Entrevista > María Victoria González Ortolá / Vicepresidenta del Club Natación Utiel (Utiel, 4-enero-1985)
El Club Natación Utiel es mucho más que una instalación deportiva. es una parte viva de la historia y el tejido social del municipio. Fundado en 1958, nació como una respuesta a la necesidad de un espacio de ocio y ha evolucionado hasta convertirse en un club familiar centrado en el bienestar. Hablamos con su vicepresidenta, María Victoria González, para repasar sus casi siete décadas de historia y conocer su visión de futuro.
Con casi siete décadas de historia, el club nació en 1958 más por una necesidad social que deportiva. ¿Cómo fueron esos inicios?
La idea surgió porque en el pueblo no había un lugar agradable donde pasar el verano, la gente iba a las charcas del río Magro. Se fundó como una sociedad para crear una piscina y prácticamente todo el pueblo se hizo socio. Empezó con quinientos socios fundadores y numerarios, una cifra enorme para la época, que sostenían y hacían crecer la instalación.
Más allá de las piscinas, el club se convirtió en el gran salón social de Utiel. ¿Qué papel jugó en la vida del municipio?
Creció mucho más allá de las piscinas. Se construyó un frontón y otras canchas, pero sobre todo se convirtió en el local social del pueblo. El salón, con su pequeño escenario, acogía los bailes de las fiestas, el Carnaval o las celebraciones de Nochevieja. Incluso la zona anexa al frontón funcionó como la discoteca de Utiel durante años.
¿Creen que los socios más jóvenes son conscientes de esa relevancia histórica que ha tenido el club para el pueblo?
No, los más jóvenes han conocido Utiel con otras infraestructuras como el Polivalente. Quienes tenemos ya más años sí veníamos de pequeños y hemos visto crecer el club. Pero la gente de alrededor de treinta años no es consciente de toda la historia que guardan estas instalaciones y de lo que significaron para generaciones anteriores.
«Buscamos que la gente se sienta en familia y apoyada»
La llegada del polideportivo municipal marcó un antes y un después. ¿Cómo cambió el enfoque del club de la competición al bienestar?
Antiguamente, al ser las únicas piscinas, había un equipo de natación de competición muy fuerte. La construcción del polideportivo cambió eso. Ahora el interés se centra en el deporte como bienestar, no como competición. La gente viene a jugar al frontón o al ping-pong por diversión y para estar activa, no para competir.
Esa evolución se refleja en la oferta actual, con la enseñanza de la natación desde bebés y la introducción de nuevas disciplinas.
Exacto. Ahora el foco no es ganar carreras, sino la enseñanza. Hacemos natación para bebés y niños, con el objetivo de que aprendan a defenderse y disfrutar en el agua. También hay entrenamientos para mayores, pero siempre desde un enfoque de salud. Además, la nueva directiva está introduciendo deportes más modernos para adaptarnos a los nuevos tiempos.
«Ahora el foco no es ganar carreras, sino la enseñanza»
Durante la dana, el club demostró una vez más su compromiso social, convirtiéndose en un punto de apoyo fundamental.
Totalmente. El club está muy cerca del barrio más afectado y muchos socios sufrieron las inundaciones. El Ayuntamiento nos pidió las instalaciones y nos volcamos. Guardamos y limpiamos el material que se pudo salvar del conservatorio y del instituto. También abrimos nuestras duchas para los voluntarios e incluso acondicionamos una zona para que pudieran dormir.
En un mundo con cada vez más oferta deportiva, ¿cuál es el principal atractivo del club que sigue atrayendo a nuevos socios?
Creemos en la importancia de este club, hay un componente sentimental muy fuerte. Es una instalación muy querida. Ahora mismo, se valora como un lugar que ofrece más tranquilidad e intimidad que el polideportivo. Es más recogido, familiar y privado, lo que atrae especialmente a familias con niños pequeños. Gracias a esto, hemos aumentado el número de socios en los últimos dos años.
«La nueva directiva está introduciendo deportes más modernos para adaptarnos a los nuevos tiempos»
Pronto se cumplirán setenta años desde la fundación. ¿Tienen previsto alguna celebración especial para conmemorar este hito?
Nosotros solo llevamos dos años en la directiva, así que todavía no estamos en ello, pero por supuesto que es nuestro objetivo. Ojalá podamos reconocer esa trayectoria y celebrar muchos años más de vida para este club tan emblemático. Es algo que nos haría mucha ilusión poder organizar cuando llegue el momento.
Mirando hacia el futuro, ¿cómo quiere la nueva directiva que evolucione el club para seguir siendo un referente en Utiel?
Queremos que el club sea operativo tanto en invierno como en verano, no solo durante la temporada de piscinas. La idea, que ya hemos empezado a desarrollar, es ofrecer actividades deportivas y lúdicas durante todo el año. Organizamos fiestas temáticas como Halloween, carnavales o fallas. Buscamos que la gente se sienta en familia y apoyada, ese es nuestro principal objetivo.