Juan Navarro / Fotógrafo
Los nostálgicos de la NBA de los ochenta, para muchos la época dorada del baloncesto americano, desconocen que un valenciano -Juan Navarro (València, 20-febrero-1961)- colaboró varios años con los Boston Celtics, realizando fotografías durante los partidos que se disputaban en la capital de Massachusetts.
Fueron momentos de una durísima rivalidad entre Celtics y Lakers, liderados respectivamente por Larry Bird y ‘Magic’ Johnson. Navarro ocupaba un pequeño espacio en el mítico Boston Garden y hablamos con él para que nos desvele cómo era trabajar en United States of America (USA) y alguna de las mil anécdotas que allí vivió.
En la actualidad, tras pasar por diversos medios de comunicación, este veterano fotógrafo, toda una institución, sigue demostrando su talento en los partidos que juega como local el València Basket en la Euroliga.
¿Cómo te inicias en la fotografía?
Como mi padre falleció pronto, mi madre acogía estudiantes en nuestra casa. A una de ellas, americana, la acompañé a las Fallas, pero le daba vergüenza pedir hacer fotos a las falleras, así que las hice yo, y me gustó. Comencé a interesarme, comprándome libros y, poco a poco, una cámara, objetivos…
Seguidamente marchas a Estados Unidos.
Llegué a Boston -ciudad muy europea, llena de italianos e irlandeses- con un visado de seis meses y acabé estando cinco años, entre 1982 y 1987. Durante un tiempo incluso estuve ilegal (ríe), hasta que conseguí los papeles para trabajar; fui entonces al Boston Art Institute y estudié fotografía.
Anteriormente hice numerosos trabajos, como limpiar platos, de mensajero o repartir flores.
«Siempre te dan una oportunidad en Estados Unidos; luego debes demostrar si eres bueno»
¿De qué modo te vinculas con los Celtics?
Quería ser fotógrafo, pero de deportes -lo que realmente me gustaba-, y un día acudí a las oficinas del club. A diferencia de España, en Estados Unidos siempre te facilitan las cosas y te dan una oportunidad; después tienes que demostrar que eres bueno.
Les dije que estaba estudiando fotografía deportiva y que me gustaría hacer algún partido de los Celtics para fin de curso.
¿Qué te contestaron?
Me dieron un pase de prensa de temporada, sin pertenecer a ningún medio de comunicación. Tenía siempre que llamar para ver si tenía sitio bajo las canastas, porque no era lo mismo un partido frente a Sacramento que ante los Lakers o Philadelphia.
Fui haciendo fotografías y tenía que darles de cada encuentro tres o cuatro, que supongo empleaban como imágenes de archivo.
Te debieron suceder numerosas anécdotas.
Michael Jordan, por ejemplo, un día se cayó sobre mí y me dijo ‘sorry’. Mi mayor preocupación en ese instante era no lesionarle, porque él posteriormente revitalizó la liga. No me importaba si me había roto la cámara o dislocado mi hombro en su caída.
«Tras cinco años en Boston quise regresar, porque soy muy de la tierra, muy mediterráneo»
¿Cómo era el trato con los propios jugadores de Boston?
Nunca acudía a los entrenamientos, únicamente a los partidos, y supongo que para ellos yo era uno más. Sí que había mucha accesibilidad para entrar en vestuarios y poder hablar con los jugadores tras los partidos.
De hecho, más tarde, trabajando yo en la revista mensual ‘Don Basket’, me encargaron una foto de Jordan sujetando el número uno y se prestó con suma amabilidad. Son muy profesionales en ese sentido.
¿Regresas entonces a España?
Vuelvo porque me encontré con la disyuntiva de quedarme allí para siempre o regresar, y yo soy muy mediterráneo: echaba de menos la tierra, la familia, la gastronomía, la forma de vivir…
Meses antes fui haciendo un portafolio de fotografías, también de otros deportes como fútbol, y al llegar lo envié a varios medios de Barcelona, entre ellos ‘Mundo Deportivo’. Probé para ese diario en un partido del Espanyol, en Sarrià, pero mis fotos no se adecuaban a ese medio y me recomendaron para la revista ‘Don Balón’.
¿Te contrataron?
Sí, para estar en Madrid, aunque hubiera preferido quedarme en Barcelona. Estuve un total de diez años trabajando para ‘Don Balón’, antes de fichar por ‘As’.
Este diario abrió posteriormente delegación en València y me dieron la opción de venirme a mi ciudad. Estuve en ‘As’ unos años, hasta que llegó la crisis de 2008 y acabó mi vinculación con ellos.
Ahora trabajas para la Euroliga.
Finalizada mi estancia en ‘As’, mantuve numerosos contactos. Uno de ellos me pidió que comenzara a cubrir los partidos continentales del entonces Pamesa, ahora Valencia Basket.
También colaboré cuatro años en el diario ‘Público’, hasta que el cambio de gobierno provocó su desaparición.
¿Tanto ha cambiado la fotografía?
Muchísimo, es otro mundo, no solo por la digitalización. Antes no había autofoco, por ejemplo, y si no enfocabas bien, las fotos salían mal. Tampoco wifi, Photoshop…