Un total de 40 personas participaron ayer domingo en la ruta ‘Los caminos del agua’, organizada por la concejalía de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi, cubriéndose el total de plazas ofertadas.
De dificultad baja, esta ruta, de 5 kilómetros de recorrido, se inició con la visita del algarrobo de Foia Brell. Este árbol monumental es, con 800 años de antigüedad, el ejemplar más grande y longevo de la Comunitat Valenciana.
Con 8 metros de altura y 12 metros de copa, destaca precisamente por su gran volumen y su longevidad. Un árbol que tiene mucho significado para el municipio de l’Alfàs del Pi por el papel fundamental que jugó en la posguerra como fuente de alimento para la población y para los animales del campo, según relataron la arqueóloga municipal y técnica de Patrimonio, Carolina Frías, y el divulgador medioambiental, Richard Barreno.
La ruta continuó con la visita a la ermita del Captivador, donde se celebran las fiestas en honor a Sant Vicent. Las personas asistentes pudieron aprender cómo se vivía antiguamente en esta zona.