Durante buena parte de los meses de noviembre y diciembre de 2022, e, incluso, enero de 2023, más de un responsable de las centrales de reservas de los hoteles de Benidorm anduvo ‘mosca’ por aquello que le estaba mostrando su pantalla; y es que, para un fin de semana, el penúltimo del mes de enero, tradicionalmente malo (o malísimo) para el sector en la ciudad, el movimiento y la demanda era anormalmente elevada.
Con la resaca de Navidad todavía muy cercana y el Benidorm Fest (otro ‘nuevo’ invento de la ciudad que nunca descansa) todavía a la espera de que llegara su turno, esas semanas ‘tontas’ de enero son las que tradicionalmente han aprovechado muchos establecimientos hoteleros y hosteleros para bajar la persiana y descansar; o, incluso, acometer las siempre necesarias obras de mejora y mantenimiento.
«Para los ciclistas, el cambio de mayor calado en el circuito es que la recta de meta será un poco más larga» P. Momparler
Lleno histórico
Pocos se habían tomado realmente en serio los avisos de un grupo de lunáticos, encabezados por el seleccionador nacional de ciclismo, Pascual Momparler, que llevaban casi un año avisando de que lo que estaban preparando para la ciudad un día 20 de enero en los parques de El Moralet y Foietes, era algo grande. Muy grande.
Decían que aquello movía masas, que es lo más parecido a juntar deporte y fiesta, que en Bélgica y los Países Bajos esos eventos son religión; que allí, cada domingo, cerca del 80% de los televidentes se sientan en su sofá para pasar la tarde viendo aquello… Y que el mejor español de todos los tiempos en ese deporte, que muchos no sabían que existía, era un vilero que estaba maravillando en Centroeuropa.
¿Cicloqué?
Muy pocos les creían cuando decían que iban a meter en ese circuito a unas 10.000 personas; pero Momparler y los suyos siguieron a lo suyo. Sabían que tenían dos misiones cruciales. La primera, cumplir con las altísimas expectativas que se habían autoimpuesto públicamente. La segunda, contestar con infinita paciencia la misma pregunta una y otra vez: “¿cicloqué?”.
Llegó la Copa del Mundo de Ciclocross a Benidorm y cerca de 20.000 personas llenaron aquel sábado y aquel domingo el circuito. 20.000 almas que durmieron en la ciudad y que, sobre todo, consumieron con alegría en sus restaurantes y cafeterías, para cerrar, como reconoció el sector al unísono, el mejor enero de la historia del turismo en Benidorm. Ahí es nada.
En su primera edición la asistencia superó todas las expectativas, consiguiendo el mejor enero de la historia del turismo en Benidorm
Segunda edición
El próximo día 21 de enero la Copa del Mundo de Ciclocross de Benidorm vivirá su segunda edición, pero esta vez no va a pillar a nadie con el pie cambiado. El sector, el turismo, ha hecho los deberes y nadie se ha planteado cerrar esa semana en Benidorm. Sobre todo, una vez que se ha sabido que la venta de entradas marcha muy por encima del año pasado.
También tomaron buena nota los organizadores, que han prometido cambios significativos en el circuito y, sobre todo, en el propio recinto de El Moralet y Foietes; después de, como explica el propio Pascual Momparler, “haber escuchado los muchos comentarios y opiniones que nos hicieron llegar los ciclistas y, sobre todo, los aficionados”.
Más sitio para los aficionados
En lo que a esas variaciones se refiere, Momparler avanza que “para los ciclistas, el cambio de mayor calado es que la recta de meta será un poco más larga” y una ligerísima reducción de la longitud total de cada vuelta, que pasará de los 3.150 metros de 2023 a los 3.000 exactos de 2024.
Pero los cambios más importantes llegan, como subraya el organizador, después de haber “procurado hacer caso al público, porque los aficionados son quienes mejor saben cómo debe ser la fiesta del ciclocross. Escuchamos sus sugerencias tras la carrera, y a raíz de eso, hemos añadido más espacios de tipo Fan Zone, previsto más pantallas para seguir la competición, y mejorado la circulación de los aficionados en el circuito, con más puentes y distancias más cortas”.
«Este año habrá más espacios de tipo Fan Zone y más pantallas gigantes para seguir la competición» P. Momparler
Los mejores volverán a Benidorm
Todo ello ha hecho que, tras sólo un año de existencia, la Copa del Mundo de Ciclocross de Benidorm se haya convertido en una cita fija en el calendario de las más grandes estrellas de este deporte.
Mathieu Van der Poel, Wout van Aert y Tom Pidcock, los tres ‘llenacircuitos’, ya han confirmado que estarán en la línea de salida el día 21 de enero, lo mismo que sucede con las mejores ciclistas femeninas del momento, encabezadas en Benidorm por Fem van Empel, Puck Pieterse o Pauline Ferrand Prevot.
Felipe Orts, el sueño del primer podio
Otro que no faltará a la cita es el vilero Felipe Orts, que vestirá en Benidorm los colores de su nuevo proyecto, tras abandonar el día 31 de diciembre las filas del Burgos-BH, equipo en el que ha militado los últimos años.
Orts ha conseguido este invierno los mejores resultados de su carrera, incluyendo el primer podio jamás obtenido por un español en pruebas del Superprestigio, y el primer top5 de un ciclista patrio en una cita valedera para la Copa del Mundo, por lo que no son pocos los que sueñan con verle subir en Benidorm por vez primera a un podio de una carrera de la máxima categoría del ciclocross internacional.