El Museo de Aguas de Alicante ha acogido la presentación del “Primer Informe sobre cambio climático y gestión del agua en la ciudad de Alicante”, documento desarrollado en el marco de las actividades de la Cátedra Institucional de Aguas de Alicante sobre Cambio Climático de la Universidad de Alicante, y elaborado por Inteligencia Climática, consultora climática y meteorológica. El acto ha contado con la participación de Sergio Sánchez, director general de Aguas de Alicante; con Jorge Olcina, director de esta cátedra universitaria, además de catedrático de Análisis Geográfico Regional en dicha universidad y director de su Laboratorio de Climatología; así como con Pablo Mirete, CEO de Inteligencia Climática S.L.
Como han expuesto los intervinientes esta mañana, este informe es una primera toma de contacto con la realidad actual de los efectos del cambio climático en Alicante y su relación con la gestión del agua potable que lleva a cabo la empresa mixta Aguas de Alicante. A su vez, el trabajo tiene la pretensión de actualización anual, en el marco de las actividades de la Cátedra, de modo que vaya analizándose la evolución del proceso actual de cambio climático en el ámbito alicantino, ofreciendo pautas para la correcta adaptación de la ciudad.
Principales datos sobre cambio climático en el informe
Dentro de la exposición de datos llevada a cabo por Inteligencia Climática, destaca que:
- El proceso actual de cambio climático por efecto invernadero de causa antrópica es innegable y está avalado, científicamente, con datos atmosféricos y ambientales.
- La ciudad de Alicante, en el litoral mediterráneo español, es uno de los territorios que más está experimentando los efectos del proceso actual de calentamiento climático.
- Las temperaturas medias están sufriendo un ascenso cercano a 1ºC, con respecto a la década de los 40. Este ascenso se ha producido básicamente en los últimos cuarenta años, desde 1980 a la actualidad.
- Ha sido mayor el aumento de las temperaturas mínimas nocturnas, que se han incrementado en 1,5ºC desde 1940 a la actualidad.
- El número de noches tropicales se ha multiplicado por 4, desde los años 70 hasta la actualidad. Si en los años 70, se registraba un promedio de 15 noches tropicales al año, en contraste con el panorama actual (2012-2022) que presenta una registro medio anual de 80 noches anuales, habiendo incluso años en los que se han superado las 90 noches tropicales. Esto quiere decir que durante 3 meses el termómetro no baja de los 20ºC en la ciudad de Alicante, con lo que ello supone de pérdida de confort térmico.
- Las precipitaciones muestran un comportamiento más irregular. Este es un aspecto característico en todo el litoral mediterráneo. No obstante, se muestra una tendencia descendente en la cuantía anual desde 1990 a la actualidad. En el conjunto de la serie analizada (1940-2020) la precipitación media anual ha pasado de 348 l/m2 en la década de los años 40 del siglo pasado a 293 l/m2 en la década 2010-20. Esto significa que en 80 años se han perdido, por término medio, 50 l/m2 anuales.
- Por tanto, en Alicante llueve menos y lo hace de forma más irregular y concentrada en el tiempo.
- Por su parte, el viento que es un elemento climático de difícil análisis en sus registros y evolución futura, muestra una tendencia al descenso en su velocidad media. Este hecho está en relación con el aumento de jornadas de pantano barométrico y la pérdida de intensidad de la brisa marina que se registra de forma notable desde los años noventa del pasado siglo.
- La temperatura del agua del mar frente a la costa de Alicante muestra una clara tendencia al aumento desde los años 80 del siglo pasado a la actualidad. Con datos del CEAM (Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo), se estima que ese incremento ha alcanzado 1,5ºC en 2023. Con este hecho marítimo se relacionan dos procesos meteorológicos:
- un número mayor de noches tropicales, como se ha comprobado
- una irregularidad e intensificación mayor de las precipitaciones, como también se ha comprobado.
- Las proyecciones de los modelos climáticos oficiales (AEMET, Adaptecca) para Alicante señalan los siguientes aspectos:
- aumento de la temperatura media máxima hacia 2100 (4-5ºC en los escenarios tendenciales de emisiones).
- aumento de los días cálidos (entre 20 % y 60% en 2100 según escenarios favorables y menos favorables de emisiones).
- mayor irregularidad de las precipitaciones y tendencia al descenso de los totales anuales (-15 a -20% hacia 2100 en los modelos tendenciales de emisiones).
- menos número de días con lluvia (-10 a -15 días al año hacia 2100 en los escenarios tendenciales de emisiones).
Principales datos sobre gestión del agua en el informe
En cuanto a la gestión del agua potable en Alicante y su adaptación al proceso de cambio climático, se ha puesto en valor que:
- Alicante es una de las ciudades del litoral mediterráneo con una gestión más eficiente del agua potable.
- La fórmula de gestión mixta resulta especialmente idónea para la gestión de este servicio básico para la sociedad. De manera que se convierte en un ejemplo a seguir en otras localidades de nuestro país.
- Desde 2005 se registra una tendencia al descenso en los volúmenes de agua suministrados. Esto quiere decir que la eficiencia en la gestión del agua es cada vez mayor. Con menor agua se suministra servicio a una mayor cantidad de población.
- Esto se comprueba en los datos de gestión de las pérdidas en red y en el rendimiento de la misa que siempre está por encima del 85%. En los últimos años se han registrado rendimientos del 90%.
- Este dato es uno de los más elevados de España para ciudades del tamaño de Alicante y con un modelo urbano que combina concentración y dispersión urbana (pedanías, zonas rurales).
- Alicante es una de las ciudades españolas con mayor nivel de depuración y reutilización del agua depurada, especialmente para uso agrario.
- Para el sector agrícola, se ha evidenciado un aumento significativo, pasando de 5 millones de m3 en 2010 a casi 9 millones de m3 en 2022. De manera similar, se ha observado un crecimiento en el uso de aguas regeneradas en el entorno urbano, ascendiendo de 796.000 m3 en 2010 a 1.190.134 m3 en 2022.
- Alicante es una ciudad pionera en la incorporación de aguas residuales para el riego de parques y jardines (públicos y privados), a partir de la implantación de redes específicas para la distribución de aguas regeneradas.
- Alicante es también una ciudad pionera en la incorporación de aguas pluviales al sistema de gestión del agua potable, a partir de la construcción de depósitos pluviales y del parque inundable de La Marjal (playa de San Juan). Estas infraestructuras permiten un doble fin: captación de agua pluvial y reducción del riesgo de inundaciones en el área urbana al reducir las láminas de agua que circulan por las calles con ocasión de lluvias intensas. Y además efectúan un primer filtrado de contaminantes del agua pluvial que se tratan, definitivamente, en las plantas de depuración (Orgegia y Rincón de León).
- El Plan Estratégico de la empresa Aguas de Alicante tiene prevista la construcción de nuevos depósitos pluviales que se pondrán en marcha en los próximos años.
- Alicante tiene diseñado un sistema de gestión del agua potable muy eficaz. Es un sistema “multi-fuente” (aguas superficiales y trasvase Tajo-Segura (MCT), aguas subterráneas (pozos Vinalopó) y desalación y depuración) que permite garantizar la “seguridad hídrica” a que obliga la Ley de Cambio Climático de 2021. De manera que si desciende la aportación de una fuente puede ser sustituida por otra, sin perjuicio para el suministro.
Indicadores y conclusión general
El informe incluye una serie de indicadores de estado para evaluar de forma constante la gestión del agua en la ciudad de Alicante en relación con el proceso de cambio climático.
Como conclusión general, el documento refleja que:
“Alicante es una de las ciudades del mediterráneo español que más está notando los efectos del proceso actual de cambio climático, pero dispone de uno de los sistemas de distribución, gestión y planificación del agua potable más eficaces de España que garantiza una adecuada adaptación a los efectos del calentamiento climático”.
Segunda fase del Informe
Como objetivos para la elaboración del Segundo Informe (finales de 2024-comienzos de 2025) está previsto manejar modelización climática propia y adaptada al municipio de Alicante. También, la elaboración de una aplicación que muestre de forma inmediata los datos atmosféricos y de gestión del agua en la ciudad.