Entrevista > Sandra Gómez / Concejala de Fiestas de l’Alfàs del Pi (L’Alfàs del Pi, 9-julio-1995)
L’Alfàs del Pi volverá a parar su rutina diaria del 6 al 10 de noviembre para celebrar sus Fiestas del Jubileo y el Santísimo Cristo del Buen Acierto, que, como explica la concejala del área, Sandra Gómez, contarán con una cifra récord de peñas.
Ese aumento de agrupaciones festeras, que rozará el medio centenar, se ha venido produciendo de forma constante desde el final de la pandemia, y eso hace que la de 2024 prometa ser una de las ediciones más multitudinarias de unas fiestas que, entre otras sorpresas, recuperan un acto como las carreras de los autos locos.
«Este año el pregonero es una persona conocida a nivel nacional y de la ‘terreta’»
Llegan los días más especiales de todo el año para l’Alfàs del Pi con sus fiestas y, una vez más, nos preparamos para esas citas tan tradicionales.
Así es. Empezaremos el día 6 con el pregón, que una de las tradiciones que tenemos aquí es mantener el secreto de su protagonista hasta el mismo momento de su intervención. Siempre es una persona conocida públicamente y así será este año también. Luego tendremos una actuación a cargo del pregonero. A partir de ese momento, empezamos con todos esos actos, como el desfile del humor, la ofrenda, la Procesión del Santísimo o la Procesión del Cristo, entre otros muchos.
Ya sé que no me vas a decir el nombre del pregonero… pero acabas de decir que va a actuar, así que doy por hecho que es un artista. ¿Alguna pista más para que los alfasinos puedan hacer sus predicciones?
(Ríe) No, no te voy a contar nada más. Bueno… te diré que es conocido a nivel nacional y que es de la ‘terreta’.
Como es lógico, los festeros más jóvenes están más por la agenda lúdica que por los actos más tradicionales y los religiosos. ¿Crees que eso hace que la parte más tradicional de estos días corra peligro?
Como bien has dicho, la esencia de las fiestas es la parte religiosa. Aunque la gente no sea católica, incluso aunque sea atea o tenga otras creencias, pienso que ese sentimiento de ser alfasino, sigue siendo la esencia de lo que es el Cristo. Por mucho que tú seas o no seas creyente, el Cristo es un símbolo de identificación del pueblo.
«Hoy en día contamos con un total de 44 peñas; para ser un municipio de unos 20.000 habitantes, está bastante bien»
Hasta la llegada de la pandemia era muy habitual que muchísima gente aprovechase los días de las fiestas locales para hacer una escapada fuera, pero tras ese parón vital tengo la sensación de que el colectivo festero ha crecido mucho.
Es verdad que desde la pandemia hasta ahora ha habido un aumento de solicitudes de peñas en la asociación. A día de hoy contamos con un total de 44. Para ser un municipio de unos 20.000 habitantes, 44 peñas está bastante bien.
Además, ese número ha ido aumentando desde la pandemia. Creo que aquel parón, como lo has definido, sirvió para tener más ganas.
En otros municipios de la zona que han experimentado una evolución similar, me han dicho que ese aumento ha venido de la mano de los más jóvenes. ¿Sucede lo mismo en l’Alfàs del Pi?
Es cierto que las peñas más recientes que tenemos son de miembros jóvenes, de entre veinte y treinta años. Pero también lo es que otras de nueva creación son de personas que pasan de los cuarenta años, así que tenemos un poco de todo.
Ese crecimiento de las peñas, ¿genera algún tipo de problema a la hora de conciliar las ganas de fiesta de los festeros y el derecho al descanso del resto de vecinos?
Para eso está el bando de fiestas, en el que se establece el horario y los límites. Con él tratamos de contentar al colectivo festero y también a la gente que no participa en las fiestas, porque tiene que trabajar o por cualquier motivo.
«Creo que aquel parón que supuso la pandemia sirvió para tener más ganas de fiestas»
Como cada año, supongo que la mayoralía, sobre todo en la parte más lúdica del programa, habrá querido poner su sello personal. ¿Qué fiestas tenemos que esperar en 2024?
Desde hace unos años, la Asociación de Peñas planteó la idea de ‘les festes al carrer’. Así, cada peña, a lo largo del año, va recolectando puntos por participar en distintos actos. Con ello, en estos días de noviembre, las ocho primeras peñas que estén en el ranking pueden elegir qué tarde o mañana hacer algo.
Por ejemplo, mi peña traerá una charanga y la va a pagar la asociación. Otra peña traerá un grupito de rock y también estará sufragado por la misma. Eso hace que nos unamos todos.
Este año la mayoralía no la tiene una peña, sino un grupo de catorce personas que se han unido para llevar las fiestas a término. En otras palabras, cuesta mucho que los propios festeros se involucren en sus actos.
Desde aquí aprovecho para hacer ese llamamiento a peñas o a personas sin peña, a gente del pueblo que quiera organizar las fiestas del año que viene.
Vuelvo al programa de actos. Los religiosos y tradicionales ya los conocemos, pero ¿cuáles van a ser los principales en el ámbito lúdico?
El desfile del humor, por supuesto. Creo que las peñas lo cogen con muchísimas ganas. De hecho, la mayoría de ellas llevan desde verano trabajando en el disfraz. Este año, además, como novedad vuelven los autos locos. Será el sábado 9, por la noche, en la calle Ferreria.
