Entrevista > Francisco Bartual / Director territorial de Hidraqua en la provincia de València (València, 5-enero-1969)
Cuando se cumple un año de la terrible dana que cayó del cielo sobre el sur de València, nos preguntamos en qué estado se encuentran actualmente las infraestructuras hidráulicas de la zona. Para hablar de ello nos atiende el ingeniero Francisco Bartual, quien ejerce de director territorial de Hidraqua en esta provincia y de gerente de Aigües de l’Horta.
Precisamente Hidraqua, a través de sus empresas mixtas, es la compañía encargada de garantizar el suministro de agua potable en catorce de los municipios que resultaron afectados por aquella descomunal riada en octubre de 2024.
De forma general, ¿cuáles son los retos principales que se buscan hoy en día en la gestión del agua?
En primer lugar, el medioambiental, ya que estamos sufriendo lluvias que cada vez son más intensas y a la vez periodos de sequía más largos. Lo que antes era un ciclo hidrológico… ahora se ha convertido en un ciclo ilógico. Sobre todo, estamos poniendo el foco en que las ciudades sean más sostenibles y resilientes.
Por supuesto también tratamos de ser muy eficaces a la hora de invertir en infraestructuras, porque evidentemente no tenemos fondos económicos ilimitados. Muchas de ellas están bajo tierra, y más del 30% tienen una antigüedad cercana a los 45 años.
Igualmente, a nivel social trabajamos en la concienciación, sobre todo a los más pequeños, de la sostenibilidad en el consumo. Al mismo tiempo tratamos de suplir la brecha digital para integrar a aquellas personas que se manejan un poco peor en temas de digitalización.
«Estamos poniendo el foco en que las ciudades sean cada vez más sostenibles»
¿Se aplica la Inteligencia Artificial (IA) también en vuestra labor?
Sí, diría que éste también es otro reto más. Hoy en día con la irrupción de la IA todo se digitaliza, y el gran objetivo es conseguir sacar partido a todos estos datos.
También debemos entender que no en todos los territorios se necesita el mismo grado de digitalización y es importante que toda esta tecnología sea realmente mantenible. A veces nos ocurre que tenemos dificultades para encontrar perfiles que nos ayuden a abordar estas infraestructuras digitalizadas en temas como puede ser la ciberseguridad.
Hablemos ya de la dana del año pasado. Imagino que, a nivel personal, debieron ser de los días más difíciles de tu trayectoria profesional. ¿Cómo afrontasteis toda aquella catástrofe?
Ya había vivido otros eventos parecidos, y aquellas experiencias me ayudaron mucho. Por ejemplo, en su día estuve gestionando recursos en la dana que cayó sobre la Vega Baja en 2019, en la covid e incluso en el volcán de La Palma.
Aun así, en lo personal fueron días muy duros porque todos los trabajadores de Hidraqua y Aigües de l’Horta teníamos que tirar para adelante, a pesar de que muchos de nosotros también éramos afectados. Algunos compañeros lo perdieron todo.
«La digitalización fue clave para poder reponer el servicio en solo 48 horas tras la dana»
¿Cuáles fueron las principales infraestructuras afectadas?
La dana afectó a unos 230.000 residentes en los municipios que nosotros gestionamos. Las desgracias personales fueron muy tristes, pero también nos encontramos con muchas dificultades en los cientos de kilómetros de infraestructuras. Por ejemplo, recuerdo una avería en un cruce de tuberías en el río Magro que abastecía a muchas poblaciones, o la caída de un acueducto de unos cuarenta metros que garantizaba el 50% del abastecimiento en Torrent.
Por no hablar de que unos 300 km del alcantarillado resultaron afectados. Supongo que recuerdas las imágenes de todos los voluntarios trabajando para limpiarlo. Fue un trabajo muy duro porque las depuradoras estaban también devastadas.
¿Cómo se afronta una situación así?
Desde el punto de vista de la comunicación, tratamos siempre de tener mucha tranquilidad en lo que se transmitía. Porque la gente nos hacía muchas preguntas, como si habría suministro o si el agua era potable.
Al mismo tiempo vinieron compañeros de otras provincias que nos permitieron multiplicar por cuatro los recursos en un momento que teníamos muchas necesidades tanto de personal como de camiones de limpieza.
«Ante las lluvias de otoño estamos limpiando imbornales en zonas inundables y de atascos»
¿Qué papel jugó la digitalización de las redes en esos momentos más trágicos?
Fue clave. Muchas infraestructuras tenían averías, pero ni se veían porque estaban totalmente enterradas en barro, y cortar todo el suministro suponía dejar sin agua a muchísimas personas. Sin embargo, al tenerlo digitalizado supimos perfectamente donde se producían caídas de presión, y por tanto teníamos que acudir a reparar.
Además, la digitalización nos sirvió para poder gestionar bien toda la barbaridad de recursos que recibimos, porque no estábamos acostumbrados a trabajar con semejante sobredimensionamiento de personal y equipos. Gracias a esto conseguimos reponer el servicio prácticamente en 48 horas y realizar las obras de ingeniería, que normalmente cuestan meses, en unos diez días.
Ahora volvemos otra vez a estar en periodo de danas. ¿Cómo se encuentra la infraestructura? ¿Qué tal preparada está la zona?
Ya no estamos en fase de emergencia, en el sentido que se está suministrando agua potable a los municipios sin problemas y no tenemos vertidos porque el proceso de depuración está funcionando.
Sin embargo, sí nos encontramos en fase de urgencia. Algunas infraestructuras aún están en estado precario, y necesitan una reconstrucción. Ahora estamos a punto de iniciar obras por unos 40 millones de euros que vienen del Real Decreto 7/2024. Queremos hacerlas más resilientes y fuertes. Por ejemplo, en Torrent construiremos un nuevo acueducto más elevado, o en el cruce del río Magro haremos una tubería hincada a mayor profundidad.
Afortunadamente en algunos casos las infraestructuras ya están respuestas y llegamos preparados para recibir estas próximas lluvias de otoño. Además, estamos en plena campaña de limpieza de imbornales para preparar zonas que son un poco más inundables o proclives a atascos.