Antaño, el asunto de las Fogueres de Sant Joan se resolvía solo el 22, 23 y 24 de junio, pero hogaño, ahora, trae cola. Dejando aparte las actividades desarrolladas en el mismo mes antes del meollo de la fiesta en sí, el 17 ya tenemos un primer momento para estar juntos: la llegada o ‘Arribada del Foc’, del fuego.
Y el 18 por la noche, montan las especiales adultas, y el 19 las infantiles y los ‘ninots al carrer’ (en la calle), y hasta comienzan a darse cenas en los ‘racós’ (alicantinización de ‘racons’, rincones). Luego, la ‘plantà’ (plantada) oficial hogueras y barracas, ya el 20. Y las ‘mascletás’ (por ‘mascletades’; viene de ‘mascle’, macho), orquestas callejeras, música nocturna.
Bebiendo hogueras
O sea, que se trata de disfrutar las Fogueres o bebérselas, y esta opción tiene coste físico, y hasta del otro. La Festa, la fiesta, la grande en la ciudad, se basa en la construcción, año tras año, de unos monumentos, las hogueras (llamémoslas así, en minúscula, para diferenciarlas del nombre de las celebraciones), adultas e infantiles, que arderán la noche del 24, en la ‘cremà’ (quemada).
Bueno, pues veamos estas figuras de arte efímero, así como las artísticas portadas de las barracas, que arderán también con el monumento titular al que pertenecen. Cada hoguera (la palabra da aquí para muchos significados), cada comisión, dispone de un ‘racó’, con portada artística, más un máximo de dos barracas (como un ‘racó’, con su propia comisión). En total hay, este año, 91 fogueres y 50 barracas o ‘barraques’.
Fiesta grande, se basa en monumentos que arderán la noche del 24 de junio
Truenos de pólvora
Para estas cosas, hay quien usa los mapas publicados en los medios de comunicación, o se confecciona uno propio. Bueno, en este qué hacer, dónde ir, recomendamos no coger el automóvil salvo en trayectos largos. Alicante entera se convierte en un caos con olor a fritanga y gambas a la plancha. Con paciencia, transporte colectivo. Que a veces va lleno.
Como, cuando, desde el 18 al 24, se proceda con el concurso de ‘mascletás’ en la plaza de los Luceros (desde 1988, aunque entonces en la Rambla). Los balcones circundantes y otros espacios constituyen unos menos estresantes miradores. Pero la gente se apelotona en las calles que confluyen en el histórico lugar. Bien, cuidado con los carteristas, que vuelan como los mosquitos, y después, con los flancos guardados, a disfrutar si se ama la pólvora festera.
Recomendamos no coger el automóvil salvo en trayectos largos
Los cuatro desfiles
Eso por las mañanas, animadas en ‘racós’ y ‘barraques’. Puesto que precisan de cuota, son espacios privados para comisionados e invitados. No obstante, sobre todo en cuanto a los primeros recintos, estos has de tener barra al público, con lo que lo de pasearse los monumentos tiene premio. Hasta se puede comer en algunos y reponer fuerzas para la tarde. Hay desfiles.
Tenemos una ofrenda de flores en dos tandas para abarcar a todas las comisiones, los días 21 y 22, en ambos casos a partir de las seis y media de la tarde. Y el 23, desde las ocho, el desfile folklórico. Que antes ya habíamos tenido, pero estos son los de los días ‘oficiales’. Añadamos el diurno del domingo 22 a las once, la entrega de premios. Las comisiones hacen ‘pasillo’ a la ganadora.
Quien no esté en una comisión, tranquilo, la ciudad destila oportunidades
Con feliz nocturnidad
Llega la noche. Las Fogueres son sobre todo nocturnas: ‘racós’ y barracas despachan sones musicales, en vivo o enlatados, hasta las cuatro y media de la madrugada (aunque en algún medio se ha deslizado las seis: ojito, que hay multa). Para quien no esté en una comisión, tranquilo, la ciudad entera destila oportunidades. Y sobre todo para la juventud, hay oferta.
La antigua barraca popular, hija también de 1988, bifurcada después en las montadas por radiofórmulas, se han diluido. Aunque hay zonas que, con cierta itinerancia, acaban tomadas por la juventud, existen iniciativas como la de I No Volìem, barraca dependiente (y entrelazada) del distrito Sèneca Autobusos, que desde el año 2000 creó un espacio joven, sin alcohol, con mesas pagadas por los usuarios.
Quemando junio
Lógicamente, hasta los 17 años abundan por aquí; luego, subiendo edades, tocaría Passeig de Gómiz, Paseíto Ramiro. Diputación, Plaza Galicia, Óscar Esplá o Hernán Cortés. Bueno, en muchos casos espacios que deben desaparecer el día de la ‘cremà’, tras actos mil (incluso una prestigiosa feria taurina, para ver parar, templar y mandar, y el 23 una primera noche de hogueras, ahora playeras).
No obstante, las Fogueres, eso sí, todavía no terminan: el concurso de Fuegos desde la pasarela personal del Puerto atronará colores desde el 25 hasta el 29 (cuando desde las siete de la tarde desfila el veterano Coso Multicolor), a partir de las doce de la noche, después de los preceptivos tres avisos. Medio Alicante, y su costa, permite atisbar todo o parte de ello. De nuevo, cuidado con los carteristas. Y los mosquitos.