Liderar el progreso turístico de los pequeños municipios. Ese podría ser el gran objetivo del proyecto de Destino Turístico Inteligente (DTI) con el que Altea pretende, como explica la edil del área, Xelo González, convertirse “en el primer destino de menos de 50.000 habitantes certificado del mundo”, un reto ambicioso que, sin embargo, no descarta que se pueda conseguir “antes de que termine el año”.
Para conseguirlo, la Villa Blanca ya está a punto de “alcanzar el nivel III de los DTI”, momento a partir del cual podrá presentar su proyecto para que el Organismo de Normalización de España (UNE) pueda hacer realidad ese deseo alteano.
Benidorm como ejemplo
Después de que la vecina ciudad de Benidorm ya se convirtiera, hace años, en el primer DTI certificado del planeta, Altea quiere liderar esa misma carrera en el ámbito de los pequeños municipios. Para ello, en la Villa Blanca trabajan en un documento que pone el foco en “cuatro pilares como son la cultura, el ciclismo, la naturaleza y las actividades náuticas”.
Si finalmente Altea consigue esa certificación UNE y, por lo tanto, entra a formar parte de ese grupo de elite de los DTI, esto llevará consigo un nuevo e importante reto ya que, como expone la edil de Turismo, “supone mucha más exigencia como destino. Estar con la norma UNE implica que nos tendremos que auditar de manera anual para demostrar que todo aquello que hemos recogido en el Plan Director se está cumpliendo”.
Convertirse en el primer DTI certificado del mundo entre municipios de menos de 50.000 habitantes es algo en lo que Altea viene trabajando desde hace varios años. Fruto de esa labor, ya han comenzado a llegar a la Villa Blanca inversiones que permitirán desarrollar proyectos concretos que, a su vez, faciliten la transición hacia ese objetivo final.
Los cuatro pilares sobre los que se basa el proyecto son la cultura, el ciclismo, la naturaleza y las actividades náuticas
Inversión millonaria
En ese sentido, González destaca que el Plan de Sostenibilidad Turística de Destino ya ha sido elegido, “tanto por el Gobierno de España como por la Generalitat Valenciana, para verse beneficiado por una inversión de casi cuatro millones de euros”.
Una inyección económica con la que Altea implementará diversas acciones para facilitar la experiencia en destino de los turistas y, a la vez, el día a día de los alteanos. González avanza que una de las primeras actuaciones que se realizarán en este sentido girará en torno a la “señalítica y sensorización de los aparcamientos. No tenemos un problema de cantidad de plazas, sino que los parkings no están bien señalizados”.
«Altea es un buen ejemplo del modelo por el que apuesta la Generalitat, donde el turismo es una herramienta para cohesionar el territorio» H. Campos
Itinerarios turísticos
Así mismo, la edil de Turismo adelanta que la Villa Blanca va a “crear itinerarios con señales que indiquen cuánta distancia queda por recorrer desde distintas localizaciones del municipio hasta algún punto de interés”.
Todo ello, con la intención última de “fomentar que los visitantes conozcan el pueblo andando porque, además, consideramos que el peatón es el que va a consumir en los negocios, algo que nos ha demostrado la experiencia en el casco antiguo”.
Herick Campos anunció una inversión por parte de la administración autonómica, estatal y local de casi cuatro millones para los próximos tres años
Cohesión del territorio
Por su parte, el director general de Turisme de la Comunitat Valenciana, Herick Campos, valoraba muy positivamente la iniciativa alteana y destacaba que la Villa Blanca “es uno de los pocos municipios que cuenta con un Plan Director DTI y un Plan de Sostenibilidad Turística en Destino”, documentos indispensables que harán posible “una inversión por parte de la administración autonómica, estatal y local de casi cuatro millones para los próximos tres años”.
Campos considera que el ambicioso proyecto alteano es “un buen ejemplo del modelo por el que apuesta la Generalitat, donde el turismo es una herramienta para cohesionar el territorio”.
Diez retos
En este mismo sentido, Campos explicó que el municipio se ha marcado diez importantes retos, entre los que destacan “educar y sensibilizar sobre la importancia del turismo para Altea, impulsar la inteligencia turística en el destino a través del uso de herramientas digitales para la recolección y análisis de información y datos turísticos, o gestionar los flujos de visitantes de forma eficiente promoviendo el uso de medios de transporte alternativos”.
Así mismo, subrayó la importancia de todas estas iniciativas para “diversificar su oferta y reducir la estacionalidad, así como la conservación de sus recursos naturales y patrimoniales y el desarrollo de un modelo turístico de calidad, accesible e inclusivo”.