Entrevista > Evaristo Vicente Rodríguez Martínez / Delegado nacional de Cetrería de la RFE de Caza (Campillo de Altobuey, Cuenca, 11-mayo-1974)
Avalada y reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad desde 2010, la cetrería sigue siendo un arte del pasado que sigue muy vivo, ayudando a la conservación de la naturaleza y transmitiendo generación tras generación las prácticas y los conocimientos de domar, alimentar y adiestrar que definen al vuelo de aves de presa como un espectáculo.
Una labor que conoce muy bien el vecino de Benejúzar Evaristo Vicente Rodríguez Martínez, quien después de llevar toda una vida vinculado a este mundo tan apasionante ha sido nombrado recientemente delegado nacional de Cetrería de la Real Federación Española de Caza. Un cargo que llega después de serlo de la Comunitat Valenciana y que recibió con sorpresa en un primer momento. A día de hoy, este enfermero de profesión asegura que todavía está asimilando esa decisión.
¿Qué significa para usted ser delegado nacional de Cetrería de la federación?
Imagina que todas las mañanas que te levantas tienes las ganas, la ilusión, de trabajar por mejorar aquello que te apasiona, para que la gente sepa en qué consiste y puedas trasladarlo para darlo a conocer. Entonces llega un día y suena el teléfono para comunicarte, una persona a la que ni siquiera conoces, el agradecimiento de tu trabajo desinteresado y, además, para ofrecerte el cargo de delegado nacional de Cetrería de la Real Federación Española de Caza.
No cabe más ilusión que seguir trabajando para esta locura que se llama cetrería. Yo diría que significa confianza de una serie de personas que, sin conocerte físicamente, han apostado por ti y tu esfuerzo diario. También, emoción por intentar mejorar las cosas. Y trabajo, porque no he parado de hacerlo y dudo mucho de que pare una vez termine mi período aquí.
¿Cuánto tiempo mantendrá el cargo de delegado nacional?
Buena pregunta, porque hay dos opciones. La primera es hasta que el presidente de la Real Federación lo vea conveniente; la segunda, hasta que yo me canse. He de recordar que este cargo no está remunerado, no cobro nada por ello. Mi imagen, mi nombre y mi tiempo los invierto sin esperar nada a cambio.
¿Cuáles son las funciones que tiene desde que recibió el nombramiento?
Ahora mismo, el delegado nacional es la persona que representa a la cetrería dentro de la federación y a sus federados. Debe ser una figura conciliadora que escuche todas las posturas e intente mejorar día a día para dar solvencia a las deficiencias o carencias que tengamos. Defender con uñas y dientes este arte milenario que es Patrimonio Inmaterial de la Humanidad y realizar los campeonatos de España.
«El 6 y 7 de noviembre se quiere celebrar el autonómico de cetrería en San Miguel de Salinas»
En este sentido, ¿cuáles son los propósitos a nivel competitivo que tiene para los próximos meses?
Organizarlos para todos con el mayor respeto; desde luego, la cultura, la divulgación y la protección del medio ambiente no pueden faltar. Me atrevo a adelantar que veremos alguna prueba pronto en la Vega Baja, ya que está previsto que el 6 y 7 de noviembre se celebre el autonómico de cetrería en San Miguel de Salinas. Pero, claro, depende si nos deja la evolución de la pandemia.
¿Cómo ha afectado la pandemia del coronavirus a la cetrería y a ese ritmo de competiciones?
Imagino que como al resto de modalidades, con la diferencia de que nosotros la practicamos con animales que necesitan volar para mantenerse en forma. Las competiciones se pararon cuando empezó todo esto y ahora van viendo la luz poco a poco. Si no empeora, este año volveremos a disfrutar de los vuelos de nuestras aves.
Porque, además de vuelos, ¿qué otras actividades dan vida al mundo de la cetrería?
Son muchas y variadas las actividades que puede realizar un cetrero. Entre ellas estarían la divulgación de este arte, tanto en forma oral como escrita, además del carácter científico.
Destacaría nuestros encuentros en colegios, residencias de mayores o de niños con dificultades, donde trabajamos los estímulos cognitivos. En estas sesiones nos ocupamos de trasladar el conocimiento de las especies, el respeto a los animales y al ecosistema. También realizamos talleres de artesanía, de pintura, de cuero y de orfebrería. Por otro lado, llevamos la organización de campeonatos y exhibiciones de cetrería.
¿Cómo y cuándo empezó su relación con la cetrería?
Mi madre siempre me ha dicho que tengo la cabeza llena de pájaros. Desde bien pequeño ya alimentaba a gorriones, merlas o demás aves que caían en mis manos y que luego soltaba, aunque me seguían como a una madre que les da la comida. Recuerdo que el día clave fue cuando cayó en mis manos un pollo de cernícalo vulgar. Desde ese momento lo alimentaba diariamente hasta que llegó el turno de liberarlo. Curiosamente el pájaro nunca se quiso ir, y eso que lo subía a un pino. Pero no había manera, y con las mismas bajaba a por mí. Fueron muchos los intentos, incluso lo ponía más lejos, pero en cuanto me movía venía a buscarme. Empezaba a volar sobre mi cabeza hasta que lo llamaba y regresaba.
Por aquel entonces estaban emitiéndose las series de Félix Rodríguez de la Fuente, quien me dio pistas para saber y hacer cosas que me facilitarían comprender el comportamiento de aquel pequeño pájaro. Y así, poco a poco y tras leer mucho, conocí a gente que ya estaba metida en la cetrería. Me guiaron y me aconsejaron, hasta que llegué a introducirme en este apasionado mundo. Actualmente tengo cinco aves con las que cazo casi a diario y formo parte del Club Cetrero El Temple de Pilar de la Horadada.
¿Qué palabras definen su vínculo con la cetrería?
Familia, porque la cetrería es una gran familia que hace conocido al más lejano. Amistad, porque se crea un vínculo entre las personas que viven este arte. Y no pueden faltar pasión, sacrificio, trabajo, constancia y tiempo.
¿De qué espacios disponemos en la provincia para disfrutar de la cetrería? ¿Se puede cazar durante todo el año?
Los espacios de que disponemos son los mismos que para otra modalidad. Todo viene regulado por la Orden de Vedas. Se puede cazar todo el año pero en sitios donde te den permiso, para evitar daños a la agricultura; principalmente por el conejo, ya que para el resto, como bien he comentado, hay que ceñirse a dicha orden.
¿Qué limitaciones tenéis?
Nuestra principal limitación es el desconocimiento por parte de personas que no entienden o no saben cómo está la normativa sobre estas especies: estas aves no son silvestres porque están criadas en cautividad, como cualquier perro o gato. Por tanto cumplen unos requisitos, y al igual que un señor puede salir a la calle con su perro atado a pasearlo, nosotros tenemos derecho a ir con nuestra ave a placearla.
Añado: del mismo modo que una persona puede meter a su perro en su coche, yo puedo llevar a mi ave en su trasportín para pasearla y nadie me la puede requisar. Estos son algunos de los principales inconvenientes que nos encontramos.
«La sierra de Orihuela ha sido muy importante en el mundo de la cetrería»
¿La cetrería cuenta con afición en la Vega Baja y en la provincia de Alicante?
Sí. Y considero que bastante. He de recordar que la sierra de Orihuela ha sido muy importante en el mundo de la cetrería, pues Félix Rodríguez de la Fuente vino a estas tierras para llevarse halcones peregrinos y águilas perdiceras de sus cortados.
¿Cuánto tiempo transcurre hasta que se domina el ave para esta función?
Según; hay muchos tipos de crianza de un ave de cetrería, pero principalmente me voy a centrar en dos. Por un lado, los improntados. Son pájaros criados a mano y que se desarrollan viendo al humano como uno más de su familia. Introducirlos a cazar es fácil y rápido. Hay que hacer las cosas muy bien, sin prisa pero sin pausa, ya que de lo contrario puedes crear un ave indomable.
Por otro lado están los parentales. Son aquellos criados por los padres y no conocen al humano hasta el día que se extraen de las mudas. Estos pájaros, si todo se hace bien, puedes tenerlos adiestrados prácticamente en un mes.
«Desde que uno decide empezar con un pájaro, el entrenamiento debe ser diario»
Y para esa difícil tarea, ¿cómo se prepara uno? ¿Cómo son los entrenamientos?
Con paciencia, mucha paciencia, y aprendiendo de personas que realmente saben. Desde que uno decide empezar con un pájaro el entrenamiento debe ser diario y constante. Cada día avanzando un poco más, si el animal y la situación lo permiten.
Y esta pasión que tanta dedicación implica, ¿cómo la compagina para llevar adelante su trabajo y su familia?
Pues con ilusión, soñando con los vuelos que el día de mañana mi pájaro me brindará detrás de las perdices. Por supuesto, se lleva adelante con la comprensión de mi mujer, que sin ella esto no sería posible. Y también mi trabajo, que me permite disponer de tiempo, porque de lo contrario sería impensable.
A todo esto se suma el sacrificio diario por intentar hacer que un ave te comprenda y entienda lo que quieres de ella, para así crear un avatar que solo se perderá con la falta de uno de los dos.