Entrevista > Luis Miguel García Lozano / Magistrado (Orihuela, 27-junio-1985)
Dialogar con Luis Miguel García Lozano es un aprendizaje continuo de conocimientos, los que ha aprendido en su amplia formación. Primero estudió Derecho en la Universidad de Murcia, además de Ciencias Políticas en la Universidad Miguel Hernández (UMH). Seguidamente se desplazó a Bolonia y Zaragoza para completar sendos doctorados.
Actualmente magistrado, comparte su tiempo como docente, tanto en la Universidad de Granada como en la UNED, vía online. Ha ocupado diversos cargos jurídicos relevantes en Madrid y Alicante, tiene en marcha un tercer doctorado, en la Sorbona de París, y ha escrito varios libros sobre leyes.
Todos estos méritos le permitieron con justicia ser nombrado Caballero de San Antón en nuestra localidad. Ha colaborado asimismo con el Vaticano, circunstancia por la cual conoce de un modo directo al papa Francisco, “una persona afable, pero al que ya se le nota la edad”.
«El problema de Tierra Santa crece cuando los ismos se desarrollan más que a nivel intelectual»
¿Por qué resides actualmente en Granada?
Ejerzo como profesor de Derecho Administrativo en la Universidad de Granada. Además, el 8 septiembre de 2021 -día de la Virgen de la Patrona de Orihuela- tomé posesión como magistrado en la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, con sede en la ciudad nazarí.
¿Has escrito también libros?
Así es, todos de tipo jurídico, muy bien documentados. Los que más interés suscitaron fueron dos, uno centrado en el sistema protector y la administración para la tutela del patrimonio cultural de España. En el otro quise analizar el sistema italiano, tan dispar al español.
Cuentas con numerosos reconocimientos.
Sí, estoy especialmente orgulloso de la medalla de oro del papa León XIII. He colaborado mucho con la Santa Sede y el papa Francisco, que me otorgó el reconocimiento; es muy generoso en ese aspecto.
Fue exactamente un trabajo que hice con el Vaticano y Tierra Santa, Jerusalén, en un momento bastante crítico en la zona, como lleva sucediendo desde hace muchos años, siglos incluso.
«Debemos comprender que el papa, de trato afable, gobierna a más de mil millones de personas»
¿Por qué se da esa problemática?
Fundamentalmente porque es un cruce de caminos, en el que es comprensible -no lógico- que cada uno defienda lo suyo. Y los ismos se empiezan a desarrollar, avanzando mucho más que de un modo intelectual. En ese momento, en 2017, estaba el Islamic State of Iraq and Syria (ISIS) muy fuerte.
¿Cómo es tu trato con el papa?
Puntual. Recientemente estuve con él en Roma y se le nota ya la edad, pues en diciembre cumplirá 88 años. Sigue siendo una persona afable, de trato muy cercano, pero debemos comprender -guste o no- que gobierna a más de mil millones de personas.
Se nota su procedencia iberoamericana: es muy futbolero y le gusta muchísimo la ciencia. De hecho, es ingeniero de formación. Llama la atención que únicamente habla dos idiomas, castellano e italiano.
Para ti, ¿qué significa ser Caballero de San Antón?
Todo un orgullo, por supuesto. Me invitaron a realizar el discurso, todavía no sé muy bien por qué, en nombre del resto de Caballeros, la Dama y la Institución. Obviamente fue igualmente un honor, como expresé en esa intervención.
En la misma indiqué que llevo ya mucho tiempo fuera de Orihuela, aunque regreso cada cierto tiempo, a ver a la familia, y porque es una ciudad que me gusta.
«Me sorprendió ser nombrado Caballero de San Antón, al llevar tanto tiempo fuera de Orihuela»
Desde Granada lo tienes más cerca…
¡Exacto!, aproximadamente dos horas y media. Esto me permite acudir con más frecuencia. Regresando al nombramiento, me sorprendió, como dije, también porque hubo un tiempo que estaba mucho más activo y presente en el municipio, sobre todo en cuestiones culturales.
Cuando Antonio Luis Galiano me llamó y me comentó que la Orden de San Antón había pensado en mí, me llevé una sorpresa; pensaba que no estaba en ese circuito.
¿Qué valor le das?
El nombramiento, obviamente, es importante, porque se trata de una institución que se ha hecho acopio del cariño de la ciudad, que tiene una presencia destacada. En ocasiones pensamos que solo tiene relevancia en un determinado momento, como son las Fiestas de San Antón, pero no.
La actual junta de gobierno -con el anterior maestre- y sobre todo con Antonio Luis, al que le gusta dejar huella, ha conseguido desarrollar una actividad durante todo el año que ha permitido que el nombramiento de Caballeros de San Antón revista de una importancia cada vez mayor. Estoy muy agradecido a la Orden.
¿Cuáles son los proyectos que tienes en marcha?
Siempre tengo varios en mente. Hace poco hemos celebrado tres jornadas y un congreso internacional, por las tardes, con el Colegio de Abogados, el propio Tribunal y la universidad. Asimismo, el Ayuntamiento de Baza me ha pedido si les podemos dejar una parte de la colección que disponemos, al igual que una exposición en Granada.