La Generalitat, la Región de Murcia y la Junta de Andalucía han unido fuerzas para reclamar al Gobierno central y la Unión Europa más fondos y recursos para controlar los daños medioambientales generados por la sequía en la masa forestal de sus montes, amenazados por las plagas.
Así lo han trasladado el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus; la consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García y el consejero de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor del Gobierno de la Región de Murcia, Juan María Vázquez.
El conseller ha explicado que su departamento “está invirtiendo este año más de 745.000 euros para el control de los daños generados por la sequía” en la masa forestal de la Comunitat Valenciana. De la misma forma, ha explicado que la magnitud del problema “requiere de una mayor inversión y un respaldo real del Ministerio y, por ello, exigimos al Gobierno y a la Unión Europea que reconozca la situación de emergencia climática y convoque la mesa de la sequía”.
Martínez Mus ha incidido en que “estamos sufriendo una de las peores sequías de la historia” y que “es el periodo más seco y cálido desde que existen registros meteorológicos”. “Por ello, la Generalitat, pese a la infrafinanciación patente, está realizando un esfuerzo un importante para paliar los daños ocasionados por esta situación excepcional para evitar la extensión de plagas causadas por la sequía”, ha incidido Mus.
En esta línea, el conseller considera que el Gobierno central “ha perdido una gran oportunidad para reivindicar a Europa financiación para luchar contra la sequía y para cuestiones como los proyectos de modernización de regadíos que siguen parados”. “En esta coyuntura, las plagas de insectos están agravando la situación, ya que atacan a los pinos que se debilitan por la sequía y ponen en riesgo la salud de los bosques”, ha remarcado el titular de Medio Ambiente.
Martínez Mus ha concretado que el plan que está poniendo en marcha la Generalitat comprende “la monitorización del impacto de la sequía en pinares, la eliminación de árboles muertos y con riesgo de caída, así como diferentes trabajos de sanidad forestal”. “El trabajo individual es importante, pero lo es más la unidad tanto para el intercambio de información y técnicas y, por ello, vamos a constituir también un grupo técnico conjunto”, ha sentenciado el conseller.
Se estima que en la Comunitat Valenciana la sequía ha provocado la muerte de casi 370.000 árboles en el último año y las hectáreas con una afección muy alta son 17.340,44 el 3,5% de la superficie arbolada de la autonomía. En Andalucía, la superficie afectada se estima entre 15.000 y 25.000 hectáreas, mientras que en Murcia la afección es de unas 20.000.