Gemma Juan / Periodista
Gemma Juan (Onda, 18-julio-1971) es la sonrisa de À Punt, visible todas las mañanas en el magazine ‘Bon día CV’, que presenta junto a Ximo Rovira. “Mi filosofía de vida es aplicar, siempre que se puede, el sentido del humor: es una forma valiente de afrontar los momentos más complicados”, confiesa, un aprendizaje que ha ido adquiriendo.
Es una periodista que ha hecho de todo, delante y detrás de las cámaras, “también porque me gusta desarrollar muchas funciones”, admite. Se ha atrevido incluso con dos monólogos en ‘Comediants’, “una experiencia tan difícil como divertida”.
Ahora, en un excelente momento, más maduro, disfruta al máximo de su trabajo “sumamente exigente al tener que estar directo desde las diez de la mañana hasta la una de la tarde”. Se muestra asimismo algo preocupaba ante el modo de informar y consumir, tan dispar a hace unas décadas, pues, advierte, la vida nos la condiciona muchísimo.
¿Cuándo comenzaste en esta singular profesión?
Me estrené en la televisión local de mi pueblo, Onda (Castellón), en los actos principales de Semana Santa. Era muy joven, todavía en el instituto, pero me gustó y encendió en mí la curiosidad de querer estudiar periodismo, carrera que hice en València.
Se creó entonces Ràdio Vila-real y allí hice la beca de verano, cubriendo a los periodistas titulares. Junto Ana Rosa Santfeliu nos inventamos los informativos, que ¡ni siquiera existían! Poco después hubo una baja y me propusieron hacer las tardes, mientras estudiaba en València.
¿Cómo ha cambiado la forma de informar?
Muchísimo, al igual que el modo de consumir y venderse. Hoy en día muchas veces la noticia más rabiosa parte de un hecho anecdótico, desarrollándose después la historia. Además, estamos en un proceso de cambio, condicionados primero por Internet y después por las redes sociales.
Tenemos también el peligro de las ‘fake news’, sin la necesidad de contrastar; y también todo se ha democratizado mucho, algo muy positivo en el sentido que tenemos acceso muy rápido a cualquier información, porque todos tenemos una cámara en el móvil… Hay una inmediatez que antiguamente era más de la radio. Pero preocupa la desinformación.
«Si de algo estoy enamorada es de la radio, pese a que tenga menos repercusión social que la tv»
Guionista, presentadora, locutora, ¿dónde te sientes más a gusto?
Me gusta todo, y me siento cómoda cambiando de registros, delante o detrás de las cámaras, siendo guionista, coordinadora o directora. He hecho auténticos masters de diferentes temáticas.
Pero si de algo estoy enamorada es de la radio -que escucho muchísimo-, pese a que tenga más repercusión social la televisión. Además de en Vila-real, estuve en Ràdio 9 y ahora en À Punt, en esta nueva e ilusionante etapa.
¿Cuándo te incorporas precisamente a À Punt?
Tras el cierre de Canal 9 me trasladé a la televisión de Castellón, donde permanecí el tiempo que no hubo autonómica. Poco después se pusieron en contacto conmigo desde de ‘El Terrat’, que iban a hacer en València ‘Asuntes interns’.
Un sueño era trabajar para esa productora, de tan buena imagen en la profesión. Tomé una excedencia y me incorporé como redactora y guionista al programa, pero uno de los productores ejecutivos, Xavier Casadó, se fijó en cómo contábamos anécdotas Chus Lacort y yo.
¿De ahí surgieron Las Trinis?
Exacto, dos amigas que hacíamos ‘Era valencià i no ho sabies’, una sección loca en la que interpretábamos a dos valencianas que no paraban de cotillear, en clave humorística.
¿Qué es ‘Bon Dia CV’?
Abrir una ventana cada mañana en la que informamos, pero al mismo tiempo entretenemos. Albergamos diferentes contenidos, un magazine al uso, en el que le damos mucha importancia a la salud, mediante consejos del día a día de nutrición o cocina, por ejemplo.
Arrancamos siempre con un apartado muy divertido, el de las noticias más virales, que comentamos en clave cómica. Seguidamente hacemos propuestas de viajes, conexiones en directo, entrevistas, noticias -de la mano de María Domingo-, análisis…
«Trabajar con Ximo es estar tan a gusto: aporta luz, tranquilidad, serenidad y no paras de aprender»
Tres horas de directo son muchas…
Implica mucho trabajo, que por otro lado no me da miedo. Es apasionante y muy exigente, porque no son únicamente esas tres horas, sino que debemos estar todo el día conectados. ¡El equipo de redacción es fantástico!, y contar con Ximo Rovira, bellísima persona, es determinante, porque estás a gusto, te da tranquilidad, aporta luz y te permite brillar.
Nunca habíamos trabajado juntos en un programa, pero sí en retransmisiones y, aparte de enorme profesional -con el que no paras de aprender-, es un gran amigo. Nos ha hecho mucha ilusión coincidir.
¿Cómo es comunicar en valenciano?
Un privilegio, pero también una gran responsabilidad porque tenemos muchas menos opciones.