Entrevista > Nacho Quintana / Futbolista (Seseña, Toledo, 23-febrero-2001)
Nueva temporada, nuevos objetivos, nuevos fichajes. Uno de los más ilusionantes es el de Nacho Quintana, centrocampista procedente del Lugo, que cuenta ya con la confianza del entrenador, Dani Ponz. “Vine para jugar el mayor número de minutos, los cuarenta y dos partidos si es posible, como avancé en mi presentación”, nos recuerda.
Confiesa que su mayor ídolo y referente, desde pequeño, siempre ha sido Andrés Iniesta, manchego como él, aunque “mi estilo de juego es totalmente diferente, mucho más físico”. Expresa asimismo que disfruta superando líneas defensivas en conducción y llegar al área con opción de remate.
Respecto a los objetivos, coincide con el técnico en que se debe ir partido a partido, con el reto de ganar o, al menos, obtener un buen resultado. “Es mejor tener metas a corto plazo”, sostiene.
¿Cómo se concretó tu fichaje por el CD Eldense?
Después de salir del Sevilla y jugar la pasada campaña en el Lugo, a final de la misma recibí una propuesta del Eldense. Lo hablé con mi familia y tomamos la firme decisión de venirnos, con muchas ganas.
«Mi gran ídolo y referente siempre ha sido Andrés Iniesta, aunque mi estilo de juego es muy diferente»
Eres de Toledo, pero ¿te formaste en el Sevilla?
Futbolísticamente comencé en el Atlético de Madrid, con ocho años, donde permanecí hasta mi última temporada juvenil, marchando entonces al Sevilla. En la capital andaluza seguí formándome, tres años más, antes de pasar por Lugo.
Explícanos cómo es tu estilo de juego.
Soy un jugador físicamente fuerte, capaz de aprovechar los espacios. Ya con el balón, me gusta romper líneas en conducción, llegar al área, rematar. De igual modo, soy muy sacrificado a la hora de defender, por el bien del equipo.
¿Sueles meter goles?
Sí, aunque es un aspecto que pienso que debo mejorar, soy joven. Es cierto que siempre estoy rondando la zona de gol y en todos los equipos en los que he estado he marcado.
«Me gusta romper líneas en conducción, llegar al área y ayudar al equipo en tareas defensivas»
¿Qué quiere de ti el entrenador?
Me pide que ayude al equipo en la zona de finalización, que presione, con trabajo, actitud. Después, con el balón, me exige que sea capaz de recibir entre líneas, que sepa leer los espacios que se generan y llegar al área.
¿Cuáles son las sensaciones que te transmite?
Muy buenas. Llevo muy pocas semanas con él, pero muy bien. De cada entrenador se aprende algo y de Ponz por supuesto que lo estoy haciendo; estoy muy atento a lo que me pide, para llevarlo a cabo en el campo.
Los compañeros y la ciudad, ¿qué tal te han recibido?
Los veteranos y la plantilla en general muy bien. Contento de estar con ellos, aprender lo que pueda; debo ser como una esponja, pues tienen muchos partidos en el fútbol profesional a sus espaldas.
Respecto a la ciudad, llevo poco tiempo, pero se nota que la afición está volcada con un equipo que lo está haciendo realmente bien los últimos años. Hay un muy buen clima, ambiente, como ya se ha apreciado en los primeros encuentros.
«Soy un jugador físicamente fuerte, capaz de aprovechar los espacios»
La afición se desplaza donde sea.
Lo sé, y lo valoramos, porque es un esfuerzo ir con tu propio vehículo a los diferentes estadios de la categoría. Nosotros tratamos de hacer lo mejor por ellos y nos lo vamos a dejar todo en el campo, para que se sientan orgullosos.
¿El objetivo es la permanencia?
Marcarse objetivos a largo plazo nunca es bueno. Es mejor ir partido a partido, metas más cercanas, ganar o intentar sacar un buen resultado el siguiente fin de semana, y así sucesivamente. Es mi primera temporada en esta categoría, pero lo principal es alcanzar lo antes posible los famosos cincuenta puntos que te ‘aseguran’ la permanencia.
¿Notas diferencias respecto a la Primera RFEF?
Por supuesto, las categorías están por algo. En Segunda División hay jugadores de bastante más nivel, aunque con balón hay también muy buenos en Primera RFEF. Estoy intentando adaptarme lo antes posible, paulatinamente.
«Nada más llegar te das cuenta de que el equipo es como una familia y que la afición está volcada»
¿Una de las claves volverá a ser la piña que sois?
Desde el primer día aprecié un ambiente muy familiar. Es determinante la comunión que hay entre afición, equipo y vestuario, clave del éxito de las últimas temporadas. ¡Vamos a intentar que siga así! En casa también debemos hacernos fuertes y después, a domicilio, tratar de sacar buenos resultados.
Si cierras los ojos, ¿tu sueño en el fútbol cuál es?
Llegar a Primera División, a la élite, como sueñan todos los niños que empiezan en este deporte. Espero que algún día se pueda cumplir.
¿Qué otras aficiones tienes?
La música, especialmente Fito & Fitipaldis. Disfruto con todos los deportes, ¡me vi los Juegos Olímpicos al completo!