Entrevista > Ana Sánchez / Presidenta de la Cofradía de la Santa Mujer Verónica de Elche
La Cofradía de la Santa Mujer Verónica tiene una dilatada historia, cuyos inicios se remontan a 1948, cuando fue fundada por la Sociedad de la Coral Ilicitana. La imagen era de Olot, de pasta de madera, y procesionaba desde el convento de las Clarisas.
El primer trono era de estilo barroco, portado por veinticuatro costaleros y realizado en Elche por artesanos de la cofradía. En la actualidad son más de cuatrocientas personas las que conforman esta longeva hermandad.
Más de 100 costaleras
Desde su fundación, los presidentes han sido siempre directivos pertenecientes a la Coral Ilicitana, hasta que la sociedad desapareció, y su último presidente, Juan Crespo Riera, le dio la cofradía al socio, Roberto Casanova Leal, en 1977. En la actualidad es una mujer la que preside esta cofradía desde 2015, Ana Sánchez.
La mujer ha ido cobrando gran protagonismo en la Verónica, desde que en 1992 el trono de esta cofradía salió por las calles de Elche portado a hombros por 78 costaleras, y ahora son más de cien las mujeres que lo portan. La actual presidenta fue una de las primeras mujeres costaleras en Elche en el año 95.
«En los últimos años se está notando un aumento de participación de gente joven»
Para ser costalera, ¿qué preparación se requiere?
Lo primero es la fe a la Virgen, que es lo nos mueve más que nada. Tenemos una lista de espera de casi doscientas mujeres que quieren ser costaleras. Por lo demás, lo más importante son los ensayos, que sirven de entrenamiento, para acostumbrar al cuerpo a soportar un peso al que no está habituado.
Después de Navidad comienzan ya los ensayos una vez a la semana, para que llegado el momento hayamos ejercitado lo suficiente, para que no surja ningún problema ni ninguna lesión en la espalda.
Sin olvidar el trono infantil desde 2009, de donde han salido muchas de las actuales costaleras…
Claro. La cofradía creó en 2009 un trono infantil, con atributos de la pasión, portando una alegoría de la Santa Faz, insignia de la Santa Mujer Verónica, realizado en Talleres Salmerón, en plata.
Es portado por cuarenta niñas, inmejorable cantera, que un día podrán llegar a ser costaleras del trono titular. Muchas de las que empezaron en el 2009 ya lo son. La verdad es que en los últimos años se está notando mayor participación de gente joven en la Semana Santa, y son muy necesarios para asegurarnos el relevo generacional.
¿Qué actos han celebrado con motivo del 75 aniversario?
Han sido muchos los actos que hemos celebrado durante el año para conmemorar nuestro 75 aniversario.
El último y más reciente, que ha servido para culminar todos esos actos, lo celebramos el último fin de semana de abril, con el IX Encuentro Nacional de Cofradías y Hermandades de Santa Faz y Verónica. Hasta Elche se desplazaron delegaciones de diferentes puntos de España.
«Tenemos una lista de espera de más de doscientas mujeres que quieren ser costaleras»
¿La reliquia peregrina llegó desde Pilar de la Horadada y estará en Elche durante todo el año?
Así es. Quien quiera visitarla todo el año puede hacerlo, en la iglesia del Corazón de Jesús. Por otra parte, las más de cien personas que participaron, tuvieron la oportunidad, entre otras cosas, de disfrutar de una exposición y demostración de trenzado de palma blanca.
Por la tarde se hizo la procesión extraordinaria con la reliquia peregrina y con la imagen de la Santa Mujer Verónica. A la llegada a la Basílica de Santa María, se realizó la ‘levantá’ a la Virgen de la Asunción.
¿Algún acto más a destacar?
Sí. No me quiero olvidar de la Feria Diocesana ‘Lux Mundi’, que se celebró en enero, donde nuestras costaleras portaron la imagen de nuestra patrona, la Virgen de la Asunción, lo que queremos agradecer a la Sociedad Venida de la Virgen.
¿En tantos años han sucedido muchos cambios?
Los cambios han sido todos para ir mejorando. En los años setenta se le puso ruedas al trono y en los ochenta se cambió de nuevo. Dos años más tarde, en 1982, se encargó una imagen nueva de talla en madera al escultor Valentín García Quinto, y cambió su salida a la parroquia de San José, detrás de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Caída. Ese año se estrenó la pintura con la cara de Cristo, obra de este mismo autor.
«Todos los cambios han sido para ir mejorando»
¿Los últimos cambios son relativamente más recientes?
Así es. Ya en 1999 se realizó el manto por Talleres Escudero de Orihuela en terciopelo azul marino con bordados en oro, y en el año 2002, la imagen estrenó túnica blanca de terciopelo con bordados en hilo de oro realizado también por Talleres Escudero.
¿Siempre hay un recuerdo entrañable de la Coral Ilicitana?
Siempre. Gracias a ellos se creó esta cofradía hace 75 años, y gracias a ellos aún estamos aquí. Desgraciadamente ya quedan muy pocos de esos inicios, pero aún tenemos la suerte de contar con algunos de aquellos fundadores entre nosotros, y siempre tenemos presente de dónde venimos.
La vinculación con la Cofradía de La Caída sigue siendo especial, motivada por el encuentro del Cristo con la Verónica cada Semana Santa.
Es que desde los inicios de la Verónica, en el año 48, hemos ido unidos a la Cofradía de La Caída.
Con ellos protagonizamos uno de los encuentros más emotivos de la Semana Santa. Se trata del encuentro de Nuestro Padre Jesús de la Caída y la Santa Mujer Verónica en la plaça de Baix, cuando a la Santa se le abre el pañuelo con la faz de Cristo. Una escena en la que las cuadrillas de costaleros tienen especial protagonismo.