Los colegios de Alfafar son mucho más que edificios, son el segundo hogar de nuestros hijos, los espacios donde se forja el futuro de nuestro municipio. Garantizar que estos centros estén en las mejores condiciones posibles no es una tarea menor, sino un compromiso diario. Por ello, el Ayuntamiento ha aprobado un importante refuerzo del servicio de mantenimiento en todos los colegios municipales.
Esta decisión busca mejorar la calidad de las instalaciones educativas de forma proactiva. La meta es clara: acelerar la implementación de mejoras en todos los centros y garantizar su correcto y óptimo funcionamiento a lo largo de todo el calendario escolar. Se trata de una apuesta decidida por la calidad de los espacios donde nuestros pequeños aprenden y conviven.
Impulso necesario tras la dana
Este esfuerzo cobra un sentido especial si echamos la vista atrás. El recuerdo de la dana del 29 de octubre de 2024 sigue presente. Aquella tragedia ha obligado a realizar obras de gran calado y numerosas reposiciones en las infraestructuras educativas, que sufrieron daños evidentes. Fue un golpe que requirió una respuesta contundente para recuperar la normalidad.
Ahora, superada la fase de emergencia, quedan muchos trabajos de adecuación y remates pendientes. Estas tareas, más pequeñas pero igualmente cruciales, requieren una atención continuada para que los centros luzcan como nuevos. El compromiso municipal es, precisamente, poner a punto cada detalle y no dejar ninguna labor a medias.
La medida central de este plan de refuerzo es la incorporación de un técnico polivalente
Un técnico polivalente para el día a día
La medida central de este plan de refuerzo es la incorporación de un técnico polivalente. Se trata de un profesional con la categoría de oficial de primera, que se sumará a las brigadas municipales. Su contrato tendrá una duración de once meses, cubriendo así la práctica totalidad del curso escolar.
Este especialista será una figura clave para agilizar la respuesta a las necesidades de los colegios. Su polivalencia le permitirá abordar una gran variedad de incidencias, asegurando que los problemas se solucionen con rapidez y eficacia, minimizando las molestias para el alumnado y el personal docente.
La mejora del servicio se concreta en un amplio abanico de tareas, tanto de mantenimiento correctivo (reparar lo que se rompe) como preventivo (evitar que se rompa). El nuevo técnico se encargará de labores de albañilería menor, como la reparación de pequeños desperfectos en tabiques o baldosas.
También asumirá trabajos de pintura, fundamentales para mantener la dignidad y la limpieza de las aulas. La carpintería y la cerrajería serán otras de sus competencias, asegurando que puertas, ventanas y armarios funcionen perfectamente. Se suman la fontanería básica, para atajar fugas o averías menores, y los ajustes del mobiliario escolar.
Una de las funciones asignadas al técnico será el registro pormenorizado de todas las incidencias
Colaboración y respuesta a urgencias
El trabajo de este oficial no se limitará a las reparaciones directas. También servirá de apoyo fundamental a empresas especializadas cuando se requiera una intervención mixta. En tareas complejas de electricidad o climatización, su presencia garantizará una mejor coordinación y una solución más ágil.
Otro pilar de su labor será la atención de urgencias que puedan surgir dentro del horario pactado. La vida en un colegio es impredecible, y tener una respuesta rápida ante un imprevisto es vital. Además, colaborará en los montajes puntuales de actividades escolares, apoyando a la comunidad educativa en sus eventos.
Con esta acción el Ayuntamiento redobla su esfuerzo para cuidar y mantener los colegios
Modernización de la gestión
El refuerzo no solo aporta manos, sino también método. Una de las funciones asignadas al técnico será el registro pormenorizado de todas las incidencias. Este registro se realizará directamente en la aplicación de gestión municipal, unificando la información y mejorando el seguimiento de cada caso.
Esta digitalización del mantenimiento permitirá crear un historial de cada centro. Ayudará a detectar problemas recurrentes, planificar mejor las intervenciones preventivas y optimizar los recursos municipales, asegurando que el esfuerzo se dirige allí donde es más necesario en cada momento.
Priorizando el bienestar y la seguridad
La actuación aprobada supone una inversión total de 48.283,89 euros, IVA incluido. Esta cifra, con una base imponible de 39.904,04 euros, se financiará con cargo a las aplicaciones presupuestarias de los ejercicios 2025 y 2026, demostrando una planificación a medio plazo.
Con esta medida, el Ayuntamiento redobla su esfuerzo para cuidar y mantener los colegios municipales. Se prioriza de forma clara el mantenimiento preventivo, la filosofía más eficaz. Actuar antes de que ocurra la avería no solo ahorra costes futuros, sino que mejora la seguridad.
Este enfoque proactivo impacta directamente en el bienestar del alumnado y del personal de los centros. Un entorno cuidado, seguro y plenamente funcional es imprescindible. Facilita el desarrollo de la actividad docente diaria, permitiendo que profesores y estudiantes se centren en lo verdaderamente importante: la enseñanza y el aprendizaje.




















