La postura del Ayuntamiento de Elche y este gobierno municipal “será implacable en la defensa del agua, de nuestro campo y de los agricultores”. Así lo ha asegurado el alcalde Pablo Ruz tras la decisión del Gobierno central de reducir en cinco hectómetros cúbicos el envío de agua a la provincia desde el Tajo y que ha motivado la convocatoria urgente de una reunión con los representantes de los regantes ilicitanos.
Esta decisión del Gobierno central es una “nueva cacicada”, tal y como ha subrayado Ruz, dentro de la política del agua del Gobierno de España que “está condenando al campo de Elche”, pero, ha asegurado que “no nos vamos a quedar con los brazos cruzados ni vamos a mirar para otro lado”.
El alcalde ha dejado claro que “vamos a luchar por todos los medios para que se respeten los derechos de nuestro campo y de los agricultores” y por supuesto, no permitirán que Elche “se convierta en un desierto por culpa de decisiones políticas arbitrarias”.
Como primer paso, el gobierno municipal ha decidido crear la Mesa Local por el Agua, donde estarán representados los regantes y agricultores, pero también todos los partidos políticos, ya que, en palabras del alcalde, “esta es una cuestión que afecta a todos y debemos de ir de la mano”.
Por otra parte, se ha solicitado la ampliación del plazo para presentar el recurso contra la derogación del trasvase, al igual que lo ha hecho la Diputación de Alicante. “Lo vamos a decir muy claro: si no se cumplen los derechos y las necesidades de nuestro campo en materia hídrica vamos a luchar con todos los medios legales a nuestro alcance”.