¿Para qué depender de unas instalaciones cuando tienes la naturaleza? Algo así deben pensar los nadadores en aguas abiertas. Más allá de piscinas municipales, de calles ocupadas, de horarios de cierre y apertura, y de bonos por sesiones de baño, nadar en aguas en el Mediterráneo gana cada vez más adeptos.
Representa, además, un deporte que se puede practicar sin tener que quedar con nadie. Aunque también puedes socializar apuntándote a algún club o quedando por redes sociales. Nadar es sano, a nivel de articulaciones no es agresivo, trabaja todos los grupos musculares y posee ese componente de integración en la madre naturaleza.
Grupos de WhatsApp
Pese a que hay muchos nadadores que prefieren ir a nadar en soledad, también existen muchos que prefieren reunirse. Esto depende del carácter de cada nadador, del nivel de seguridad en el nado y de los horarios laborales. Así, para aquellos que prefieren salir en compañía, existen diferentes grupos de WhatsApp en València y en otras redes sociales (Facebook, etc.) donde se establecen horarios, días y playas donde reunirse para salir a nadar.
Algunos clubes oficiales también ofrecen estas posibilidades, como el Club Valenciano de Natación o el Club Natación Mediterráneo, entre otros. Ignacio Tirapu, nadador amateur, practica la natación en aguas abiertas nueve meses al año: “quitado de los meses duros de invierno en València, a partir de Fallas ya vuelvo a coger el traje de neopreno y salgo a nadar hasta noviembre”.
Este veterano nadador valenciano explica sus rutinas: “prefiero quedar con gente, por precaución básicamente. Estoy en un grupo de WhatsApp, y los fines de semana y alguna tarde, cuando el mar ya está tranquilo, me ‘engancho’ a algún grupo y acudo para nadar con ellos. Se hace buen ambiente. Incluso quedamos para apuntarnos a alguna travesía en ocasiones”.
Clubes como el Valenciano de Natación y el Natación Mediterráneo ofrecen muchas ‘quedadas’
El material básico
Parte del material que utilicemos para nadar en aguas abiertas deberá combinar su eficiencia con su visibilidad. Es decir, un gorro, no sólo ha de ser estanco y cumplir bien su función, sino que además deberá de ser visto desde la orilla en caso de que el nadador sufra un percance y necesite socorro.
Además del gorro y de las imprescindibles gafas de natación (con efecto espejo mejor para evitar molestias con el sol), conviene equiparse de un traje de neopreno. Este deberá ser flexible, poseer flotabilidad neutra y aportar el aislamiento térmico adecuado. Muchos utilizan también guantes e incluso escarpines.
La boya, aparte de aportar alta visibilidad, también resulta imprescindible. Como accesorio básico de seguridad, como elemento que nos dota de una flotabilidad añadida (en caso de tener que parar para descansar) y como una suerte de maletita donde llevar nuestros efectos personales de una forma segura, práctica y estanca.
Las gafas de natación han de tener efecto espejo a fin de evitar las molestias con el sol
Meteorología
Para nadar en aguas abiertas el nadador debe estar muy pendiente del tiempo. El tiempo en exterior, a nivel de temperatura, pero también del viento y de las mareas. Por no hablar de las corrientes y de la temperatura del agua. Las nuevas y prácticas apps facilitan planificar bien las sesiones.
El oleaje es clave. La mejor situación para nadar, sin duda, es sin olas. Cuando superan el metro de altura no se recomienda entrar a nadar. Las direcciones de las corrientes principales y cómo se ven afectadas por las mareas va a depender de cada playa. En resumen: hay que conocer la playa donde nadas.
La boya dota de una flotabilidad añadida y permite llevar nuestros objetos de manera segura
Técnica y preparación
A diferencia de la natación en la piscina, donde el agua posee una temperatura, movimiento y salinidad controlados, la natación en aguas abiertas se antoja muy diferente. Es por ello que la técnica de nada varía en aguas abiertas. Para empezar, conviene recordar algo que parece obvio: nadar buscando una posición lo más hidrodinámica posible.
El cuerpo debe tener la mayor flotación sin la ayuda del neopreno. ¿Cómo conseguirlo? Colocando bien la cabeza, dándole a los pies, dominando la respiración y estirándose bien en el agua. Los movimientos han de ser fluidos. Nadar en el mar es muy exigente. Para mejorar la resistencia, se recomienda nadar, sin pausa y de forma cómoda, la distancia que uno se plantea nadar en el mar al menos dos-tres veces por semana.
Conflicto en la Patacona
Pese a que los nadadores son gente tranquila, silenciosa y amante de la naturaleza, hay algunos vecinos que se sienten incomodados con su presencia. Suena extraño, pues estos simplemente llegan con sus vehículos (o en transporte público), aparcan, se ponen la equipación deportiva y se arrojan al mar.
Varios nadadores de aguas abiertas que acuden a la playa de la Patacona están recibiendo amenazas y actos vandálicos de algún vecino, que hace grafitis en las paredes en contra de estos y deja notas intimidantes en las lunas de sus coches. La Policía Local de Alboraya ya se encuentra investigando al autor de dichas amenazas hacia los nadadores, quienes no salen de su asombro frente a esta hostilidad.