Entrevista > Rafa Alemany / Escritor (Alfafar, 29-abril-1981)
Rafa Alemany mostró desde bien joven ser una persona con numerosas inquietudes, especialmente en el campo de la historia o la arqueología. Ese deseo de conocer, de aprender, lo sigue conservando, o incluso ha incrementado. “Me encanta que me cuenten todo, con hambre voraz por saber aspectos nuevos”, confiesa.
Una de sus mayores aficiones, de hecho, es que ancianos le expliquen anécdotas pasadas, “las que únicamente dominan ellos”. Fruto de todo ello han sido sus dos primeras novelas: ‘El tesoro de los jesuitas’ y ‘La reliquia dormida’, ambas con excelente acogida de público y crítica.
Reconoce, además, que el momento de documentarse es posiblemente en el que más disfruta, como demuestra en su programa de radio, ‘El laberinto del Minotauro’, centrado en divulgación cultural: personajes influyentes, astronomía, crímenes sin resolver o naturaleza.
«Si visito un monumento después me gusta informarme sobre él, documentarme al máximo»
¿Cuándo arrancó tu relación con la literatura?
Ya de pequeño tenía un enorme interés por la historia, me apasionaba. Recuerdo un libro sobre el antiguo Egipto, lleno de ilustraciones, al que miraba horas y horas. En cambio, a otros de diferentes temáticas apenas les podía prestar atención.
Ese gusto por lo histórico conjugaba con mi gran imaginación, y fui creando relatos. Siempre decía que ‘vivía en la luna’: si visito un monumento después me gusta informarme sobre él, documentarme al máximo…
¿Quiénes son tus autores de referencia?
Una de las que más me agrada es Matilde Asensi, de quien me he leído todo (‘Iacobus’, ‘El origen perdido’, ‘El último catón’…). Igualmente Dan Brown, que se hizo célebre por ‘El código Da Vinci’ pero tiene mejores; Javier Sierra o Juan Eslava Galán.
¿Qué es ‘La reliquia dormida’?
Mi segundo trabajo, publicado en 2021. Alberga un poco de todo, mezcla novela histórica con policiaca, además de mucha acción y aventuras. Busco que el lector esté constantemente en la intriga: es muy adictiva, sin pausas ni divagaciones desde que comienza hasta que concluye.
«Estoy orgulloso porque personas no lectoras se engancharon a ‘La reliquia dormida’ y después a novelas de este tipo»
¿Cuál es la trama?
Se inicia con el asesinato de una persona mayor, que aparentemente llevaba una vida normal, tranquila, pero siempre hay una parte misteriosa. Su nieta regresa al pueblo, a Alfafar, para el entierro y empieza a notar cosas: la siguen, miradas extrañas…
Decide entonces investigar la muerte de su abuelo y por qué le está pasando esto a ella. Con cada pista que averigua descubre algo muy curioso: un pasado suyo que va unido a una leyenda -real- de la localidad. A partir de ahí el relato es trepidante.
Además de adictivo, ¿es fácil de leer?
Mucho. Varios lectores después me han escrito por las redes y me han dicho: “guau, me acosté a las cinco de la mañana, pero deseaba acabarlo”. Como anécdota, el libro está como lectura en tercero de la ESO de algunos centros; antes del verano estuve en Castellón y un chico con déficit de atención se lo leyó, encantándole.
El chico me hizo una especie de reseña, anotando lo que le había parecido. Insisto, es muy fácil de leer. Estoy orgulloso porque incluso los no lectores se han enganchado al libro y después a novelas de este tipo.
¿De qué forma te documentaste?
Disfruté enormemente el periodo de documentación, porque lo enfoqué de diferentes maneras: primero consulté con el cronista local, Pepe Catalá, a quien siempre estaré muy agradecido porque me ayudó de una manera desinteresada.
Me dijeron por dónde se movía, un club social, y acudí, casi a salto de mata. Le expuse directamente lo que necesitaba y se mostró dispuesto desde el primer momento. ¡Fue algo excepcional! Leí también varios libros -uno de ellos del propio Catalá, ‘La historia breve de Alfafar’-, consulté diversas bibliotecas y dialogué con funcionarios de patrimonio, que me facilitaron planos de edificios antiguos, por ejemplo. Me ayudaron muchísimo, incluso cambiando su rutina laboral.
«El 9 d’Octubre se reconoció mi labor, más allá de escribir: hago obras de teatro, relatos cortos…»
Háblanos de tu otra obra, ‘El tesoro de los jesuitas’.
Publicada en 2015, es una novela algo más corta, pero igualmente apasionante. Cuento la historia de unos jóvenes universitarios, que ayudando en la limpieza de una iglesia topan con una falsa pared, que derriban.
Dentro encuentran un diario, el de unos jesuitas que en el siglo XVII habían viajado al Nuevo Mundo y, en su regreso, se trajeron algo que les interesa a muchos.
¿Cómo viviste los premios del 9 d’Octubre?
Principalmente con mucho orgullo. Se reconoció toda mi labor, que va más allá de escribir novelas: realizo obras de teatro, relatos cortos e intento divulgar la cultura a través de la radio.
¿Tienes ya en mente tu próximo libro?
Sí, versará sobre una leyenda medieval española, con dos historias paralelas, unidas por una circunstancia en concreto. Se lanzará el próximo año.