Entrevista > Paula Arcos / Jugadora profesional de balonmano (Petrer, 21-diciembre-2001)
Paula Arcos prosigue una temporada más su aventura noruega, la segunda en las filas del Vipers Kristiansand -vigente campeón-, y además de cómo ha sido su aclimatación, nos desvelará sus aspiraciones deportivas, centradas la mayoría en la Champions League, “en jugar contra las mejores”.
En verano participó en sus segundos Juegos Olímpicos (JJOO), con sensaciones agridulces. Por un lado, el nivel competitivo de las Guerreras fue decepcionante, sucumbiendo en los cinco partidos, aunque siempre es precioso poder compartir con miles de atletas una competición única.
Confiesa que echa enormemente de menos Petrer, la familia, nuestras fiestas y el modo de ser de los españoles, por ejemplo, tomarse algo en una terraza. Además, “en Noruega todo es carísimo y el idioma es complicadísimo: me debo comunicar en inglés”, dice sonriente.
Tu segunda temporada en Noruega, ¿cómo ha comenzado?
Con muchas ganas; somos un equipo que compite por lo máximo, especialmente la Champions, el principal motivo por el que fiché por el Kristiansand. Nuestro grupo en Europa es sumamente exigente, y cada partido está siendo un suplicio para conseguir los dos puntos.
Por otro lado, estamos disfrutando muchísimo esos encuentros, de máxima igualdad. ¡Me encanta disputarlos! En la liga noruega perdimos el primer partido frente al Storhamar, otro conjunto que disputa la Champions y con jugadoras top.
«El grupo que nos ha tocado en la Champions es muy complicado, pero ¡disfrutamos esos partidos!»
Esa fue la razón de tu fichaje.
Exacto. Insisto, vine a Noruega porque era un reto para mí enfrentarme a las mejores, ponerme enfrente de esas ‘pedazo’ de jugadoras. ¡Es superemocionante!
Viajemos al verano, ¿los JJOO fueron un fracaso?
Fue un torneo muy duro, deportiva y psicológicamente, en el que nos enfrentamos a situaciones muy complicadas. En el aspecto positivo, es de las competiciones más bonitas que he vivido, es todo un orgullo llegar ahí.
Por supuesto que queríamos competir y los resultados no fueron los esperados. Nuestros dos primeros partidos (Brasil y Angola) fueron contra rivales bastante directos y perdimos, antes de enfrentarnos a selecciones con mucho más nombre, como Países Bajos o Francia.
¿Hubo muchos lloros y decepción?
Sin duda. En todas nosotras hubo también mucha impotencia. Las chicas no estábamos jugando felices, pese a que sabíamos que estábamos en unos Juegos, que iba a ser difícil.
No obstante, soy de las deportistas que no piensan que únicamente vale con llegar, sino que hay que dar la cara. En ciertos momentos la dimos, pero no vi a mi equipo reflejado en la cancha.
«Las pasadas Olimpiadas fueron un torneo muy duro, tanto en lo deportivo como en lo psicológico»
¿Cómo fue la espectacular ceremonia?
Una pasada, pero ensombrecida ligeramente por la lluvia, debido a que no pudo lucir todo el trabajo que había detrás. Todas las delegaciones navegamos por el Sena, ¡con actuaciones por todo el trayecto!
¿Qué sensaciones tenías en la villa olímpica?
Es el lugar donde todos los deportistas vivimos un sueño. Te ves en un lugar rodeada de deportistas top, muchos de ellos referentes y con los que piensas que jamás vas a poder coincidir, básicamente porque estamos concentrados durante el año en nuestra competición.
¡Estaba alucinando todo el rato! Pese a que luego te das cuenta de que tú también has trabajado duro cuatro años para estar ahí. Tuve la suerte de dialogar con Rafa Nadal y me hizo mucha ilusión que alguien tan lejano pudiera tener una conversación tan cercana, de deportista a deportista. Otros fueron Simone Biles, Serena Williams…
Volvamos al Vipers Kristiansand. ¿Te sientes importante en el equipo?
Sí, a diferencia del año pasado, que llegué con un poco de miedo, al ser mi primer año fuera de España. Me hice mi hueco, ganándome más minutos de los que esperaba, y esta temporada quiero ser más determinante, pues nos conocemos mucho más y no somos una plantilla muy amplia, lo que permite que todas podamos demostrar.
«La gente en Kristiansand es muy maja, me ha acogido muy bien, pero los inviernos son tan fríos…»
¿Cuáles son los objetivos, personales y del conjunto?
Deseo mejorar cada día. Todavía soy joven y tengo a compañeras con muchísima experiencia y nombre. El reto es absorber como una esponja todo lo que pueda de ellas, que seguro me vendrá bien para el futuro. En cuanto al equipo, un sueño sería jugar la Final Four.
¿En qué idioma te comunicas?
En inglés, porque el equipo se compone de diez-doce nacionalidades distintas y es el idioma base para entendernos entre todas. El año pasado vine sin saber apenas y he tenido que aprender; la fuerza ahorca.
¿Noruega te gusta?
La gente me ha acogido muy bien, siempre están dispuestos a ayudar. Noruega es precioso, lleno de naturaleza, pero los inviernos son muy fríos y anochece muy pronto, a las dos de la tarde. De todo se aprende y te ayuda a madurar.