La Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Orihuela y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico inician las actuaciones en las dunas de la playa de La Glea y Cala Bosque que tienen como objeto favorecer la conservación y recuperación de los ecosistemas dunares de la costa de Orihuela.
El fuerte impacto turístico al que se ha visto sometido el litoral mediterráneo ha supuesto el deterioro y, en muchas ocasiones, la desaparición de ecosistemas de gran valor ecológico, como es el caso de la dunas litorales. “La importancia de las mismas radica en la protección que dan a la costa frente a la erosión, son una reserva de arena para la propia regeneración natural de las playas, además de tratarse de elementos del paisaje de enorme valor ecológico junto a la riqueza de fauna y vegetación exclusiva. Cala Bosque y la playa de La Glea son los únicos enclaves del litoral oriolano donde se conservan ecosistemas dunares”, comentaba Dámaso Aparicio, concejal de Medio Ambiente.
En lo que hace referencia a Cala Bosque la actuación correrá a cargo del Servicio Territorial de Costas con un costo aproximado a los 47.000 euros. En esta zona existe una gran abundancia de especies alóctonas y el terreno se encuentra compactado por el pisoteo. En esta zona, la duna se encuentra en buen estado de conservación con abundancia y variedad de especies propias de ambientes dunares. Las actuaciones van a consistir en realizar un vallado con estacas y cuerda que sirva como barrera disuasoria frente al pisoteo que además no supondrá un impacto visual alto. Este cierre perimetral impedirá la apertura de sendas y la restauración de los corredores existentes. Otras actuaciones serán la eliminación de las especies alóctonas presentes en el ecosistema dunar; también se instalará un panel informativo en el que se divulguen las actuaciones que se han realizado y su finalidad y el traslado del puesto de SOS fuera del ecosistema dunar ya que la actual ubicación ocupa el espacio físico de la duna.
En lo que hace referencia a la playa de La Glea será la Concejalía de Medio Ambiente la encargada de ejecutarla y costará alrededor de 4.000 euros. Aquí también se van a eliminar las especies alóctonas invasoras; la limpieza de la duna con la eliminación de tubos y otro material acumulado; el vallado de la duna en la zona contacto con la playa que se realizará con estacas y cuerdas, como en Cala Bosque; y también se informará al ciudadano del daño que se produce cuando se invade el espacio dunar. En este sentido, se va a renovar el cartel informativo existente junto a la duna de la playa de La Glea.
Aparicio quiere agradecer a Costas su colaboración en estas actuaciones e implicación con la conservación del ecosistema en la zona costera del término municipal.