Entrevista > Sara Ramírez Vázquez / Psicóloga sanitaria y forense
El Síndrome Ansioso Depresivo Moderado y Grave Cronificado en el tiempo es más frecuente de lo que puede parecer a simple vista, pero se ha situado en el mapa mediático con motivo de la emisión del documental sobre Rocío Carrasco. Hablamos sobre el con Sara Ramírez Vázquez, psicóloga sanitaria y forense de Elda.
¿Qué es el Síndrome Ansioso Depresivo Moderado y Grave Cronificado en el tiempo?
Es un trastorno dónde aparecen conjuntamente síntomas propios de la depresión como falta de energía y angustia, y síntomas propios de la ansiedad como irritabilidad casi constante y una preocupación excesiva o irracional. Ninguno de ellos predomina sobre el otro y no se puede hacer un diagnóstico por separado.
«Hay una predisposición genética y hereditaria a padecerlo»
¿Por qué se produce?
Existen diferentes causas, pero siempre es una combinación de factores ambientales, psicológicos y biológicos.
¿Hay personas más propensas que otras a padecerlo?
Hoy en día el conocimiento de la naturaleza del trastorno es escaso, aunque sí que hay una predisposición genética y hereditaria, pero no podeos hablar de un único factor.
¿Influye algún tipo de factor medioambiental, social, etc.?
Los estudios afirman que hay factores biológicos, por ejemplo deficiencias de algunos neurotransmisores como la serotonina o dopamina. También hay factores psicológicos, como las creencias, pensamiento y percepción de la realidad que la persona tiene.
Asimismo, se dan factores ambientales como crecer con un tipo de apego inseguro, o tener muchas dificultades y problemas de tipo familiar y económico. También se dan factores sociales estresantes continuos.
«Está causado por factores ambientales, psicológicos y biológicos»
¿Cómo se trata?
El tratamiento más adecuado es el que combina la terapia cognitivo conductual con la farmacología. A través de la reestructuración cognitiva se enseña a la persona a cambiar los patrones de pensamiento que pueden estar manteniendo el problema. Igualmente es importante aplicar conjuntamente técnicas de relajación para ayudar a controlar la sintomatología.
¿Se podría hacer desaparecer el estigma social que siempre acompaña a los problemas de salud mental?
Sería posible reducirlo educando al ciudadano con muchas campañas de sensibilización sobre las enfermedades mentales.
Hipotéticamente, ¿una persona manipuladora, malvada y/o cruel sería capaz de fingir que padece el síndrome?
Sí, claro, hay muchas personas que lo intentan, la mayoría de las veces para obtener una remuneración económica derivada de una incapacidad.
¿Y podrían engañar a psiquiatras, psicólogos, forenses, a la Policía y a la Justicia?
Podría intentarlo, pero es difícil simular los síntomas físicos que lleva asociados, como la taquicardia, sequedad en la boca, problemas gastrointestinales, temblores, etc. Y además existen pruebas psicométricas para detectar patrones de falseamiento y exageración de los síntomas psicopatológicos asociados.
¿Las personas que padecen este síndrome pueden tener tendencia al suicidio?
Como cualquier trastorno psiquiátrico, el riesgo aumenta con la patología mental; a más gravedad de la patología, más riesgo. La ideación suicida es más propia en los trastornos depresivos, y en este caso en que la persona manifiesta al mismo tiempo ansiedad aumenta la probabilidad, ya que agrava la situación.
¿Se podría erradicar en el futuro?
Es una pregunta muy difícil de contestar. Creo que lo que se puede llegar a conseguir es una detección temprana de los síntomas, para que la persona reciba lo antes posible un tratamiento adecuado y los síntomas asociados se minimicen, lo que supone mayor calidad de vida para estas personas.