Las consecuencias de las inundaciones producidas por la DANA de 2019 en toda la Vega Baja fueron devastadoras. También lo fueron para las gentes de Rafal, donde el agua también se coló en el almacén municipal en el que se guarda el arco de La Graná, elemento principal de la Semana Santa en el municipio. Este arco resucita para, pasadas la DANA y con la rebaja de restricciones a causa de la pandemia, volver a lucir en la calle totalmente restaurado.
Parte de la historia de Rafal
El agua se cobró un pedazo de la historia de la localidad que, según explica su alcalde, Manuel Pineda, “trajo a Rafal la tía Corra hace más de cien años”. Así, se incluyó en la procesión del Domingo de Resurrección de Rafal este arco pintado con escenas de la Pasión y decorado con una ‘graná’ que se abriría al paso de la Virgen del Rosario al encontrarse con su hijo resucitado, en la procesión matinal del último día de la Semana Santa.
El encargado de devolver la vida a esta pieza ha sido Pablo Follana, licenciado en Bellas Artes. El proceso dio comienzo a un ritmo acelerado en enero de 2020, debiendo finalizar a primeros de abril. Con la llegada de la covid-19, el proceso se ralentizó, “permitiéndome más tiempo para crear un dibujo más elaborado y detallado”.
Tras retirar la madera estropeada, se limpió y lijó la superficie, reinsertando madera nueva donde era necesario. Además, se aplicaron diferentes tratamientos endurecedores y fungicidas, todo con la ayuda de Estéfano Victoria y Ernesto Baeza, ebanistas y vecinos de Rafal.
Trabajo de investigación
Follana diseñó los dibujos al óleo que decoran la estructura tras un extenso trabajo de investigación y consulta a los vecinos más mayores: “Mi intención era que el arco pudiera contar el importante cometido que tiene dentro de la Semana Santa de Rafal, actuando como umbral del paso de la muerte a la vida”.
Follana aplica así la simbología de los colores e identifica las diferentes alturas del arco con el cielo, la tierra y el infierno. Todo ello enmarcado en un paisaje de la Vega Baja visto desde Rafal, “lo que le otorga una fuerza y un cariño especial por nuestra tierra y sus elementos”, ha indicado.
«Esta pieza la trajo a Rafal la tía Corra hace más de cien años» M. Pineda (alcalde)
Combinación de elementos
Otra de las peculiaridades del ya restaurado arco es la combinación de elementos de las diferentes versiones a lo largo de su historia. Así, se incluiría el color azul y fondo de nubes de las primeras versiones junto al Sagrado Corazón de la parte superior, “una de las partes menos dañadas de la última versión y que hemos podido conservar”, ha declarado Follana.
El otro elemento de este arco, La Graná, ha sido reparado por Antonio Mora, también vecino de Rafal. Para ello se ha sustituido el material de cartón piedra original por un armazón de hierro forrado con madera y materiales ligeros. Asimismo, se han sustituido las figuras de los ángeles y el niño Jesús de su interior, traídas desde Sevilla.
Bien de Interés Cultural
El Ayuntamiento ha solicitado para este arco la denominación de Bien de Interés Cultural a la Generalitat Valenciana y puede contemplarse en el recibidor del Auditorio Municipal Arte Musical, donde quedará expuesto de manera permanente.
Tras tres años en los que las circunstancias lo han impedido, rafaleños y rafaleñas podrán ver este Domingo de Resurrección su procesión de La Graná tal y como han hecho siempre.