El Hemiciclo ha acordado el inicio de los trámites y la constitución de una comisión de estudio para crear la empresa municipal de la energía sostenible, con el apoyo del equipo de gobierno y Ciudadanos, la abstención de PP, y el rechazo de Vox. Tendrá carácter mixto ―51 % participada por el Ayuntamiento; 49 %, por un socio privado―, y colocará placas solares en 525 edificios municipales para el autoconsumo y el impulso de comunidades energéticas. El Pleno también ha aprobado provisionalmente el Plan Especial del Cabanyal-el Canyameral, con los votos a favor de Compromís y PSPV-PSOE, mientras que la oposición se ha abstenido.
La primera sesión plenaria del año ha arrancado con un minuto de silencio con motivo del Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto, que se conmemora mañana, y en recuerdo de la persona asesinada ayer en Algeciras. Seguidamente, los concejales y las concejalas han tratado los puntos del día incluidos en la parte resolutiva, entre ellos, el procedimiento para poner en marcha la empresa mixta de la energía sostenible, el Plan Especial del Cabanyal-el Canyamelar o la plusvalía que grava la compraventa de vivienda.
El alcalde, Joan Ribó, junto con el titular de Emergencia Climática y Transición Energética, Alejandro Ramon, ha defendido la iniciativa sobre la sociedad energética, que generará la misma electricidad que consumen 27.400 hogares en un año y permitirá abaratar la factura de la luz del consistorio y del vecindario, especialmente de las familias más vulnerables. Por otro lado, se dejará de emitir a la atmósfera lo mismo que absorberían 139.000 árboles durante un año, una cifra que contribuirá a lograr el reto de convertir a València en una ciudad climáticamente neutra en 2030.
Ribó ha detallado las ventajas que comportará esta entidad: instalará 72,25 megavatios de potencia; la infraestructura “no ocupará territorio cultivable ni parajes con valor paisajístico”, puesto que aprovechará tejados municipales hasta ahora sin uso, y constituirá un elemento de aislamiento ante el calor en verano. El máximo responsable municipal ha incidido en que la actividad se centrará en la gestión y generación de la energía fotovoltaica: “No es una empresa de distribución, es una empresa de producción, no vamos a comercializar, por lo tanto, no tiene nada a ver con los modelos desarrollados en Barcelona o Cádiz”.
El proyecto, tal como ha explicado el alcalde, consta de una primera fase, que comprenderá las obras de instalación de producción de energía renovable en 525 equipamientos municipales, como escuelas, polideportivos o mercados, y se desarrollará la modalidad de autoconsumo para el Ayuntamiento, “sin conexión a la red”. En segundo lugar, “se conectará a la red”, y se ofrecerá el excedente a la ciudadanía a través de comunidades energéticas, así como un servicio para ayudar a las personas con dificultades para pagar la factura de la luz para luchar contra la pobreza energética.
En cuanto a la participación de los grupos municipales, Joan Ribó ha indicado que estarán presentes en el consejo de administración de la futura empresa, del mismo modo que ocurre en Emivasa. Por su parte, el regidor Alejandro Ramon ha remarcado que se trata “de una iniciativa pionera”, que tiene el objetivo “de exprimir y sacar el máximo provecho” de los tejados. A modo de ejemplo, el edil se ha referido a las placas fotovoltaicas que ya se han implementado en el techo del colegio Rodríguez Fornos de Patraix, que han permitido reducir un 80 % el consumo de energía del centro educativo, “y todavía sobraría para proveer a más de 300 hogares a menos de dos kilómetros”.
Durante el debate, han tomado la palabra Vicente Montañez (Vox), Fernando Giner (Ciudadanos) y Carlos Mundina (PP). Montañez ha argumentado que su grupo no apoya la propuesta, porque “no vamos a participar de todo el chantaje económico al que se está sometiendo a los valencianos con la Agenda 2030” y se ha pronunciado en contra de “destinar recursos de los valencianos a crear otro chiringuito más para colocar a amiguitos”. Giner, portavoz de Ciudadanos, se ha mostrado a favor de “la colaboración público-privada” y de “todas las acciones para mejorar la sostenibilidad”; ahora bien, ha expresado “dudas” sobre “cómo se mantendrá la sociedad mixta si no comercializa”, y ha pedido la desaparición de la Fundación València Clima i Energia cuando entre en funcionamiento la empresa para que no se dupliquen tareas ni recursos. Por otro lado, el concejal popular ha criticado que no se cuente con los grupos de la oposición en la comisión de estudio, ha reclamado “más transparencia e información”, y ha manifestado “muchas dudas” sobre el proyecto, del que “solo tienen el estudio a trazo grueso”.
Aprobado el Plan Especial Cabanyal-Canyamelar
El Pleno del Ayuntamiento ha aprobado también en la sesión de hoy el Plan Especial del Cabanyal-Canyamelar, una aprobación provisional, previa al informe que ha de emitir la Comisión Territorial de Urbanismo de la Generalitat, y tras la cual se procederá a la aprobación definitiva del Plan. El PEC ha salido adelante con los votos a favor del equipo de Gobierno, dado que todos los partidos de la oposición se han abstenido en la votación. Tal como ha explicado el alcalde al inicio de la reunión plenaria, “esta aprobación de hoy supone el enterramiento simbólico del plan de destrucción del Cabanyal, en el que Rita Barberá y el PP se gastaron millones de euros para comprar y destruir viviendas”. “Hoy enterramos solemnemente aquel plan, y yo agradezco a todas las personas que han trabajado desde Salvem el Cabanyal, y que han luchado de la misma manera que lo hicieron quienes lucharon por el Saler y por el jardín del Turia”. “Si València es lo que es hoy día, es gracias a todas estas personas a quienes quiero homenajear”, ha concluido Ribó.
Por su parte, la vicealcaldesa y concejala de Desarrollo y Renovación urbana, Sandra Gómez, ha subrayado que el nuevo Plan Especial del Cabanyal-Canyamelar busca “consolidar la protección del barrio del Cabanyal-Canyamelar, de su patrimonio y su identidad, así como garantizar su futuro dotándolo de los equipamientos y servicios necesarios para sus vecinos y vecinas”.
Tanto el Grupo Popular como Ciudadanos han expuesto sus argumentos en contra de este punto del orden del día. El concejal popular Juan Giner ha asegurado que el plan “llega tarde y mal”, y ha lamentado que “se han generado expectativas en el vecindario, anunciando la aprobación, cuando ésta aún está por ver, dado que aún faltan los informes de la dirección Territorial de Urbanismo de la Generalitat, del Ministerio de Transición Ecológica (Costas), del Consell Jurídic Consultiu y de la Dirección General de Cultura de la Conselleria”, ha asegurado.
Por su parte, el concejal de Ciudadanos Narciso Estellés ha recordado que en estos siete años, su grupo “siempre ha estado al lado de cualquier acción en el barrio del Cabanyal”, pero ha subrayado también el argumento de que “el gobierno municipal llega tarde”. Y la causa, ha afirmado, “es ganar ese mes para que el Plan les pueda lucir electoralmente, aunque lo hayan traído sin acabar”.
Gómez ha tomado la palabra para defender este “plan hecho para el barrio, para sus vecinos y vecinas, y participado por multitud de entidades”. La vicealcaldesa y concejala ha subrayado su sorpresa ante las críticas del PP “porque el vecindario tiene memoria, y sabe que el anterior gobierno quiso destruir un barrio y acabar con su identidad, argumentando de que València tenía que conectarse con el mar; como si València acabara en el Pla del Real, como si el Cabanyal no fuera València”, ha manifestado.
Los ejes que definen este nuevo plan son: un sistema de espacios públicos y zonas verdes para vertebrar el barrio, un total de viviendas que pueden alcanzar las 1.150 viviendas, de las que 700 se prevé que sean viviendas públicas de alquiler asequible o destinadas a colectivos de mayor dificultad de acceso a la vivienda, como jóvenes o personas mayores, límites al incremento de usos hoteleros en el barrio, un sistema de equipamientos y servicios locales de proximidad en el marco del concepto Ciudad 15 minutos (se generan casi 34.000 m2 de nuevos espacios de uso dotacional), y garantía para la protección y puesta en valor de los elementos que determinan la identidad y patrimonio cultural del barrio (se incluye un catálogo de más de 1.600 fichas de protección, que determinan el nivel de protección de otros tantos inmuebles).
Ordenanza de plusvalía contra la especulación
La sesión plenaria ha abordado también una batería de propuestas del área de Economía y Hacienda, entre ellas, la modificación de la Ordenanza fiscal reguladora del impuesto sobre el incremento de valor de los terrenos de naturaleza urbana, conocido popularmente como impuesto de plusvalía.
A pesar de que los grupos de oposición han criticado y han votado en contra de esta modificación, por entender que eleva la presión fiscal sobre la ciudadanía, el concejal de Economía, Borja Sanjuán, ha explicado que se trata de una medida dirigida a evitar las actuaciones de carácter especulativo por parte de grandes propietarios o fondos buitre. Tal como ha detallado el concejal, el impuesto penaliza a quienes adquieren una vivienda y la venden en el mismo año, obteniendo un beneficio por ello, una actitud que se define como especulativa. De hecho, ha añadido el edil, la recaudación total por este concepto en la ciudad para este año se reducirá (-0,23%), y lo que se hace con la modificación de la ordenanza es redistribuir el impuesto.
Las medidas aprobadas en este bloque económico de la sesión plenaria son: la modificación puntual del Reglamento Orgánico de Gobierno y Administración del Ayuntamiento de València, la primera modificación de créditos extraordinarios y suplementos de créditos del presupuesto de 2023, el Plan de Inversiones en el servicio municipal de abastecimiento de agua potable para el ejercicio 2023, ratificar los acuerdos del Consejo de Administración de EMIVASA de 2 diciembre de 2022, la modificación de la Ordenanza fiscal reguladora del impuesto sobre bienes inmuebles, y la citada la modificación de la Ordenanza fiscal reguladora del impuesto sobre el incremento de valor de los terrenos de naturaleza urbana.
Además, se ha acordado solicitar a la Conselleria de Hacienda y Modelo Económico la cofinanciación del proyecto Centro Cultural Casa del Relojero, y se ha dado cuenta al Plenario del Informe del Tribunal de Cuentas de la fiscalización de los costes y rendimientos de los servicios incluidos en las cuentas generales de los ayuntamientos de más de 50.000 habitantes correspondiente al ejercicio 2020, y del informe del 4º trimestre de 2022 sobre cumplimiento de plazos para el pago de las obligaciones municipales.
El equipo de Gobierno ha votado a favor de todos los puntos, y la oposición se ha abstenido de manera general, salvo en los siguientes casos: Ciudadanos ha votado No al punto 14; Vox ha votado No al punto 15, y todos han votado en contra del punto 17.