El lenguaje Braille, el sistema de lectura que emplean las personas ciegas, fue inventado por el francés Louis Braille (Coupvray, 1809-1852) cuando contaba con tan sólo quince años.
Ciego desde los tres, Braille, con dotes para la ciencia y la música, ideó un original sistema que sustituía el alfabeto por puntos y guiones marcados en relieve sobre una superficie de cartón. Aquel lenguaje basado en el tacto aún perdura en nuestros días, si bien ha sufrido desde su origen algunas modificaciones para adaptarse a cada lengua.
El alfabeto Braille se lee moviendo la mano de izquierda a derecha, pasando los dedos por cada línea. Cada celda cuenta con seis puntos en relieve que, combinados, pueden formar hasta 64 patrones distintos.