado y a la posibilidad de que esa apertura sea con menos restricciones» L. M. Morant
Listos para desescalar
Luis Miguel Morant, concejal de Playas de l’Alfàs del Pi, adelanta que “a día de hoy, no tenemos ninguna normativa nueva que contradiga la que está en vigor desde el año pasado. Por lo tanto, aunque estamos en un punto de inflexión, estamos preparados para poder abrir la playa en las circunstancias que hicimos el año pasado, pero teniendo también preparada la posibilidad de que esa apertura se realice con menos restricciones”.
De hecho, el responsable del área de Playas confiesa que “sé que la Generalitat Valenciana ya ha contactado con los informadores que el pasado año estuvieron trabajando en las playas, por lo que entiendo que existe la intención de volver a cuidar la seguridad sanitaria en un lugar tan particular como es una playa”.
Aunque la situación, y a esto ya estamos acostumbrados, puede cambiar radicalmente de un día para otro, Morant trata de predecir qué puede pasar al medio plazo y afirma que “creo que todo irá muy condicionado a la evolución de la vacunación. Si todo va según lo previsto, llegaremos a agosto con un índice de vacunación muy alto y, por lo tanto, eso favorecería que el final del verano pueda parecerse a lo que recordamos de los tiempos previos a la pandemia”.
La playa del Racó de l’Albir volverá a contar este año con el servicio de alquiler de hamacas, sombrillas e hidropedales
Sin grandes cambios
Pese a esa visión optimista del futuro, el edil alfasino sabe que su departamento no puede bajar la guardia y explica que “vamos a seguir estando muy pendientes de la higiene de zonas y elementos comunes como fuentes, lavapiés, aseos… Es nuestra voluntad tener al turista y al vecino lo mejor atendido y eso pasa por darle también seguridad en la playa”.
El ayuntamiento seguirá haciendo especial incidencia en la limpieza de las zonas y elementos de uso común como fuentes, aseos o lavapiés
Respecto a cómo se podrá hacer uso del Racó de l’Albir este año, Morant recuerda que “en su momento tomamos la decisión de no parcelar, sino de crear cuatro grandes áreas en las que se pedía el distanciamiento social. La gente se comportó de manera fabulosa y no tuvimos ningún percance en todo el verano y, por lo tanto, vamos a seguir ese camino. Seguiremos siempre la normativa, pero velaremos para que el usuario esté lo más cómodo y seguro posible”.
Esto implica, además, que la playa del Racó de l’Albir no sólo volverá a contar con sus zonas de hamacas, sino que también contará con el alquiler de hidropedales “cuyos protocolos de desinfección están perfectamente estipulados y que el año pasado se llevaron a cabo de forma magistral por parte de la empresa concesionaria, por lo que no hay motivo para no volver a hacerlo de la misma manera este verano”.
Baño adaptado
En cuanto a la seguridad en el baño, el concejal explica que “en 2021 contaremos con el mismo número de socorristas y vigilantes en la playa para garantizar un baño seguro por parte de todos los usuarios”.
En ese sentido, desvela que “vamos a contar, por vez primera, con un punto de baño adaptado para que todas las personas con algún tipo de discapacidad puedan disfrutar de nuestra playa y refrescarse en el mar”.