Entrevista > Maje Sánchez / Campeona del mundo de Triatlón (Elche, 30-marzo-1989)
Tener una meta, algo que queremos conseguir o hacer, es lo que nos hace avanzar en la vida, y alcanzarlo es el mejor de los regalos.
Algo así le ha ocurrido a Maje Sánchez, una de las deportistas de élite más destacadas de nuestra provincia. A su reciente triunfo como campeona del mundo en triatlón, hay que sumar numerosos éxitos deportivos en los últimos años: campeona de Europa de Duatlón en 2018, subcampeona del mundo en triatlón en 2021 y subcampeona de España en Duatlón en 2022.
Pasión por el deporte
Desde muy pequeña, el deporte y la competición han sido el motor de su vida. A los seis años comenzó en fútbol sala, hasta que a los doce no le permitieron continuar jugando porque era una chica. Entonces no había equipo femenino, ya que era la única niña en la ciudad que jugaba al fútbol.
De ahí se fue a un equipo femenino de baloncesto con la excusa de que era muy alta, y en tan solo un año la estaba llamando uno de los mejores clubes de la Comunitat Valenciana en liga nacional.
Un estilo de vida
Mientras jugaba al baloncesto en liga nacional, se formó como técnico de actividades físicas y deportivas en el medio natural, y un profesor, Alonso Tarí, le contagió su pasión por los deportes de montaña como el ciclismo o el senderismo. Un mundo desconocido y algo que hasta el momento estaba fuera de sus posibilidades, y que más tarde se convirtió en un estilo de vida para ella.
Las carreras de trail, los raids de aventura o la orientación forman parte de su entrenamiento, así como la natación y otras disciplinas a las que dedica horas todos los días. Ahora está preparándose para competir en equipo el próximo mes de septiembre, para vivir lo que para ella será un sueño, el raid Vall D’Aran.
«Es vergonzoso ver lo que cobra un futbolista en primera, y que otros deportistas de élite ni siquiera podamos vivir del deporte»
Después de tantos premios y reconocimientos, por fin campeona del mundo. ¿Qué ha supuesto para ti?
Supuso llenarme de amor y de palabras de admiración durante semanas después del campeonato. Todos los abrazos, los besos, las palabras de todas esas personas que tengo cerca en mi día a día, y de otras personas que ni siquiera conocía y que con esa felicitación por mi victoria forman ya parte de mi vida.
Ha sido maravilloso sentirme tan querida y saber que como ser humano y deportista voy en la dirección correcta, y es el impulso definitivo que necesitaba para seguir adelante.
¿Has tenido que sacrificar algo por el deporte?
A los amigos y amigas, y a la familia. Son muchas las reuniones a las que no he podido asistir, celebraciones, salir por ahí o un simple café. Tengo claro que el deporte de élite requiere pasión, pero también esfuerzo y sacrificio, y de ello dependen los resultados.
¿Qué importancia le das a la alimentación?
En el día a día cuido mucho mi alimentación, pero sin obsesionarme. Me encanta comer, y cuando salgo, que son muy pocas veces, me gusta disfrutar y compartir, no me gusta estar pendiente de qué sí y qué no. Eso sí, soy muy estricta semanas antes de un campeonato.
«Era la única niña del pueblo que jugaba al fútbol»
Natación, bicicleta y correr en montaña. ¿Nos podrías decir lo que destacarías en estas tres disciplinas del triatlón?
El triatlón es un triple ejercicio de resistencia y un verdadero desafío personal que requiere un gran nivel de exigencia y preparación.
Quizá la natación es la parte que menos me atrae. En cuanto a correr, es duro, pero me encanta. También es cierto que siempre tengo molestias, rara vez corro y todo está en su sitio. La bicicleta es la parte que más disfruto y que más me gusta, sin lugar a dudas. En definitiva, es un esfuerzo superado por la felicidad y satisfacción de cruzar esa línea de meta.
¿A pesar del esfuerzo puedes vivir de tu deporte?
A día de hoy es completamente imposible, han sido varios los deportistas que han tenido que dejar la élite de este deporte por no poder compaginarlo con su trabajo.
Lo que sí puedes conseguir es vivir del deporte, pero no de este deporte, quiero decir, por tus resultados no conseguirás vivir de ello, a no ser que consigas un sponsor que te permita poder hacerlo.
«El deporte de élite requiere pasión, pero también esfuerzo y sacrificio»
¿Cuál es tu opinión sobre la diferencia disparatada de sueldos entre el fútbol y otros deportes como el tuyo?
Es vergonzoso. En el resto de los deportes existe un esfuerzo y un sacrificio de años, de familias enteras para que deportistas extraordinarios, con su trabajo y sus estudios, consigan ir a competir. Luchar por una medalla en europeos, mundiales o Juegos Olímpicos. Eso sí es espíritu deportivo.
Por otro lado, están las pequeñas empresas que ponen su granito de arena y colaboran con estos deportistas y que apenas tienen la publicidad que merecen.
¿Crees que la diferencia entre hombre y mujer en el deporte, en cuanto a cuestiones puramente físicas, se pueden suplir con una buena preparación?
Desde mi punto de vista, pienso que no; ante la misma alimentación y la misma preparación física, el hombre tiene ventajas en rendimiento sobre la mujer. La mujer lo puede suplir con una mejor preparación que el hombre.
¿Qué te aporta ayudar con el deporte, a través de la natación, a mujeres que padecen cáncer?
Es muy gratificante; desde que tengo la oportunidad de dar estas clases soy más feliz, me llena poder transmitirles lo que es el deporte para mí de una manera lúdica y divertida, sin olvidarnos del esfuerzo físico que supone cada clase para mejorar su condición física.
El objetivo principal que pretendo en mis clases es pasar 45 minutos de risas y cariño con ejercicios que supongan una mejora física para su día a día.