Se trata de señales luminosas que se activan a través de sensores, los cuales envían una señal cuando detectan el paso de un coche, bien numéricamente o con iconos, así el conductor recibe la información y las advertencias necesarias. Además de mejorar la seguridad de las personas, las señales inteligentes son más sostenibles y económicas, ya que funcionan haciendo uso de paneles solares.
Los radares pedagógicos están especialmente indicados para influir en el comportamientos de los conductores, y que éstos moderen su velocidad, haciéndoles ser conscientes de que están sobrepasando los límites de velocidad en zonas especialmente sensibles a la velocidad inadecuada como son los entornos urbanos, proximidad de tránsito peatonal, colegios, etc.
En concreto, se han comenzado a instalar en la Avenida de Desiderio Rodríguez con José Hódar (playa los Náufragos), Desiderio Rodríguez a la altura de la urbanización La Veleta, Gregorio Marañón con entrada al puerto, y también se están instalando en las salidas de las dependencias de las ambulancias (Avenida Rosa Mazón) y del Parque Principal de Bomberos