La ciudad de Alicante y su entorno avanzan paso a paso en su objetivo de mejorar en eficiencia, sostenibilidad y transparencia del servicio de agua, gracias a tecnologías innovadoras y a soluciones sostenibles que afronten los retos del cambio climático. En el marco del proyecto de digitalización integral del ciclo del agua, financiado por la Unión Europea a través del PERTE de Digitalización del Agua, Aguas de Alicante experimenta un salto cualitativo en su gestión, desde su planificación y gobernanza, hasta la operación y el control de todas las fases del ciclo hídrico. Dentro de este recorrido emprendido por la compañía gestora, destaca hoy la actuación vinculada a la “Monitorización de las aguas subterráneas”.
A pesar de que han demostrado ser elementos resilientes al cambio climático, también la disponibilidad de aguas procedentes del subsuelo corre riesgos, entre otros, por el aumento de la temperatura global o la extracción insostenible. Con independencia de sus diversas procedencias, el cuidado del recurso hídrico es para Aguas de Alicante el eje de su gestión diaria en su ámbito de actuación, caracterizado por la falta de recursos hídricos naturales para atender con la debida calidad las necesidades de agua potable de la población abastecida. Por esto, desde tiempos remotos todos esos recursos tienen un origen externo y conseguirlos es fruto de un arduo trabajo por parte de la empresa; gracias a su apuesta por la innovación y la tecnología, la empresa trabaja hoy, entre otras procedencias, con agua subterránea extraída bajo unos parámetros de calidad y cantidad que la hacen sostenible y compatible con el cuidado y preservación del medioambiente.
Monitorización de captaciones de agua subterránea
En el marco del PERTE de Digitalización del Agua, Aguas de Alicante se desempeña ahora en esta actuación que tiene como objetivo principal asegurar la continuidad en el suministro de agua potable en alta a la población abastecida, mediante la actualización tecnológica de 5 estaciones remotas de supervisión y control de las captaciones subterráneas que gestiona. Esta modernización de los sistemas de captación de agua mediante la implementación de mejoras en telecontrol y comunicaciones representa un avance significativo en la gestión de recursos hídricos.
Gracias a la actualización tecnológica, el resultado será una operación más robusta y eficiente de las instalaciones de captación, permitiendo: la unificación de estaciones remotas de Aguas de Alicante bajo una misma aplicación SCADA del Centro de Control; la recuperación de datos (señales) tras pérdida de comunicaciones, lo que garantiza la continuidad operativa y mantiene la integridad de la información para la toma de decisiones; la implementación de sistemas redundantes en las comunicaciones (radio digital y 5G) en las instalaciones críticas, minimizando significativamente la pérdida de datos críticos y reduciendo la necesidad de desplazamientos para verificaciones in situ, lo que se traduce en una optimización de recursos; y una mejor operación/supervisión de la instalación en local, al renovar las pantallas instaladas en los cuadros de telecontrol (en color, mayor tamaño, táctiles etc.).
Agua subterránea y digitalización
El agua procedente del subsuelo representa hoy el 20% de los recursos hídricos totales con los que trabaja Aguas de Alicante, cifra que a lo largo del año 2024 supuso la gestión de un volumen de 8,17 millones de metros cúbicos. Junto a estos recursos de procedencia invisible, la empresa gestiona otros de origen superficial, disponiendo así de un abastecimiento de tipo mixto que confiere garantías excepcionales e imprescindibles al suministro de agua en unas poblaciones localizadas en una de las zonas más áridas del país.
En sus 127 años de historia, Aguas de Alicante ha ido atesorando un amplio conocimiento de las formaciones geológicas de la provincia, diversificando e incrementando las extracciones de recursos subterráneos en torno a cinco masas de agua situadas en las comarcas del Alto y Medio Vinalopó. En la actualidad, se explotan un total de 14 sondeos con profundidades comprendidas entre 100 y 450 m., que producen agua para el abastecimiento a las localidades gestionadas por Aguas de Alicante. Algunas de estas localidades dependen enteramente de las aguas subterráneas para su abastecimiento, mientras que en las situadas en la franja costera, se suman a éstas los recursos procedentes de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla y de AQUAMED.
Como consecuencia de las mejoras tecnológicas derivadas de los proyectos del PERTE, no sólo sólo será posible optimizar aún más la gestión diaria de estas aguas subterráneas y reducir los costes operativos a largo plazo, sino también aumentar la vida útil de las instalaciones y contribuir a una gestión más sostenible de los recursos hídricos. La centralización del control mediante SCADA permitirá una respuesta más ágil ante incidencias, facilitará la gestión del mantenimiento preventivo y predictivo y, en definitiva, posibilitará un análisis más profundo de los datos operativos para la mejora continua del servicio prestado por la compañía.
