Entrevista > Aitor Juan / Director teatral (Petrer, 27-mayo-2002)
Las vivencias de Aitor Juan en el teatro arrancaron realmente pronto, con seis o siete años, en una extraescolar de su colegio, el Reina Sofía. “Siempre estábamos haciendo cosas, ya sea para Carasses o Halloween, hasta que se produjeron los recortes en educación”, lamenta.
Pero el gusanillo de la actuación -y después de la dirección- ya le había picado y a los dieciocho recién cumplidos dirigía la Agrupación Teatral ‘Teatrando’, paso previo al actual ‘Dafó Theatrum’.
Entre sus obras más relevantes, las comedias ‘Escenas de matrimonio’, ‘Confesiones’ y ‘La Llamada’, reestrenada en diciembre de 2024. Asimismo, pronto comenzarán los ensayos de su primera propuesta dramática, ‘Celler Román’, cuyo estreno está previsto para final de año.
¿Deseabas ser actor al principio?
Tenía muchas inquietudes, sobre todo musicales, por herencia de mi padre, que hizo incluso la mili en la banda de música. Me inicié como percusionista, en la Unión Musical de Petrer, aunque ahora esa faceta -pese a pertenecer actualmente a los Sones de Sax- la tengo algo apartada por mi trabajo profesional como auxiliar de vuelo.
¿Cómo fue tu evolución hacia la dirección?
Muy rápida, desde la creación de ‘Teatrando’ en plena pandemia. De hecho, fueron esos meses los que nos animaron a fundar nuestra propia compañía.
¿No eras demasiado joven?
Puede ser, pero debo decir a mi favor que nunca ha sido un problema mi edad respecto a la dirección de actores. Siempre me han respetado y valorado mi criterio.
¿’Teatrando’ se convirtió en ‘Dafó Theatrum’?
Fundamos la primera después de salir del taller que moderaba Begoña Tenés, llevando a cabo diversas funciones, como ‘La Llamada’ o ‘Escenas de matrimonio’. Pero pasaron los años, cambiaron la mayoría de las componentes y decidimos rebautizarnos, ahora como ‘Dafó Theatum’.
«Al principio no sabíamos cómo iba a salir ‘Escenas de matrimonio’ pero funcionó bien, ¡de qué manera!»
Dinos, precisamente, vuestras obras más relevantes.
Después de ‘La Llamada’, interpretada con éxito en solo tres funciones, estrenamos ‘Confesiones’, la primera escrita por mí. Se produjo a continuación un punto de inflexión, al intentar profesionalizarnos un poco más.
Llegó entonces la mencionada ‘Escenas de matrimonio’, que no sabíamos cómo iba a salir, pero funcionó, ¡de qué manera! Una de las claves fue recoger los textos de cuando se hacía en plató, no los posteriores de Telecinco.
¿Alguna más?
Escrita por Joana Martínez estrenamos ‘Unas fiestas de traca’, que igualmente tuvo gira, recogiendo el rebufo de ‘Escenas’. Hace pocos meses presentamos su segunda obra, ‘Un verso viral’, con la idea de llevarla a certámenes de más prestigio.
¿Eres un director que se deja aconsejar por los actores?
Ellos ya saben cómo trabajo: me gusta la exigencia y que propongan cosas. Cuando un actor te sugiere algo es que está interesado en el proyecto, en su personaje: les permitimos que lo hagan más suyo, sin salirse de unas líneas bien marcadas. Otros, en cambio, no comentan nada, porque piensan que has clavado su papel.
También es verdad que depende el tipo de obra puedes ‘jugar’ más, como nos sucedió con ‘Escenas’, con la que llegamos a hacer veintidós funciones.
«La parte más compleja de dirigir son los actores, pues hay que tener mucha empatía, saber a quién exigir más…»
¿Cuál es la parte más complicada de dirigir?
Siempre son los actores, porque cada uno es distinto, hay que ser muy empático, tener mucha psicología, saber a quién puedes exigir más… Además, a algunos se les da mucho mejor la comedia, mientras patinan algo más o les cuesta el drama, es normal.
Ahí entra nuestra función, estudiando muchos los papeles, para saber asignarlos.
Y aun así se erra.
Por supuesto, nos ha pasado, por ejemplo en Laura Silvestre, que si bien el personaje de ‘La Llamada’ le viene al dedillo en otros le costaba más.
¿Qué nos puedes avanzar de la próxima obra?
Lleva el título de ‘Celler Román’ y es un drama -el primero elaborado por mí- sobre una familia propietaria de una bodega. Trata de una herencia, la de los viñedos principalmente.
En el extenso reparto sobresalen Pilar Yagüe, Verónica Rodríguez (haciendo de mala malísima) y José Miguel Rico, que regresa con nosotros tras bordarlo en ‘Escenas’.
«’Celler Román’ tendrá un excelente reparto, sobresaliendo Pilar Yagüe, Verónica Rodríguez y José Miguel Rico»
¿Habéis empezado los ensayos?
Lo harán el lunes 15 de septiembre, mientras el estreno está previsto para el viernes 19 de diciembre en nuestro Teatro Cervantes.
¿De qué forma combinas el teatro con tu profesión, auxiliar de vuelo?
Con mucha organización, pese a que muchos sospechan que tengo más horas al día (ríe). De la misma forma, es verdad que hay meses con más trabajo, en verano, que coincide con la época de descanso del teatro.
¿Es tan apasionante como parece?
Tiene su parte negativa, que no se ve, como estar todo el día volando, de ciudad en ciudad, sin apenas descanso… Sí es maravilloso conocer gente nueva a diario e infinidad de lugares.