El poderío científico que tuvo el Tercer Reich de Adolf Hitler es indudable. Hubo un selecto grupo que no es muy conocido dentro de este nicho, pero que de haber alcanzado su objetivo, la Segunda Guerra Mundial habría tenido un final muy diferente. Acá te contamos la historia del Club del Uranio, los nazis encargados de estudiar la energía nuclear para la fabricación de armas.
El poder nuclear en el Tercer Reich
La investigación de armas nucleares en la Alemania nazi empezó casi a la par con la Segunda Guerra Mundial. Dos semanas después del inicio del conflicto bélico, Peter Debye (director del Instituto Kaiser Wilhelm de Física) recibió una carta de Hitler en donde le expresaba que las investigaciones de la institución ya no serían de carácter tradicional, sino que buscarían potencializar el poderío militar alemán.
Debye, de nacionalidad neerlandesa, también recibió una orden para cambiar su nacionalidad a la alemana. El científico se rehusó a aceptar dichas peticiones, por lo que decidió emigrar hacia Estados Unidos. Por otro lado, los nazis nombraron como sucesor a Werner Heisenberg, quien sí acató las órdenes.
Uno de los primeros trabajos de Heisenberg fue el de seguir los trabajos de Fritz Strassmann y Otto Hahn, quienes en 1938 descubrieron que era posible dividir el uranio si es bombardeado con neutrones. Teniendo en mente el potencial destructivo de dicho hallazgo, deciden crear el Club del Uranio, el cual tenía como misión estudiar la energía nuclear para la fabricación de armas.
La bomba atómica nazi
A finales de la década de los 30, e inicios de los 40, los mejores científicos del mundo se encontraban en Alemania. Hitler tenía confianza plena en su Club del Uranio. Tras meses de trabajos, los nazis descubrieron un avance que revolucionó su trabajo, hallando que había más elementos capaces de producir una fisión nuclear en un explosivo, siendo el plutonio el más viable. Varios de los representantes del grupo presentaron dicha idea ante el Führer, quien quedó maravillado con los avances del proyecto.
Hacia 1942, las investigaciones se vieron estancadas gracias a la falta de presupuesto. Para dicho año, las Potencias del Eje empezaron a verse debilitadas en varios aspectos. Los nazis se vieron en la necesidad de invertir su efectivo en armas que proporcionaran resultados inmediatos, pues de lo contrario perderían territorio de manera muy apresuraba.
Con el transcurso de la guerra, el Club del Uranio veía cada vez más complicado realizar las investigaciones. Con el tiempo, dejaron de recibir el financiamiento necesario y pasaron a ser un proyecto civil, no militar. Gracias a los constantes bombardeos sobre Berlín, se hizo casi imposible la continuidad del proyecto.
En 1945, luego de la toma de Berlín por parte de los Aliados, el Club del Uranio dejó de existir, y sin haber logrado su objetivo. Lo peor del asunto para los nazis fue el ver, ese mismo año, cómo el Proyecto Manhattan tuvo éxito al crear la bomba atómica y demostrar su poder.