Gonzalo Castro / Actor
Todos recordamos la película ‘Lo que el viento se llevó’ por aquellas míticas escenas donde Vivien Leigh juraba no volver a pasar hambre o Clark Gable le decía a la anterior que le importaba un bledo. Lo que menos gente sabe es que la producción de este imprescindible clásico del cine supuso un completo caos y poco faltó para que todo el proyecto se fuera al traste.
Precisamente en esta trastienda de la película es donde se fija la obra ‘Plátanos, cacahuetes y lo que el viento se llevó’. Una comedia sobre los entresijos de Hollywood protagonizada por Gonzalo Castro (Madrid, 2-febrero-1963), actor de teatro al que también recordamos de algunas de las series más exitosas de la televisión española en los últimos tiempos. Quien no quiera perdérsela tiene una cita el sábado 20 de mayo en el Teatro Principal de Alicante a las 20 horas.
¿Cómo fueron tus inicios en la actuación?
Yo estudiaba Derecho, pero estando en quinto de carrera con apenas dos asignaturas pendientes… de repente un día me decidí a escucharme a mí mismo. Me presenté en la Escuela de Arte Dramático, me hicieron una prueba y para mi desgracia… me cogieron (risas). Desde luego fue una decisión fundamental en mi vida, porque lo de abogado en el fondo no lo tenía nada claro.
«Mi primer trabajo fue en una ópera figurando como guardia junto a Plácido Domingo»
¿Recuerdas cuál fue tu primer trabajo como actor por el que cobraras algo?
Perfectamente. Hice figuración durante un par de años en zarzuelas y ópera mientras que trabajaba en un restaurante italiano para pagarme las clases de arte dramático.
En concreto lo primero que hice fue levantar una lanza en una función de ‘Otelo’ de Giuseppe Verdi. Yo era un miembro de la guardia personal que acompañaba a Plácido Domingo. Se conoce que como tenía el pelo largo me vieron con el perfil (risas).
De hecho en ‘7 vidas’ también empezaste como extra… y acabaste siendo uno de los miembros más importantes del reparto.
En realidad yo entré como ayudante de dirección de ‘7 vidas’ gracias a que me recomendó un amigo. Eso duró unos meses, hasta que me propusieron probar un papel… y al final me hice con la serie.
«Los guionistas de ‘7 vidas’ me llamaron Gonzalo porque no sabían qué nombre ponerme»
A mí me parece un caso muy extraordinario. Es como si Gunther en ‘Friends’ se hubiera convertido en uno más de los seis amigos principales.
A veces ocurren estas cosas en la ficción. Desde luego ‘7 vidas’ fue un antes y un después en la televisión española y yo tuve la suerte de estar ahí desde el principio. En un primer momento más bien detrás de las cámaras, hasta que a alguien se le ocurrió probar a ver si ese camarero funcionaba como personaje. Y me pusieron ‘Gonzalo’ porque no sabían ni cómo llamarme (risas).
Yo venía ya haciendo teatro desde hacía algunos años, pero aquello desde luego me supuso el arranque de una sucesión de oportunidades para agarrarme a este oficio. Creo que fue un trampolín para muchos de los actores que formamos aquel reparto.
Además era una serie que cambiaba mucho de actores… pero seguía funcionando.
Sí. Algunos llegamos siendo unos completos desconocidos para el gran público como también Carmen Machí, quien probablemente sea la actriz más prolífica y querida por el público en este país. Para todos fue un espaldarazo, por ejemplo Javier Cámara abandonó la serie porque le llama Almodóvar o Blanca Portillo porque empezó también una película trascendental.
El caso es que cuando la serie se consolidó, todo el mundo quería trabajar en ‘7 vidas’. Muchos actores como Florentino Fernández o Willy Toledo querían probar esas mieles que nosotros disfrutábamos todos los días. Aunque luego ‘Aída’ tuvo un formato parecido, francamente yo creo que este tipo sitcom americano que tanto furor causó ni lo había habido antes en España… ni lo volverá a haber.
«Es una función muy divertida y a la vez didáctica porque aprendes mucho sobre historia del cine»
Hablemos ya de la obra que vienes a interpretar en Alicante. ¿De qué trata ‘Plátanos, cacahuetes y lo que el viento se llevó’?
Es una comedia maravillosa dirigida por José Troncoso. El título se lo hemos puesto nosotros en la productora Focus porque en realidad viene del libro ‘Moonlight and Magnolias’ donde el guionista Ben Hetch (interpretado en la función por Pedro María Sánchez) escribe sus memorias. A partir de ahí el irlandés Ron Hutchinson decidió crear una comedia y escribió este texto.
Aquí se relata la historia real de cómo ‘Lo que viento se llevó’ al principio nació con un guion desastroso que no terminaba de gustarle al productor David Selznick, el papel que yo defiendo. Entonces convoca al citado Hetch para intentar arreglar la película y le encierra junto durante cinco días en un despacho donde solo comían plátanos y cacahuetes. Ellos no sabían que estaban gestando una película que acabaría siendo tan mítica de la historia del cine.
Me llama la atención que se dieran situaciones tan divertidas en la producción de ‘Lo que el viento se llevó’, que no es precisamente una película cómica…
Sí, es curioso. Esta obra además dura unos 90 minutos y no tiene descanso para que el ritmo de la comedia no deje de trotar en ningún momento.
En realidad la obra no deja de ser un homenaje a ‘Lo que el viento se llevó’, dado que el personaje de Hetch acude a la reunión sin haberse leído la novela original así que los demás se ven forzados a representarle las escenas para que se entere de qué va. Por ejemplo, mi personaje hace de Escarlata O’Hara poniéndose una cortina encima (risas). Así fue como terminaron el dichoso guion.
«En la función representamos algunos pasajes de ‘Lo que el viento se llevó’ en modo cómico»
El argumento me recuerda un poco a la película ‘Ave César’ de George Clooney. Es decir riéndose del surrealismo de Hollywood… pero a la vez homenajeando la magia del cine.
Algo así. Además en esta época es justo cuando se acaba de inventar el cine sonoro, desplazando al cine mudo. A esto también se hace mención en la obra, dado que supuso toda una revolución en la industria.
Es una función muy didáctica porque aprendes muchas cosas, y al mismo tiempo es muy divertida. Los cuatro actores que formamos el reparto nos lo pasamos pipa en cada función, aunque terminamos realmente agotados dado que es un no parar.
Imagino que en el trasfondo de la historia está también la realidad social propia de aquellos Estados Unidos de los años 30…
Sí, de forma trasversal la obra relata sobre todo la situación de los judíos en la época. Mucha gente no sabe que cuando llegaron a Estados Unidos, en el siglo XIX, al principio los gentiles no les permitieron tener industrias ni ser grandes inversionistas.
Entonces fue cuando optaron por comprar miles de hectáreas en Los Ángeles para crear Hollywood. Ellos querían ser aceptados como unos americanos más y por eso a través de sus películas trataban de dar una visión idílica del país. En realidad los judíos son quienes inventan el llamado ‘sueño americano’ haciendo uso del cine. Por eso las grandes productoras cinematográficas fueron judías. La función cuenta todo esto, pero con un aire de comedia.
«Alicante es una plaza fundamental en las giras nacionales de teatro»
¿Cómo es tu relación con la provincia de Alicante?
He venido muchas veces a hacer teatro. Alicante es una plaza fundamental en las giras españolas. Recuerdo que ya vine en mi primera función que hice como actor llamada ‘Por los pelos’ en 1989. Desde entonces todas las trece o catorce giras importantes que he hecho han pasado por esta tierra. La última vez fue con ‘El precio’, un texto de Arthur Miller.
Aunque por desgracia en estos años de pandemia todo se ha enfriado mucho, a Alicante siempre hay que ir. Es un público muy agradecido que espera con ganas ver que se acontece en Madrid. De hecho siempre vamos a teatro vendido, y no me cabe la menor duda de que esta vez será igual. Y además, por supuesto, me encanta aprovechar para comerme un buen arroz.
¿Tienes algún otro proyecto entre manos actualmente?
Estoy rodando ahora mismo una película en Galicia, ya a punto de terminar, llamada ‘Tratamos demasiado bien a las mujeres’. Como te puedes imaginar por el título, es una producción muy particular y se podrá ver al año que viene. Además en breve nos pondremos con la segunda parte de la serie ‘El inmortal’, la cual se ha retrasado por culpa de la pandemia pero ya estamos con ello.
La verdad es que no me quejo. Porque ahora mismo la cosa está muy malita en este oficio, y yo soy de esos actores que afortunadamente pueden vivir de esto.