Entrevista > Fernando Ugeda / Escritor (Villena, 1961)
Afirma padecer ‘pesimismo congénito’ y este año ha presentado ‘Canción de amor para un monstruo’, una novela negra ambientada en el Madrid turbio de finales de los años ochenta. Un relato hilado gracias a dos policías antagónicos en su forma tanto de proceder como de pensamiento, que se enfrentan a una serie de asesinatos sin resolver cuyo único factor en común es la falta de un móvil para los crímenes.
Fernando Ugeda es un narrador de historias, tal y como él mismo se define, nacido en nuestra ciudad, que atesora en su haber cien premios en concursos literarios donde alterna prosa y verso, para dar el enfoque que cada relato merece. Su poema ‘Ojalá llegues a tiempo’ ha conseguido el primer premio en el concurso de Poemas y Coplas convocado por la Asociación Corazones de Tejina, la comisión de fiestas San Bartolomé 2023 y las comisiones de los Tres Corazones, en colaboración del Ayuntamiento de La Laguna en Tenerife.
Homenaje a Pedro Marco
Este mes de septiembre se presenta en Villena una recopilación de relatos coral escrita por un grupo de escritores villenenses, que, mediante la palabra, han querido dejar por escrito un homenaje póstumo a uno de los grandes de la pintura en nuestra ciudad: Pedro Marco.
«Leer, aparte de ser un entretenimiento apasionante, fomenta el pensamiento crítico y favorece la riqueza de vocabulario»
¿En qué momento comenzó tu afición por la escritura?
Fue a raíz de la realización de un cortometraje con un grupo de amigos en 1998, del cual escribí el guion. ‘La suerte del principiante’ llevó por título aquel propósito lleno de entusiasmo y de buenas intenciones.
A partir de entonces comencé a atrapar en el papel esas ideas un tanto estrafalarias que de vez en cuando rondaban por mi cabeza.
¿Cuándo decidiste coger el toro por los cuernos y embarcarte en una novela?
En 2004 afronté el reto de escribir una novela. Por aquello de tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro (ríe). Lo hice sin la más mínima pretensión de convertirme en escritor.
De hecho, pensé que fracasaría en el intento; sin embargo, al parecer había un pequeño novelista en mi interior. Posiblemente estuvo allí durante años, agazapado, sin moverse, sin apenas hacer ruido, para que no advirtiera su presencia. La alternativa del escorpión lo liberó.
Esa primera novela fue ‘La alternativa del escorpión’, ¿cuál fue la sensación al tener tu primer libro entre las manos?
Fue de felicidad. No imaginas la satisfacción que se siente cuando por fin alcanzas un sueño que llevas persiguiendo durante años. Tuve la sensación de que había coronado una cima muy alta, de que había llegado a meta. Después me di cuenta de que estaba situado justo en la casilla de salida y que el camino estaba por recorrer.
«Para la mayoría de los escritores resulta imposible vivir de la escritura, yo escribo porque encuentro placer al hacerlo»
En ella se habla sobre la verdad y la justicia, ¿crees que es cada día más difícil diferenciar la verdad de la posverdad social?
En mi novela el personaje de Archibal Lester pronuncia una frase: “la verdad desnuda no se reconocería a sí misma frente a un espejo”. Hoy los grandes medios de comunicación pertenecen a grupos financieros, cada uno de ellos con una ideología política muy marcada.
La ética periodística, salvo excepciones, hace tiempo que saltó por la ventana, por eso lo que prima es la desinformación, la manipulación mediática. Al parecer la verdad no importa cuando no le es útil al poder, y el ciudadano de a pie, crédulo por naturaleza, es la víctima perfecta.
¿Permite la literatura vivir de ello? ¿Con qué trabajo compaginas esta afición?
Para la mayoría de los escritores resulta imposible vivir de la escritura. Cierto es que los hay que se ganan bien la vida con la literatura; pero no suele ser lo habitual.
Escribo porque encuentro placer al hacerlo, y compagino esta afición con las labores domésticas. Tienes ante ti a un amo de casa.
¿Crees que el desarrollo audiovisual ha perjudicado a la literatura? ¿Se lee menos que antes?
Obviamente la lectura exige un mayor esfuerzo que el visionado de un vídeo, una película o una serie de televisión a través de una pantalla. No obstante, en contra de lo que pueda parecer, últimamente han aumentado los índices de lectura en España, dato más que positivo entre los menores de dieciocho años.
Leer, aparte de ser un entretenimiento apasionante, fomenta el pensamiento crítico y favorece la riqueza de vocabulario. Las palabras son las herramientas con las que construimos el pensamiento, razón por la que contar con un léxico amplio nos habilita para expresarnos con propiedad y poder armar el intelecto con reflexiones más profundas.
«La sobreexposición en redes sociales es la causante de un buen número de crisis de depresión y ansiedad»
‘Canción de amor para un monstruo’ es tu tercera novela publicada, ¿qué vamos a encontrar entre sus páginas?
Es una novela negra ambientada en el Madrid de finales de los ochenta. Berta Galbis y Amancio Serrano son los encargados de investigar una serie de asesinatos que, en principio, parece que no tienen nada en común, salvo la falta de móvil aparente.
Berta es una mujer joven, tiene la mirada limpia, cree en la bondad del ser humano, mientras que Amancio es un cincuentón en plena decadencia, un dinosaurio de la vieja guardia al que la Transición no le ha sentado bien.
Curiosa combinación de personajes…
Pensé que unir a dos personajes tan dispares, ambos al servicio de la ley, me ayudaría a desarrollar ciertas escenas y me facilitaría jugar con los diálogos. Yo de ti no me la perdería (ríe).
Además de escribir prosa, recientemente has recibido un premio por tu poema ‘Ojalá llegues a tiempo’, ¿llegaremos a tiempo como sociedad para detener este adormecimiento que las nuevas tecnologías nos provocan?
Padezco de pesimismo congénito, por lo tanto, mi respuesta no puede ser halagüeña. La sobreexposición en redes sociales nos ha convertido en una sociedad más frívola, aparte de ser la causante de un buen número de crisis de depresión y ansiedad, sobre todo en adolescentes.
Hay mucha gente desenfocada que se presenta ante los demás como modelos a seguir, y la única finalidad de este sinsentido es el económico o el de tener quince minutos de fama.
«Escribo poesía por jugar con las palabras, aunque me siento más cómodo cuando me pongo el traje de novelista»
¿Prefieres escribir en prosa o en verso? ¿Por qué?
Me considero un narrador. Cuando entiendo que el espíritu de la obra lo demanda, utilizo una prosa con un tinte ligeramente poético. Me agrada trabajar ciertas frases con el afán de embellecerlas. Tal vez por eso escribo poesía, por aquello de jugar con las palabras, aunque he de reconocer que me siento más cómodo cuando me pongo el traje de novelista.
Te has hecho especialista en ganar concursos literarios, ¿cuál es el secreto?
No creo que haya ningún secreto. La clave está en hacer las cosas bien y en ser constante. La escritura es una carrera de fondo y, por lo general, hay que llamar a muchas puertas si quieres que al final se abra una.
La suerte, siempre presente en todos los ámbitos, puede favorecerte una, dos o tres veces; pero no en un centenar de ocasiones.
¿Qué se siente al estar firmando ejemplares en la Feria del Libro de Madrid junto a alguno de tus ídolos?
Resulta muy estimulante sentir que uno forma parte de ello. Es una de las muchas recompensas que ofrece la literatura: firmar en ferias del libro, viajar, conocer lugares y gente, entablar amistad con otros escritores…
«‘Pedro Marco en palabras’ es un humilde homenaje que una docena de autores hemos dedicado a la memoria del pintor»
¿Cuál es el libro que tienes ahora mismo en tu mesita de noche?
Ahora mismo tengo entre manos ‘La soledad de Hans Teodore Mankel’, de mi amigo José Luis Muñoz.
¿Qué escritores tienes como referentes?
En mi adolescencia, el primer autor por el que sentí fascinación fue Edgar Allan Poe. Para un joven cuyas principales lecturas eran cómics y tebeos, las ‘Narraciones extraordinarias’ de Poe significaron un antes y un después.
Mis referentes son escritores que tratan muy bien la prosa, y el maestro, sin duda alguna, es Gabriel García Márquez.
¿Tienes algún nuevo proyecto literario entre manos?
Tengo una novela en el cajón, confío en que se publique en 2024. Además, este mes de septiembre se presentará en Villena la antología de relatos ‘Pedro Marco en palabras’, un humilde homenaje que una docena de autores y autoras hemos dedicado a la memoria del insigne pintor villenense. Y, por supuesto, seguiré participando en certámenes literarios.
