Toña, pan quemado, panquemao, o fogaseta: estos son algunos de los nombres que se le da a este típico dulce valenciano que se prepara en Semana Santa y se puede encontrar en las panaderías durante todo el año. La masa es similar al del roscón de reyes o a la de la famosa mona de pascua, pero cambian algunos ingredientes según la zona o localidad en la que se prepare.
Para preparar el pan quemado, lo único que necesitarás es tiempo, puesto que el secreto de una buena masa requiere de un cierto tiempo de reposo para su levado. Lo interesante es que en esta receta de panquemao, no tendrás que preparar prefermentos ni poolish para que te quede una masa espectacular.
¿Te apetecería tener un pan quemado para desayunar o merendar mañana? No hay nada como lo hecho en casa, así que en RecetasGratis queremos enseñarte cómo hacer pan quemado para que te quede dulce y exquisito. Una vez lo pruebes, ¡no lo olvidarás jamás!
- Ralla la cáscara de limón o de naranja. Puedes añadir ambas si lo deseas.
- Mete en una cubeta amasadora los ingredientes. Añade primero los líquidos, es decir, la leche, el aceite, el huevo, el agua de azahar. Luego, espolvorea la levadura por encima de los líquidos. Prepáralos así para que a la hora de amasar se mezclen sin ningún problema.
- Ahora, agrega los ingredientes secos en este orden: la ralladura del limón, el azúcar, la harina y, por último, la sal. Es conveniente decir que la sal no debe tocar la levadura, porque anula la potencia del levado. Amasa 15 minutos y, si no tienes amasadora o panificadora, intenta amasar al menos 7 minutos.
- Frótate aceite en las manos y remueve la masa formando una bola. Déjala en un recipiente hondo para que repose y haga su primer levado. Pon un paño de cocina limpio o un trozo de papel film encima de la masa e introdúcela en el horno apagado.
- Deja reposar unas 3 horas.Una de las características que verás en la masa es que quedará bastante pegajosa y un poco difícil de manejar. No añadas más harina para poder manejarla, pues tu panquemao quedará menos esponjoso. En cambio, espolvorea un poco de harina en el área de trabajo y amasa para sacar el aire de la masa y desgasificar (con 3 minutos bastará).
- Forra una bandeja de horno con papel sulfurizado, forma una bola con la masa nuevamente y déjala sobre la bandeja de horno. Bate un huevo y pinta con él el pan quemado. Vuelve a meterlo en el horno durante 1 hora y media para el segundo y último levado.
- Saca la masa y, con una tijera, hazle dos cortes en cruz. Espolvorea el azúcar para decorar en la cruz y, si te apetece, puedes añadir también almendra molida. Lleva tu pan quemado al horno y baja la temperatura a 180 ºC. Deja que se hornee a media altura con calor arriba y abajo durante 25 minutos.
- ¡Saca el pan quemado del horno y siéntete orgulloso/a de tu preparación! Tus seres queridos quedarán encantados y será un pan perfecto para disfrutar en meriendas o desayuno. Puedes conservarlo 3 días en la nevera en una bolsa o tupper.