Entrevista > Sandra Moñino Costa / Nutricionista (Bigastro, 16-febrero-1996)
Con el fin del estado de alarma, el aumento de la población vacunada y la llegada del verano, son cada vez más las personas que acuden a centros de nutrición para perder grasa y mejorar su cuerpo de forma saludable.
Sandra Moñino, graduada en Nutrición Humana y Dietética por la Universidad de Alicante, desvela algunos consejos alimenticios para la época estival.
¿Cómo debemos comer estos meses?
Estos meses no son distintos a otros, tenemos que llevar una alimentación equilibrada, saludable y variada. Siempre me gusta poner como ejemplo el plato de Harvard, dónde en la mitad de nuestro plato debe estar la verdura, en un cuarto del plato las proteínas (carnes, pescados, huevos o lácteos) y el otro cuarto restante de hidratos o grasas de buena calidad (legumbres, arroz, patata, boniato, frutos secos o aguacate), siempre acompañados del aceite de oliva virgen extra, de postre una fruta de temporada y para beber agua.
¿Cuántas veces se recomienda comer al día?
Depende de cada persona, ya que hay que comer cuando se tenga hambre real y no porque toque comer; si te despiertas un día sin hambre, no comas. Incluso sería beneficioso para nuestro cuerpo ya que, al ampliar las horas de ayuno, nuestros órganos tendrán más tiempo de descansar y realizar correctamente esa autolimpieza de la que tanto se habla en estas fechas. Por lo tanto, hacer las cinco comidas diarias, como siempre se ha recomendado, no es bueno para todo el mundo.
«Es recomendable consumir al menos cinco raciones diarias de frutas y verduras»
¿Cuáles son los alimentos estrella para el verano?
Tanto en esta época del año como en las demás es muy recomendable consumir al menos cinco raciones diarias de frutas y verduras de temporada. Se debe intentar variar los colores de estas, ya que cada una de ellas aporta unos nutrientes distintos.
Existen muchas formas de consumirlas. Las frutas podemos tomarlas a bocados, en macedonias, ensaladas, mezcladas con yogur, congeladas en forma de helado… Y las verduras dan mucho juego, podemos tomarlas a la plancha, salteadas, al vapor, asadas, rellenas, en forma de pizza, en ensalada…
¿Y cuáles no se recomiendan?
Es importante no abusar de helados, comida rápida, bebidas alcohólicas o carbonatadas, zumos envasados… Es lo típico que tomamos en verano para refrescarnos, y no está mal tomarlo de vez en cuando, pero un abuso de estos podría ocasionar efectos negativos en el futuro.
¿Aumentan las consultas de nutrición antes y después de vacaciones?
Muchísimo. Tanto antes, con el objetivo de la operación bikini, como después, para recuperarnos de los excesos que hemos podido tener en vacaciones. Aunque mi lucha continua con mis pacientes es que se quiten esa idea de la cabeza. Lo ideal es hacer un cambio de hábitos y lograr mantenerlo en el tiempo, sin necesidad de estar siempre haciendo dietas y dietas, probando lo habido y por haber y sin encontrar fin.
Entonces, ¿podría decirse que las dietas rápidas no hacen bien a nuestra salud?
Así es. Y mucho menos las dietas restrictivas, pues nuestro cuerpo se va adaptando a lo que le das. Si tú le das poco, intentará obtener las kilocalorías que necesita por otro lado, es decir, va a extraer más kilocalorías de los pocos alimentos que le des y tu salud también saldrá perjudicada porque no tendrá los nutrientes necesarios para estar sano.
«Buscar en internet dietas milagro es muy peligroso para nuestra salud»
Sin embargo, todavía hay quienes acaban informándose en internet, llevando a cabo las famosas dietas milagro o incluso a base de batidos, ¿qué efectos pueden tener para nuestro organismo estas dietas?
Este tipo de dietas y productos son muy peligrosos para nuestra salud. Yo estoy harta de ver día tras día los mismos casos de pacientes que vienen de hacer este tipo de dietas y además del efecto rebote que conlleva, producen así una inflamación sistémica que desencadena en migrañas, infertilidad, trastornos hormonales, intolerancias, alergias…
¿Cómo se alimentan los más pequeños?
Los niños están siendo los más perjudicados, ya que durante nuestra infancia no se comían patatas de bolsa, chucherías, comida rápida, galletas, bollerías… pero ellos empiezan desde pequeños. Por eso, en España la obesidad infantil va aumentando cada día más, junto con patologías que no se veían en niños como, por ejemplo, la diabetes.
La importancia de la hidratación
Además del calor las bebidas carbonatadas, el alcohol y las bebidas azucaradas deshidratan, aunque parezca lo contrario. Y, en estas fechas y teniendo en cuenta en la zona donde vivimos, beber agua es vital para evitar sufrir un golpe de calor.
Otras bebidas que se pueden tomar son agua con gas con unas rodajas de lima o limón, agua con hielos pequeños y trozos de fruta congelada, alguna cerveza sin alcohol, té, café o infusiones frescas.