Entrevista > Francisco José Gómez Senent / Profesor de Matemáticas en el IES Thader (Dolores, 1966)
Juanjo Berdejo Sarmiento, Sergio Fernández Cánovas, Luis Rodríguez Melgarejo y Gemma Selma Fernández son los cuatro alumnos de primero de Bachillerato del IES Thader que han participado en la séptima edición del Mathematical Modeling Challenge.
El fallo del jurado ha proclamado al grupo campeones de Europa y quintos a nivel mundial, mientras que, por ejemplo, el equipo de Oxford quedaba en la 34.º posición.
Este periódico ha hablado con Francisco José Gómez, el profesor de matemáticas responsable de alentar a estos estudiantes para que participasen en el concurso.
«Hay muchos recursos para alumnos con dificultades, pero muy pocos para los de mayor capacidad»
¿Cómo fueron seleccionados los miembros del grupo?
En el Thader tenemos un grupo de alto rendimiento en matemáticas. La enseñanza destina muchos recursos a los alumnos que presentan más dificultades, pero muy pocos a los que tienen mayor capacidad, así que nosotros desarrollamos la política de volcarnos todo lo posible también en estos chicos con un alto potencial.
Yo me dedico desde hace veinte años a impartir contenidos extracurriculares en horas lectivas a alumnos y alumnas con mayor capacidad, con más interés y más posibilidades de rendimiento… y los cuatro integrantes de este grupo forman parte de este equipo.
¿Es la primera vez que participáis en este concurso?
Sí. España solo participó el año pasado y ya entonces lo intentamos, pero no llegamos a terminar el trabajo y no se presentaron a la fase nacional.
¿Cuáles son las pruebas que el grupo ha tenido que superar?
Hay dos etapas. La primera es la fase nacional, que consistía en resolver un problema. Este año fue diseñar la vacunación covid en una provincia, cada equipo en aquella donde residiera. Para solucionarlo tenían un mes y luego se mandó el trabajo al jurado nacional, que publicó los cuatro ganadores. Aquí quedamos segundos de España.
La otra etapa es la internacional, en la que se propuso otro problema a solventar en cinco días. Los cuatro equipos seleccionados de España lo intentaron, y nosotros volvimos a quedar entre los dos primeros como en la fase previa.
¿Cuál fue este segundo problema que se planteó de forma internacional?
El jurado internacional propuso elegir al mejor deportista de la historia en una disciplina de libre elección, según el diseño de un modelo matemático. Aparte, tenían que dejarlo abierto para que otra persona pudiera aplicar esos criterios para escoger al mejor profesional en cualquier otro deporte.
Nuestros alumnos eligieron el ajedrez e hicieron un modelo de puntuación basado en diversos criterios. Luego se justificó y se redactó de forma científica, con su bibliografía, etc. Ese trabajo se mandó al jurado, que lo valoró y puntuó, y ahí es donde quedaron primeros de Europa y quintos del mundo.
«Nuestra meta era quedar entre los veinte primeros»
¿Esperabais tan buenos resultados?
Para nada; el tipo de actividad que se hace en este concurso es habitual en otros países pero no en España. Si ves los trabajos ganadores de otros años, de Australia, Hong Kong, Estados Unidos o Reino Unido, no parece que seamos capaces de llegar a ese nivel.
Aspirábamos a quedar entre los veinte primeros del mundo para poder obtener una mención honorífica. Este año lo hemos conseguido, posicionándonos los quintos a nivel internacional, pero es muy difícil.
«Lo más complicado de estos concursos es saber trabajar en equipo»
¿Qué ha sido lo más complicado para los alumnos?
Bajo mi criterio, lo más complicado de todo esto es saber estar en equipo, repartir el trabajo, etc. Este año digamos que los problemas tenían diferentes apartados bien delimitados, lo que hizo que se distribuyeran sus labores de forma más fácil. Cuando las tareas son más comunes sí que suele haber más complicaciones.
Lo más difícil es organizarse y que todos cumplan con los plazos, porque si uno falla en su labor no se puede completar el trabajo y todo el equipo fracasa.
¿De qué forma has apoyado al grupo?
Yo por norma no les puedo ayudar en el concurso. Les echo una mano antes de que se hagan públicos los desafíos en nuestras clases semanales de alto rendimiento, les explico técnicas y les enseño a trabajar en general para casos abiertos.
Tan solo les di unas orientaciones generales en diez minutos cuando salieron los problemas, pero todo el trabajo depende de ellos.
¿En qué ha consistido el premio?
En este tipo de concurso lo que se ganan son los reconocimientos, los diplomas y el mérito para su currículum, que tal vez algún día les sirva.
Habríamos ido a Shanghái a recoger el premio, en otras circunstancias, los cinco o seis equipos mejor posicionados, pero por las dificultades que hay para desplazarse por la covid no se ha podido hacer este viaje.
¿Cuál es el secreto para mantener a los alumnos motivados e interesados en asistir a esta clase avanzada de matemáticas?
No hay secreto, solo hay que dedicar tiempo y recursos a este alumnado con capacidades.
Normalmente lo que hacemos es trabajar contenidos extracurriculares, y las excusas para motivarles son en ocasiones este tipo de concursos. Los chicos y chicas van viendo resultados y se animan.