La Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, a través de la Dirección General de Medio Natural y Animal, ha retirado 500 kilogramos de redes y restos de cabos en el ámbito marino del Parque Natural de Serra Gelada para la restauración de ecosistemas.
Con esta actuación, desde la Conselleria que dirige Salomé Pradas, y dentro del proyecto de ‘Restauración de zonas degradadas en el ámbito marino del Parque Natural de la Serra Gelada y su entorno litoral’, se contribuye a la mejora ambiental de este espacio natural protegido mediante la colaboración entre distintos colectivos como pescadores y centros de buceo, así como instituciones relacionadas con la conservación del medio marino.
Estos trabajos, que se enmarcan en un proyecto que permite la retirada de artes de pesca perdidos o abandonados para la restauración de ecosistemas afectados en toda la Comunitat Valenciana, consisten en trabajos submarinos que se han desarrollado en la Zona Especial de Protección del Islote de Benidorm.
Para estas inmersiones, la Conselleria de Medio Ambiente ha contado con el equipo de Guardacostas de la Generalitat, así como de un equipo integrado de buceadores profesionales-científicos de la Fundación Oceanogràfic, que cuenta con el apoyo de la Conselleria de Agricultura, Ganadería y Pesca.
Además de los trabajos de retirada de artes de pesca perdidos o abandonados, también forma parte de este proyecto el estudio del impacto de las ‘basuras marinas’ sobre la zona afectada y la posterior recuperación tras su retirada.
Actuaciones concretas
Por un lado, se han retirado restos de redes, cabos, sedales, plomos, anclas y cadenas, que habían quedado enganchados en los anclajes de los sistemas de fondeo que hay instalados en esta zona.
Además de haber detectado algunos peces y rayas enganchados en estos restos, el rozamiento que estaban produciendo sobre el fondo, afectaba a una población de algas rojas calcáreas (maërl) de gran valor ecológico y poco frecuente en el Mediterráneo que está protegida tanto por la regulación medioambiental y del parque natural como por la normativa pesquera vigente en la Comunitat Valenciana.
Por otra parte, en el lugar donde se ha intervenido, a 30 metros de profundidad cerca del islote de Benidorm, los restos retirados cubrían un arrecife rocoso en el que existe una pequeña población de corales gorgonias que no se ha visto afectada pero que, gracias a esta intervención, ha recuperado las condiciones naturales en poco tiempo.
Durante la última fase de retirada en esta zona, se ha encontrado un caballito de mar de la especie Hippocampus guttulatus que había quedado atrapado entre los restos. El ejemplar ha sido trasladado al Área de Recuperación y Conservación de Animales del Mar (ARCA) de la Fundación Oceanográfic para su evaluación y recuperación, antes de su liberación de nuevo en el mismo enclave donde se encontró.
Para el seguimiento ambiental adecuado, el equipo de Guardacostas dispone de tecnología para monitorizar los fondos marinos (ROV Submarino), lo que permite, además de la localización de artes de pesca abandonados o ilegales, el seguimiento y monitorización de especies de especial conservación como las praderas de Posidonia oceánica existentes en el parque natural.
Por su parte, el equipo de la Fundación Oceanográfic lleva a cabo la evaluación y monitorización de las zonas afectadas por artes perdidos de forma previa y la retirada de la red. Esta monitorización se basa en la valoración detallada de las especies que están atrapadas en los aparejos de pesca, el desarrollo de la metodología para la retirada de las redes sin causar un daño a los organismos, sobre todo estrellas, erizos de mar o los corales gorgonia, que pueden vivir en contacto con las redes, así como el estudio de la biodiversidad existente tras la extracción.