A finales de 1991, con motivo de la guerra de los Balcanes, muchas familias fueron repatriadas a España para salvar sus vidas y la de sus hijos. La alcaldesa de Petrer, Irene Navarro, y el concejal de Cultura, Fernando Portillo, han recibido de manos de tres voluntarios de la extinta “Asociación de ayuda a la población infantil de Bosnia y Croacia”, un dossier en el que se recopilan recortes de prensa, iniciativa para recaudar fondos e incluso las diferentes aportaciones que se llevaron a cabo para sufragar la manutención y todos los gastos de los 50 refugiados acogidos en un albergue de Biar. La asociación estaba formada por voluntarios de toda la comarca, si bien las poblaciones más activas fueron Sax, de donde surgió el colectivo, Petrer y Biar.
Así lo ha explicado uno de los voluntarios de la asociación, Juan Fernando Guillén, quien ha señalado que “la unión y altruismo de gentes de distintos municipios de la comarca del Vinalopó, junto con empresas y algunas entidades oficiales, hicieron posible llevar a cabo esta importante labor humanitaria en favor de familias que lo perdieron todo y que gracias a la entrega y solidaridad de un colectivo amplio de personas pudieron rehacer sus vidas”.
Este año se cumplen 30 años del inicio de la Guerra de los Balcanes, que enfrentó a varios pueblos al este de Europa y fue uno de los peores conflictos de la historia según las Naciones Unidas (ONU). Los enfrentamientos se desarrollaron entre 1992 y 1995 y se calcula que murieron 130.000 personas. Fue una de las primeras guerras “televisadas” por lo que suscitó una gran ola de solidaridad. Otro de los voluntarios, el petrerí Boni Navarro, encargado de las finanzas de la asociación, ha destacado la gran cantidad de gente que colaboró. “Entidades como Caixapetrer o el Ayuntamiento, así como artistas e incluso pubs se sumaron a realizar actividades, y personas a título individual que todos los meses pagando una cuota que voluntariamente se habían puesto, para recaudar fondos con los que mantener los gastos del albergue para el medio centenar de adultos y niños que allí había”, ha indicado Navarro.
Uno de los pilares más importantes de la asociación en Petrer fue el matrimonio formado por Pedro Brotóns y Maruja Megias, que se volcaron desde el primer día en ayudar y que establecieron una conexión muy especial y directa con una de las refugiadas y sus dos hijos que una vez cerrado el albergue vinieron a vivir a Petrer, con los que todavía Maruja mantiene una relación casi familiar.
El trabajo entregado al Ayuntamiento de Petrer ha consistido en recopilar la documentación conservada durante el periodo que estuvo en vigor la Asociación y con ella confeccionar un pequeño dossier, compuesto por 90 páginas al que se ha incorporado una narración de los hechos, otros escritos y fotografías junto con: correspondencia, datos de ingresos y gastos, información a asociados, detalles de aportaciones económicas, familias acogidas con trabajo y nuevo domicilio, felicitaciones navideñas, relación de asociados, fotos del albergue, recortes de prensa, etc. Su finalidad es dejar constancia y memoria de aquella empresa solidaria colectiva de los pueblos y sus gentes.
La alcaldesa, Irene Navarro, ha agradecido la entrega del dossier y ha señalado que “siempre hemos sabido que Petrer es una ciudad solidaria, pero con este tipo de trabajos se reafirma todavía más”.
El dossier se conservará en la Biblioteca Municipal para que pueda ser consultado y revisado en cualquier momento.