El Ayuntamiento de Crevillent, en manos de la alcaldesa de la localidad, Lourdes Aznar Miralles, la concejal de Cultura, Mónica San Emeterio y la presidenta del Consejo Etnográfico, Ana Satorre, han recibido una generosa donación de manos de José Belmonte Belmonte en nombre de él y de su hermano Juan Antonio Belmonte, quienes han estado custodiando este material hasta el día de hoy.
Se trata de un conjunto de 16 volúmenes fechados entre 1879 y 1914, entre los que se encuentran 9 libros de cuentas y 7 libros “copiadores de cartas”, estos últimos son las cartas que emitían las empresas y que se calcaban para tener copias de las mismas. Todos pertenecen a la empresa crevillentina de Salvador Espinosa Mas, donde se pueden leer misivas escritas por el gerente dirigidas a los distintos empresarios con los que tenía relación y permite rastrear no solo el material que trabajaban y su fabricación, también permite conocer la dispersión de la producción de la empresa.
Destaca un conjunto relevante de cartas dirigidas a familiares que emigraron a diversas ciudades de España (Cayetano Mas de Barcelona, su cuñado); José Mas de Valladolid; Francisco Mas de Zaragoza; Antonio Mas de Córdoba. Estas cartas no solo brindan un vistazo a la vida de aquellos que dejaron su hogar en busca de nuevas oportunidades, sino que también reflejan las conexiones familiares y cómo se extendía la industria crevillentina por los distintos lugares de España. En ellas, se mencionan pedidos de materiales como pleita, piezas de filete, tela doble y materiales como el junco. Estos documentos pueden permitir y hacer visible la evolución de la industria crevillentina.
La Ley del Patrimonio Cultural Valenciano reconoce la importancia de los archivos en los museos como parte del patrimonio cultural del mismo y considera que deben ser centros de investigación que permitan recomponer el pasado. La investigación es una de las tareas básicas de los Museo, pues no se puede proteger, conservar ni difundir de manera adecuada el patrimonio sin conocerlo.
La alcaldesa de Crevillent, Lourdes Aznar Miralles destaca que “este conjunto es excepcional porque permite a futuros investigadores rastrear los materiales, los productos, la comercialización y datos económicos del origen de la industria alfombrera de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Y todo este conjunto va a formar parte del Museo de la Alfombra que se convertirá en un centro de referencia de investigación de este producto identitario de Crevillent”.
La primera edil, Lourdes Aznar, la regidora de Cultura, Mónica San Emeterio y la presidenta del Consejo Etnográfico, Ana Satorre, han agradecido profundamente a José y Juan Antonio Belmonte Belmonte esta donación y destacan su generosidad por contribuir a la preservación de nuestra herencia cultural, dado que materiales como este son de gran relevancia para comprender nuestra identidad y nuestra evolución industrial y porque nos permite ampliar y enriquecer los fondos municipales del Museo de la Alfombra.