Entrevista > Encarna Alcaide / Plataforma por el Soterramiento de las Vías (Aldeaquemada, Jaén, 25-marzo-1957)
Los medios de transporte son una vía para acercar personas. Sin embargo Alfafar, Benetússer y Sedaví sufren el efecto contrario por las vías del tren a su paso por estos municipios. Este problema, pese a su reciente impacto mediático, es sufrido por la ciudadanía durante décadas.
La Plataforma por el Soterramiento de las Vías lucha desde hace años para conseguir poner fin a una situación que, tal y como nos cuenta Encarna Alcaide, su miembro más antiguo, pasan los años y sigue sin mejorar.
¿Cuándo comenzó el movimiento civil a denunciar la situación que se sufre por el paso de los trenes en Alfafar, Benetússer y Sedaví?
La primera plataforma fue en 1986 y se llamaba Comisión del Paso a Nivel. Cada vez que ocurría un accidente había una manifestación.
«Pedir Silla-Valencia es decir no al soterramiento»
Hace casi cuarenta años. ¿Qué respuesta recibieron tras aquellos movimientos?
Ya en 1986 nos propusieron un subterráneo, que evidentemente no se aceptó.
¿Por qué se rechazó la propuesta?
Aquello que proponían era un subterráneo muy prolongado, y si hubiera un incendio en una vivienda no sabíamos por dónde podría pasar un camión de bomberos. Los únicos pasos que quedaban era el de Alfafar y otro, entonces, en Sedaví. Se rechazó porque era y es la única vía de ecuación que hay, y por ello no era ni es viable.
Pero eso es lo mismo que propone Adif en estos momentos como alternativa al soterramiento.
Así es, por eso nos quedamos perplejos cuando nos propusieron la misma solución que en 1986.
Antes de entrar en el problema y su posible solución, ¿qué sucedió con aquella plataforma?
Hubo un momento en que nos metieron en un juicio. Sucedió después de la muerte de dos chicos en una moto y decidimos hacer un corte de vías. Al acudir a la delegación de Gobierno no lo autorizaron pero se permitió, nos daban una hora.
Pero hubo un grupo de chicos que pasada esa hora se quedaron más tiempo, y en aquel momento Renfe actuó contra quienes dimos el DNI para solicitar el corte y vinieron a por nosotros, provocando que, ante el miedo, la comisión se disolviera.
«Tenemos 720 denuncias con partes médicos y gente que se está medicando»
Es en 2023, tras la trágica muerte de una joven de 19 años, cuando surge la Plataforma por el Soterramiento de las Vías. ¿Ya existía un movimiento vecinal?
Ya estábamos recogiendo firmas por los ruidos. Hay gente muy enferma, que no descansa, y nos estábamos movilizando por ello. Pero la desgracia de esta chica hace que se reavive todo y se monta la plataforma. Somos otras personas; respecto a la comisión de los años ochenta, la única que sigue soy yo.
Y es cuando Adif ofrece la misma solución que en 1986.
Adif ha jugado sus cartas de decir que hay que hacer el subterráneo, amparándose en que lo primero que hay que hacer es evitar muertes. Pero las muertes no suceden solo en el paso a nivel, el cual está debidamente señalizado.
¿Cree que existe unión entre los tres municipios por el soterramiento?
Todos vamos por lo mismo, algunos más a largo plazo y otros a corto. El PSOE de Eva Sanz pide Silla-Valencia, y eso no se va a hacer nunca, por lo que pedirlo es decir no al soterramiento.
¿Entonces considera la propuesta del tramo Silla-Valencia una excusa para alargarlo y finalmente no hacer esta importante inversión?
Eso es un no: pedir Silla-Valencia es un no al soterramiento, no hay más. Tiene que ser Benetússer-Alfafar-Sedaví, que es donde está el problema y son 1.900 metros.
«El único que nos llama es el gobierno de la Generalitat»
O sea, no se puede decir que exista unanimidad en el apoyo político.
El estudio está hecho y es ejecutable, es cuestión de voluntad política. El señor Mazón la tiene, porque nos reunió en la Generalitat a la Plataforma y a los tres alcaldes. Se ha trasladado el estudio al ministerio y este no ha contestado.
Ante el silencio del gobierno central, ¿quién no apoya esta medida en la Comunitat Valenciana?
Hemos llamado a Diana Morant dos veces, a la Delegada del Gobierno, y estamos esperando a que nos llamen. Quién únicamente lo hace es el gobierno de la Generalitat.
Siendo algo tan necesario, ¿por qué cree que no se ha ejecutado durante tanto tiempo?
Mi percepción es que es una cuestión económica. Óscar Puente decía que “España entera no se va a soterrar” y mi respuesta fue clara: aquí es Alfafar, Sedaví y Benetússer, y eso es un kilómetro y novecientos metros. Su respuesta fue preguntar que cuánto es, y son 130 millones de euros según el estudio que ya tiene el ministerio sobre la mesa.
Después de cuarenta años de lucha, ¿qué sensación tiene en estos momentos?
Si hemos estado cuarenta años, podemos estar cinco años más, pero aquí no se puede vivir así. Tenemos 720 denuncias con partes médicos y gente que se está medicando; hay falta de movilidad para las personas mayores. Y la fórmula que ofrece Adif no nos remedia nada de esto. La única solución es el soterramiento.