Quien se acerque estos días a la Devesa puede contemplar la característica floración amarilla que se manifiesta en las dunas litorales en primavera. Predomina sobre el resto de flores y en verano será sustituida por otra rosada y blanca.
Entre las especies de flor amarilla destacan la siempreviva (Helichrysum stoechas), las estepas (Halimium halimifolium), la hierba del renegado o algodonosa (Otanthus maritimus), la hierba de los conejos (Lotos creticus), el gavó (Ononis natrix) y la albaida (Anthyllis cytisoides).
La siempreviva aporta un amarillo luminoso al paisaje. De hecho, tal como explica el personal del Servicio de Devesa-Albufera, el nombre científico (Helichrysum stoechas) viene del griego hèlios (sol) y chrysos (oro) por el dorado de las flores. Además, es muy característico el aroma que desprenden, para muchas personas parecido al curry.