La Junta General del Consorcio de Aguas de la Marina Baixa ha celebrado esta mañana en Benidorm una sesión extraordinaria y urgente en la que, entre otros asuntos, se ha informado sobre la situación del abastecimiento en la comarca y se ha aprobado el documento estratégico que analiza y determina las soluciones para garantizar el abastecimiento en las poblaciones de la comarca para el decenio 2025-2035. Una sesión en la que también se ha detallado el estado de la tramitación para la futura desalinizadora de la Marina Baixa, que se ubicará en Benidorm.
Así, en las conclusiones del documento estratégico se indica la necesidad de que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) permita incrementar el volumen de almacenamiento de agua en la comarca “mediante la modificación de los embalses actuales, así como la construcción de balsas que permitan almacenar más agua en nuevas ubicaciones”, según ha explicado el alcalde Toni Pérez, presidente del Consorcio. En ese sentido, ha recordado que en el año 2022 se llegaron a perder en el mar hasta 91 hectómetros cúbicos por la falta de esas infraestructuras y que en el año 2000 también se perdieron capacidades de almacenamiento y regulación “debido a la incorporación de resguardos en los embalses de Guadalest y Amadorio”. Los técnicos del Consorcio han incidido en sus informes que con anterioridad a esa fecha ambos pantanos llegaron a estar llenos a un nivel por encima de los niveles máximos actuales, “lo que justifica que se puedan almacenar mayores volúmenes a los actuales”.
Por eso, se considera que actualizar y revisar los resguardos existentes en los dos embalses “sería la alternativa más económica” incorporando además los nuevos sistemas de predicciones meteorológicas actuales, de los que no se disponía en el año 2000. Asimismo, se aboga por llevar a cabo un recrecido de las presas de los embalses de Guadalest y Amadorio para que tengan mayor capacidad, lo que también permitiría revisar los caudales de alivio de estas presas.
El Consorcio de Aguas ha puesto igualmente de manifiesto que la garantía de recursos de abastecimiento y riego también debe basarse en la continuidad de la inversión de renovación de infraestructuras como conducciones y pozos de las tres depuradoras de aguas residuales “para optimizar recursos y generar ahorro”.
El documento estratégico aprobado también analiza la demanda a futuro en la Marina Baixa. De este modo, a corto plazo se ha estimado esa demanda en 6 hectómetros cúbicos (hasta 2030), mientras que a medio plazo (hasta 2035) la necesidad de abastecimiento se calcula en 6,89 hectómetros cúbicos. Serían, por lo tanto, en torno a 12 Hm3 que deberían ser atendidos a través de los 6 Hm3 ya pedidos de la desalinizadora de Mutxamel y otros seis de la futura instalación de Benidorm.
En ese sentido, en la sesión de hoy se ha constatado que el Consorcio y el Ayuntamiento siguen dando pasos adelante de cara a contar con la infraestructura en el año 2028. “Ya existe una hoja de ruta que prevé la firma de un convenio entre el Ayuntamiento y el Consorcio para redactar el proyecto y tenerlo para la próxima primavera” ha precisado el alcalde Toni Pérez, que indicaba que a partir de ese momento “propondremos aportaciones económicas a las administraciones superiores para poder contar con la instalación en el año 2028”.
Por otro lado, la Junta General del Consorcio ha conocido el informe sobre la situación de abastecimiento en el que se señala que las lluvias de septiembre “han sido muy locales y han servido para disminuir la demanda del regadío”. Toni Pérez, ha aclarado, no obstante, que “a pesar de la situación de sequía el abastecimiento del año está garantizado”. Jaime Berenguer, director técnico del Consorcio, ha indicado por su parte que “esperamos un otoño lluvioso y si no es así tendremos que solicitar aportes adicionales”. También ha lamentado que las recientes lluvias no hayan servido para aprovechar las aguas del río Algar “porque han provocado un arrastre de las cenizas del pasado incendio de Tárbena”.
Por último, el Consorcio ha aprobado por unanimidad la adhesión al acuerdo marco de suministro de energía eléctrica de la Central de Contratación de la Diputación, en concreto la Opción 1, suministros con garantía de origen 100% energía renovable y tarifas con precios fijos.