El pasado 30 de enero el pleno municipal de Crevillent aprobó, por unanimidad de todos los grupos políticos, que la propiedad del polígono I-6 (también llamado de Boch) fuera recepcionada por el ayuntamiento. Se pone así fin a una situación irregular de indefinición que llevaba vigente desde que dicha área industrial fuera constituida hace décadas.
“Al no estar completamente recepcionado, el ayuntamiento no tenía oficialmente la propiedad del polígono. Así que no podíamos actuar reparando aceras, renovando el alumbrado, demandar subvenciones, etc.” nos señala Vicente Sánchez-Maciá, concejal de Planeamiento Urbanístico.
Solo una recepción parcial
El proyecto del polígono de Boch viene desde los años ochenta. Una vez ya finalizadas todas las obras realizadas por una junta formadas por promotores privados, no fue hasta 1994 cuando el Ayuntamiento de Crevillent realizó una recepción parcial de algunos de los terrenos para así poder instalar el alumbrado público y el alcantarillado.
Sin embargo no se llegó a realizar nunca la recepción total. Finalmente en 1996 el proyecto de reparcelación del polígono fue inscrito en el Registro de la Propiedad nº 3 de Elche, dejando esta área industrial en un limbo jurídico.
Se pretende solicitar una subvención al IVACE para reparar las deficiencias del polígono
Buscando la fórmula jurídica
Recientemente el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) ha sacado una nueva línea de subvenciones, cuyo plazo para su solicitud termina este 12 de febrero. Esta cuestión ha motivado que el equipo de gobierno haya querido correr para regularizar el estatus del polígono del Boch.
“Pusimos la maquinaria en marcha, y tuvimos bastantes reuniones tanto con los técnicos municipales como con el IVACE. Se redactó un informe jurídico en el que nuestros abogados interpretaron que era posible realizar una recepción tácita del polígono basándose en el tiempo transcurrido desde su construcción y en su actividad existente”, nos señala Sánchez-Maciá.
En concreto el documento redactado por los técnicos municipales determina que la citada operación es factible “cuando las obras de urbanización están en uso y servicio, a través de una actitud de tolerancia y consentimiento de la Administración e incluso actitud activa concediendo licencias de obra y ocupación que requerirán de manera ineludible el uso de la urbanización (viales, servicios e infraestructuras)”.
El servicio jurídico del ayuntamiento incluso encontró jurisprudencia que justificaba esta recepción tácita en base a varias sentencias del Tribunal Supremo.
La recepción se ha realizado de forma tácita amparándose en jurisprudencia del Tribunal Supremo
Siguientes pasos
Amparándose en dicho informe jurídico la recepción se ha elevado este enero al pleno municipal. Ahora el siguiente paso es inscribir definitivamente el polígono de Bosch como propiedad del ayuntamiento en el Registro de la Propiedad.
A partir de ahí ya se podrán solicitar las pertinentes subvenciones al IVACE. “Estamos confiados en que vamos a llegar al plazo límite establecido” nos asegura Sánchez-Maciá.
Todavía quedan más polígonos pendientes de ser recepcionados por el ayuntamiento
Reformas pendientes
Cabe señalar que estas ayudas anunciadas por el IVACE son de carácter competitivo, por tanto su sola solicitud no asegura que vayan a ser concedidas a Crevillent. En cualquier caso, desde la Concejalía de Planeamiento Urbanístico se está elaborando un informe técnico para establecer exactamente cuáles son las actuaciones a realizar.
“Teníamos quejas constantes por parte de propietarios de las naves y de vecinos por el mal estado de las calles. Es verdad que está bastante deteriorado y precisa de varias reformas. Las vías principales tienen hoyos y desperfectos causados por el constante tránsito de camiones. Las aceras también están algo rotas, y la iluminación es insuficiente” nos manifiesta Sánchez-Maciá.
El importe de esta subvención, en caso de que sea concedida, aún está por determinar, pero desde el ayuntamiento confían en que sea tan cuantioso como para poder costear todas estas intervenciones. “En principio contamos con que no será necesario presupuestar fondos propios municipales para este polígono, dado que a partir de ahora sí podemos optar a subvenciones” nos señalan.
Otros polígonos
La cuestión del I-6 Boch no es ni mucho menos un caso aislado en Crevillent, ya que existen otros cuantos polígonos industriales que todavía no han sido recepcionados oficialmente por el ayuntamiento. Así pues, el equipo de gobierno municipal quiere replicar esta misma fórmula jurídica de la recepción tácita en las demás áreas que llevan largos años levitando en un limbo jurídico.
“Éste es un problema que viene heredado de gobiernos anteriores, y nosotros queremos ir solventándolo poco a poco. De momento ya hemos desbloqueado el Boch y la idea es ponernos con los demás próximamente para tenerlo todo recepcionado y en orden”, nos señala Sánchez-Maciá.
El edil de Planeamiento Industrial considera que esta medida puede ser incluso un punto de inflexión para la industria local.
“Esto es lo que nos están solicitando los propios empresarios industriales; algunos ya están bastante molestos porque no se reparen las deficiencias. Cada polígono padece sus propias problemáticas, pero es importante para un pueblo con tanta historia industrial como Crevillent solucionar este tema para que el ayuntamiento pueda actuar libremente sobre ellos. Esperamos con esto conseguir que no se vayan más industrias e incluso que vengan muchas nuevas” nos comenta.