Dar visibilidad a la prostitución y la trata de mujeres con fines de explotación sexual es uno de los objetivos que se ha marcado el Ayuntamiento de Petrer, a través de la concejalía de Igualdad, con la organización de las primeras “Jornadas contra la prostitución y la trata de mujeres y niñas”, que tendrán lugar en el Teatro Cervantes y el Centro Cultural del 10 al 12 de marzo, dentro de las actividades programadas en torno al 8M, Día Internacional de las Mujeres.
“Queremos poner el acento en la visibilización de esta realidad incómoda, tan instalada en nuestra realidad, aunque nos cueste asumirla. No debemos perder de vista que la prostitución es una forma más de violencia contra las mujeres”, ha destacado la edil del área Patricia Martínez.
Para hablar del tema desde una perspectiva abolicionista de lucha contra la prostitución y la trata poniendo el foco en los hombres consumidores y explotadores de mujeres, estarán en Petrer las ponentes expertas en la materia, Mabel Lozano, escritora, modelo, directora de cine y actriz de cine y televisión española, activista en defensa de los derechos de las mujeres; Rosa Cobo, profesora titular de Sociología del Género de la Universidad de A Coruña y directora del Centro de Estudios de Género y Feministas de la Universidad de A Coruña; y Amelia Tiganús, activista feminista abolicionista, superviviente de la trata de mujeres.
Según ha explicado Nuria Molina, agente de Igualdad, “la perspectiva de estas jornadas es completamente abolicionista”. Nuria también ha apuntado que se estima que el 95% de mujeres prostituidas son víctimas de trata de mujeres con fines de explotación sexual. El 5% restante, que se podría considerar una “elección libre”, solo refleja que las mujeres ven como opción viable la prostitución cuando se encuentran en situaciones económicas precarizadas. Molina ha apuntado que “el abolicionismo lucha para que consumir prostitución tenga la misma repercusión social negativa que la venta de órganos o el canibalismo”.
Las jornadas, además de visibilizar la prostitución y la trata de mujeres con fines de explotación sexual, buscan reivindicar una perspectiva abolicionista de la prostitución, poniendo el foco en los explotadores de mujeres; reflejar las condiciones de vida de las mujeres prostituidas; y explicar como la pornografía influye en la educación sexual de la ciudadanía, hombres y mujeres, más concretamente de las personas jóvenes.